cuarenta y uno

389 25 5
                                    

MADELINE

"Querida Madeline,

           incluso decirte querida me hace sentir culpable. No sé cómo empezar a hacer esto, pero trataré de ser honesto.

Soy un total extraño para ti, y como es de esperarse, te sientes totalmente confundida al estar leyendo una carta mía. Una carta de tu padre.

No hay manera de disculparme con respecto a mi total abandono. Pero quisiera explicarte la injustificable razón. No lo haré por medio de esta carta, pues ese tipo de cosas se dicen frente a frente. Siempre fui un hombre decidido a enfrentar cualquier adversidad, a enfrentar la realidad y mi destino; a excepción de ti, de la vida que tendría siendo tu padre. Y eso es imperdonable. No es que no te quisiera, eras lo que más deseaba junto con Andrea; Dios, ella y yo lo sabemos. Pero las cosas se salieron de control y me comporté como un cobarde.

Tal vez escribí eso como una táctica para hacer que sientas curiosidad hacia mi, hacia saber mi verdad, hacia saber la razón que me llevó a cometer semejante atrocidad: Abandonarte, a ti y a tu madre .

Pero el motivo de mi carta no es dejarme como un pobre incomprendido hombre. 

Quiero disculparme, sí. Y lo haré solo si tú me lo permites.

Me enteré de los recientes sucesos, Madeline. Sobre aquél narcotraficante inexperto y bastardo, sobre la ingenuidad de tu madre y el mal rato que te hizo pasar. Estoy al tanto de la situación. Tu madre ha perdido todo, su fortuna y su éxito. 

Durante estos años siempre he estado al tanto de ustedes dos. Pensé que ella, siendo una mujer de negocios exitosa, te daba una vida digna. Y eso parecía, no lo negaré. 

Entonces, sonará estúpido  y oportunista de mi parte... Pero quiero ofrecerte algo. Algo para ti  exclusivamente. Una nueva vida, lejos de la farándula que tu madre ha provocado. No me atreveré a decir que Andrea ha sido una mala madre, sería ridículo viniendo de mi parte por obvias razones.

Sé que no podré conseguir tu perdón fácilmente. Pero déjame darte una oportunidad, y tú dame una valiosa y única oportunidad. 

Si me dejas, responde a esta carta y envíala a la dirección que dejaré a continuación. Y si no recibo una respuesta, entenderé que no estás interesada, y respetaré absolutamente tu decisión y jamás volverás a saber de mí.

Te deseo dicha y la más abundante felicidad en la vida, Madeline.

Con cariño, Colin".




Después de ese largo y teatral manuscrito, en la esquina inferior derecha, venía escrita una dirección.

En Italia. La maldita Italia.

No podía creerlo. Suspiré con pesadez, hice bola la carta con una mano y me dejé caer en el respaldo de sofá. Tallé mi rostro con frustración.

Ese hombre estaba loco. 

Jamás había oído una mínima cosa sobre él, y de la nada, se atrevía a mandarme una carta diciendo que me ofrecía una nueva vida. 

La frustración y la impotencia me hicieron llorar durante minutos, con los ojos bien cerrados y sollozando como una niña pequeña haciendo el berrinche de su vida.

Después, reaccioné.

Nunca necesité de mi padre. Mi madre nunca lo hizo,  ¿por qué hacerlo ahora? Me pregunté.

Ese hombre, el de la carta, se podía ir bien al carajo.

~♤~

Revisaba unos archivo que el jefe me había pedido que estuviesen en orden. Estaba en mi escritorio concentrada.

𝕻𝖗𝖔𝖒𝖎𝖘𝖊𝖘 ☆𝕯𝖆𝖛𝖊 𝕸𝖚𝖘𝖙𝖆𝖎𝖓𝖊☆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora