Capítulo 8

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Madison

-¿Qué tal este?-.

Me gire para que Maggie viera el conjunto que tenía puesto, era sencillo pero al mismo tiempo era perfecto para la noche, era viernes y quería volver a ver a ese hombre enmascarado para al menos preguntarle su nombre o que me diera una pista de quien era él y esperaba correr con la suerte de volver a verlo.

-Esta perfecto, además tus pechos se ven tan grandes por la blusa-. Me guiño un ojo.

Una sonrisa se volvió completamente grande al escuchar que se me veía bien, además de que mis pechos lucían muy bien, volví a girarme para verme en el espejo de cuerpo completo, me veía bien, lucia espectacular que no me lo creía eran esos momentos de la vida en los que no te crees como te ves, ese momento en el que te sientes bien contigo misma y eso me estaba pasando en ese momento, me veía bien y me sentía bien y esperaba verme sexy para mi enmascarado. Acomode un poco mi cabello asegurando de que no tuviera ningún nudo, me coloque unos aretes y un poco de perfume tenía que oler bien para él, tomé mi bolso que estaba en el buro a un lado del espejo y metí mi teléfono, llaves, dinero suficiente y perfume, además de una pluma y un papel para darle mi número de teléfono.

Tome un poco de aire y no pude evitar sonreír nuevamente al verme, es que no me creía lo que veía ante mi. Volví a mirar a Maggie que no paraba de sonreírme para así acercarse a mi y tomar mis manos.

-¿Tendrás sexo esta noche?-. Me sonrió con picardia.

Reí levemente.

-No... Bueno no lo sé, es que... Dios Maggie nunca he echo algo así en mi vida no soy de esas mujeres que buscan sexo con el primer desconocido que ven en un bar-. Mis nervios comenzaron a florecer.

-Cariño, siempre hay una primera vez en la vida, si ese hombre te puso cachonda y deseosa, disfrutalo y ten un buen sexo con un desconocido-. Me guiño un ojo.

Solo pude asentir con la cabeza. Luego de sus palabras de apoyo para animarme a tener sexo con el hombre de la máscara ella también comenzó arreglarse ya que saldría con un chico que había conocido en una aplicación de citas, pensé que tenia algo con Thomas luego de que los viera algo cariñosos pensé que tal vez estarían saliendo como esas veces, pero creo que solo salían por ocasiones. Al terminar de arreglarme ambas bajamos a la estancia para poder tomar una copa de vino, yo para entrar en calor y Maggie por el gusto de tomarse algo conmigo, era una buena amiga por eso le tenía tanto cariño, mis niños estaban en la sala de estar viendo televisión en lo que su padre llegaba por ellos, el cual no tardo mucho.

Fui hacia la puerta de mi casa para abrirla y ahí estaba el parado con su misma actitud de hombre malo y policía malp pero no de los corruptos creo que Max había visto mucho las películas de Will Smith "Bas Boys" el era Will pero en blanco y con cabello ligeramente rizado, recuerdo como me gustaba jugar con sus rizos y su barba, era mi debilidad los hombres con barba.

-¿Saldrás?-. Preguntó sacándome de mis pensamientos.

-Eso es algo que no te importa, Derek y Dakota te esperan-.

Me hice a un lado para dejarlo pasar, en eso Maggie apareció en el marco de la cocina con su copa de vino en una mano mientras su brazo abrazaba su cintura y miraba a mi ex esposo con mucha seriedad.

-Wow, no pensé que ya estábamos en noche de brujas-. Comentó Max mirando de la misma forma a mi amiga.

-¡Que gracioso! Deberías ser cómico, imbécil-. Rodó los ojos.

-Ya basta ambos-. Dije interviniendo entre ellos-. Derek llego papá, trae a tu hermana-.

Los tres nos quedamos en silencio, un silencio bastante incómodo y más porque ellos no dejaban de mirarse con seriedad parecía que se estaban retando con la mirada era una lucha entre ellos, Maggie era una persona que podría ser tolerante ante muchas cosas pero en otras no lo era y podría comportarse de una forma que te daba a entender que estaba molesta. Ella me había sugerido que no dejara que Max no viera a los niños, pero por muy enojada que estuviera con su traición sabía que Max amaba a sus hijos, claro que a veces ese amor lo ponía en duda porque parecía que amaba más su trabajo resolviendo crímenes que estar con ellos.

-¿A donde irás?-. Volvió a preguntar Max cruzandose de brazos.

Rodé los ojos y también me cruce de brazos.

-Eso es algo que no te importa Max, solo cuida a mis hijos y nos vemos el Lunes-. Conteste de la mejor manera posible ya que comenzaba a molestarme.

-¿Irás de fiesta?-.

-Max, eso es algo que no te importa, si, si voy a salir es porque quiero ¿Ok?-.

Di media vuelta para ir a la cocina u claro oyendo los pasos de él detrás de mí, tome mi copa para darle el trago que me quedaba.

-Pues me importa, porque si vas a beber no vas a manejar así-.

-¡No me jodas Max! Preocúpate mejor por tus hijos ¿Irás al partido de tu hijo por cierto?-. Me volví a cruzar de brazos.

Max me miro por unos segundos mirando después a Maggie que seguía viéndolo de la misma forma, volvió a mi y sabía perfectamente bien que significado tenía esa cara de idiota de seguro estaba buscando una excusa para no poder ir o al menos justificar su ausencia para el partido del día de mañana de mi hijo, sabía que Max se llevaba a mis hijos pero a veces me los dejaba cuando tenía cosas que hacer u creo que me dejaría a los niños mañana.

-No, no lo sé... Tengo un caso que ni je terminado-. Se excuso.

La verdad es que ya no sabía que creer y que no.

-Sabes que Max olvídalo, en serio, yo mañana iré apoyar a mi hijo en su primera partido, lo quiero mañana temprano en mi casa ¿Oíste?-. Exigí.

-Los traerá mi madre-.

-Bien porque no quiero verte-.

Sin más tome mi bolso que estaba en la isla de la cocina para así salir caminando a la sala de estar, Derek estaba guardando sus cosas en su mochila sin mucho ánimo, me acerque hasta él y mi hijo me miró con un poco o más bien con mucha tristeza.

-Cariño ¿Qué ocurre?-. Le pregunté girandolo para que enfrente de mi.

Derek tenía un pequeño puchero en sus labios.

-Papá no ira a mi partido ¿Verdad?-. Diko con desánimo.

Acaricié su mejilla con cuidado, me dolía verlo triste y más si era por su padre, mi hijo no se, merecía sentirse así por culpa de Max, pero él no me ayudaba en nada tomándole más importancia a su trabajo o sea entendía que hubiera muchos homicidios y que había gente mala pero Max no era el unico detective, no, no lo era pero él así lo quería. Abrace a mi hijo y él a mi.

-No te vayas mami-. Dijo en mi oído.

-No cariño, aquí estaré cuando vuelvas de donde tu papá-. Le dije.

Derek negó con la cabeza, lo aleje de mi para mirarlo y sus ojitos se estaban llenando de lágrimas, ne gire un poco al oir paso detrás de mi y ahí estaba mi dolor de culo.

-Campeón es hora de irnos-. Dijo Max dándole una sonrisa pequeña.

Derek se limpio las lágrimas cob coraje.

-¡No! Me quedo con mami, vete-.

Entonces Derek salió corriendo de la sala empujando levemente a su padre pero no ll movió nada, me puse de pie para poder hablar con él pero fue muy tarde ya que él habia subido ya a su habitación y azotando la puerta, suspiré y me cruce de brazos.

-Felicidades Max, tu hijo ya se dio cuenta de que no es importante para ti-. Lo mire molesta.

Él no dijo nada solamente dio la media vuelta azotando ahora la puerta de la casa, Maggie se acerco a mi para darme un pequeño abrazo.

-Ve a divertirte cariño, yo cuido a los niños-.

-No, no como crees Maggie yo me quedo con ellos-. Sonreí agradeciéndole.

-No, cariño, ve disfruta la noche que echo a perder Max yo hablaré con Max, di, así que disfruta la noche-.

-Maggie no quiero que tampoco aproveches el viernes, yo me quedo con los niños y... -.

Maggie negó con la cabeza y me tomo de mks dls brazos.

-No, he dicho que te vayas y disfrutes, yo no iba hacer nada solo iría a mi departamento a ver series y una copa de vino, así que no haría nada importante, mejor lo hago aquí en tu casa con los niños-. Me guiño un ojo.

Asentí con la cabeza y mire sl segundo piso para ver si Derek salía pero no, volví a mi amiga que volvió a guiñarme un ojo. Y sin más salí de casa.

A MediaNoche |+18|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora