Max
Termine mi cerveza para seguir con la siguiente botella, me sentía ansioso y molesto, sabía perfectamente que iba a salir con ese idiota ¡¿Porque iba a salir con él?! Habiendo otros tipos ¡¿Porque él?! No entendía y claramente no quería entender el porque ella salía con ese idiota, lo investigue ¡Claro que lo hice! No podía quedarme de brazos cruzados sin saber quién era el hombre con el que salía la madre mis hijos, podría ella estar saliendo con un maldito loco que podría hacerle daño a mis niños, no, ni loco dejaría que ella saliera con alguien como él, pero hasta eso estaba limpio el maldito, completamente limpio, de buena familia, tenían dinero, mucho diría yo, no tenía antecedentes penales ni algún tipo de disturbio ¡Nada! Buen alumno en la universidad con un alto promedio, divorciado y con una hija, la madre era también profesora pero que trabajaba en Seattle, sin ningún tipo de antecedente ¡Ambos limpios! Eso me molestaba aún más, pareciera que el tipo si es un buen tipo, maldito.
-¡Quieres parar!-. Grito Andy bajando mi botella de cerveza.
-¡Qué mierda Andy! Déjame beber rn paz quieres-.
-Eres ub ridículo Max, un verdadero ridículo-. Escupió con molestia.
-¿Ridículo? ¿Porque ridículo?-.
Andy rodó los ojos dándole un trago a su botella de cerveza.
-Ridículo por estar acosando a tu ex esposa, tu jodiste tu maldita matrimonio por haberte acostado con tu cuñada y con otras más-.
-Fue un error ¡Madeline fue un error de una noche! Olvídalo-. Conteste molesto.
Andy bufo negando con la cabeza. Era mi mejor amiga, la había apodado en todo desde el momento en que nos conocimos, si, ella me ayudaba y yo a ella pero a veces se me soltaba tanto la lengua que detestaba tanto cuando me sermoneaba sobre los errores que había cometido en mi matrimonio y durante el. Se me soltaba la lengua en algunas ocasiones.
Tome mi celular para ver si tenía un mensaje de Madison, una respuesta a lo último que le mandé, pero nada, ni había absolutamente nada ¿A donde iría? ¿Porque salió con Nate? ¿Qué quería él con ella? Tenía muchas preguntas y ninguna tenía una respuesta, no, no era una ¡Eran varias! Mierda, me estaba volviendo loco y se que parecía estúpido de mi parte el volver a estar con Madison, pero cuando estuvimos a punto de volver a tener sexo me recordó cuando éramos jóvenes, cuando la pasión entre nosotros era tan enferma y tan sensual. Aquella noche en el club y lo hicimos me sentí tan vivo y deseoso por volver a tocarla y quería hacerlo una y otra vez.
Le mande un mensaje a Maggie, la mejor amiga de Madison.
Max: ¿Donde fue Madison?
Maggie: ¿Porque quieres saberlo? 😒
Max: ¡Porque si! Ahora habla😠
Maggie: Sabes que Max puedes irte al demonio, luego de que le haces daño quieres hacerle la percusión, eres un hipócrita
Max: No tanto como tú, muñeca
Azote mi teléfono en la mesa llamando la atención de todos a mi alrededor pero ls verdad es que me importaba una mierda que todos me miraran como si estuviera loco, no me interesaba nada en ese momento más que buscar a Madison, volví a tomar el celular para llamarla, pero me mandaba a buzón, la encontraría si o si, ella seguía siendo completamente mía.
Antes cuando estaba en la escuela de policías teníamos una materia de informática que nos ayudaba mucha para algunas casos en los que necesitábamos ya sea infiltrarnos en algunas computadoras, llamadas o cámaras para hacer nuestro trabajo, era algo realmente divertido y así muchas veces podríamos buscar la ubicación de las personas por el teléfono celular y yo fui bueno en esa materia, con diez si puedo presumir, era alguien destacado en mi trabajo y escuela así que esta no sería la excepción. Andy me había dicho luego de que saliéramos del bar que no cometiera ninguna estupidez, según ella, pero yo amaba hacerlas a lo que volví al trabajo para adentrarme alguna computadora y ligarla al celular de Madison, no tardaría mucho era fácil solo necesitaba una dirección solamente eso, una dirección para poder ir tras ella.
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A MediaNoche |+18|
Romance-¿Porqué haces esto? ¿Porqué no puedes dejarme en paz?-. Pregunté frustrada y sintiendo las lágrimas inundar mis ojos. -Porque sigues siendo mía y de nadie más-. Dijo en un tono sombrío que conocía perfectamente bien. Trague nerviosa de ver la forma...