Pensando en Voz Alta (Primera generación)

Final Alternativo (esta vez si)

Para la multitud:

Me quedo ahí sentada frente a la chimenea, cuando todos (Sirius, Remus, Michael, Tonks, Moody y Kingsley) vinieron a juntarse al salón. Yo seguía mirando la chimenea, estoy segura de que vi y oí a Harry en esa chimenea y no me harían cambiar eso.

Luego de un par de horas, escuchamos unos golpes en la puerta. Me levanto de un salto. Y me encamino a la puerta seguida del resto de los presentes. Al abrir me topo con un Severus Snape jadeante y nervioso.

- El niño Potter, junto con otros fueron al Ministerio de Magia, al Departamento de Misterios  creyendo que los mortífagos tenían a Black... hace rato y todavía no volvieron... - yo abro los ojos como platos, miro a Sirius con una ceja arqueada. 

- Una Potter no miente cuando a familia respecta, Sirius - digo y él rueda los ojos divertido. Palpo mis botas y comienzo a avanzar. Miré a Severus unos segundos.

- Severus, quédate aquí y cuando Albus llegué avísale... Nosotros iremos por ellos - digo saliendo de Grimmauld Place, los demás se quedan ahí parados -. ¡AHORA! - exclamo con tal furia y seriedad que dos segundos después, ellos estaban a mi lado y nos aparecimos en el Ministerio. Caminamos rápidamente hasta el Departamento de Misterios sin ser notados. Llegamos a este y todos me miraron.

- ¿Ahora a donde, ____? ¿Cómo sabremos dónde están? - pregunta Kingsley yo cierro los ojos.

- A la habitación del velo - digo nos acercamos a la puerta.

¡Crucio!

La inconfundible voz de Bellatrix se escucha con el cual yo creo, es su maldición favorita, y luego chillidos de dolor.

- ¡Bombarda! - exclamo apuntando a la puerta que estalla momentos después y los siete entramos corriendo.

Harry estaba junto a Lucius Malfoy cerca del velo. Este último se gira levantando la varita, pero Tonks ya había lanzado un hechizo aturdidor. Mientras que yo me precipito hacia Harry, lanzando hechizos y algunos maleficios a los mortífagos. Este se dirige al muchacho que estaba en el piso y se murmuraban cosas, en ese momento, un mortífago se aparece frente a mi.

- ¿Y tú eres...?

- ¡Tu peor pesadilla! ¡Fractis ossibus! - exclamo apuntando a su muñeca, con la cual sostenía su varita y esta se quiebra haciendo que suelte la varita. Paso a su lado dándole un puñetazo en la nariz, rompiéndola - Eso es por meterte en mi camino a mi sobrino, imbécil - corro, esquivando un hechizo del sujeto al que le estampé mi puño en su nariz, hasta que me doy vuelta -. ¡Terraemotus! - el suelo comienza a temblar, haciendo que todos pararan sus peleas y una grieta se abre debajo del haciendo que caiga dentro - ¡Clausum! - y otro temblor haciendo que la gruta se cerrara, encerrándolo, pero no matándolo. Luego todo vuelve a seguir normal, cuando un mortífago tomó a Harry por el cuello con fuerza - ¡Stillabunt! - exclamo señalando la espalda del mortífago y este cae soltando a Harry en el momento que el otro muchacho se abalanzaba sobre el mortífago clavando la varita en uno de los ojos.

- ¡DESMAIUS! - exclama Harry apuntando al mortífago y este se desmaya, y la mascara se mueve dando a ver su rostro: Macnair. Corro hacia Harry y lo atraigo a mis brazos, para después corrernos junto con el otro chico ya que Sirius y otro mortífago pasaron peleando por nuestro lado. Ruedo los ojos y apunto al mortífago.

- ¡Desmaius! - y el mortífago cae. Sirius se gira a verme con una sonrisa.

- ¡Gracias, amor! - me dice para después comenzar a luchar contra otro mortífago.