LXXXIII: Danger.

3.1K 200 65
                                    

Recargué mi hombro sobre el tronco del árbol al sentir mis piernas flojear. Cerré los ojos un momento, tratando de respirar profundo.

—¿Sophie? —Escuché a alguien llamarme.

Me giré a mirarle. Noté su silueta acercarse a mi, sin embargo no podía ver su rostro con claridad.
Las personas a nuestro alrededor no tardaron en detener su caminar y poner su atención en nosotros.

—¿Estás bien? —Escuché nuevamente.

Negué apenas perceptiblemente. Tragué saliva, sintiendo mi cuerpo cada vez más pesado.
—No me siento bien. —Murmuré antes de sentir mis piernas fallarme completamente y todo volverse negro.

Abrí mis ojos con pesadez. Las ramas de los árboles me impedían mirar la luna en su punto más alto. Intenté levantarme, sin embargo una mano detuvo mis movimientos. Me giré a verle, esta vez podía observar su ojos mieles perfectamente.
—Vuelve a dormir.

Negué levemente.
—Estoy bien.

Ashton me miró con desaprobación.
—No lo parecía hace unas horas.

Un suspiro salió de mi boca, volviendo a recargar mi espalda en aquél montón de tela (en un intento de cama improvisada).
Podía sentir la mirada de Ashton sobre mí en todo momento.
—Hoy era mi turno de vigilar mientras duermen. —Intenté cambiar un poco el tema, pues en su cara veía la intención de hablar conmigo sobre cosas que... sinceramente, no me sentía lista para hablar.

—No es la primera vez que te sientes mal, ¿cierto? —Cuestionó.

Aquí vamos.

—Ashton, estoy bien, en serio.

—Deja de mentir ¿quieres? —Soltó, cruzando sus brazos a la altura de su pecho. —He notado que casi no duermes... ¿y cuando fue la última vez que comiste algo?

—Comí una lata de sopa...

—Sí. Justo el día en que Rick echó a Oliver. —Me miró mal. —Eso fue hace tres días, Sophie.

¿Ahora es policía?

Me incorporé sobre mi lugar, quedando sentada frente a él.
—Sabes que no tenemos muchas provisiones. —Me limité a responder.

—Muchas no, pero las suficientes para cada uno. —Habló, a la vez que acercaba a mí un plato con comida. —Tara y Michonne cazaron un par de ciervos hoy.

Aparté mi mirada, a la vez que un suspiro salió de su boca. Sentí su mano acercarse a mi mejilla, acariciándola levemente, provocando un cosquilleo en mi cuerpo.
—Te estas haciendo daño, Sophie. No puedes seguir así.

Relamí mis labios, dejando un silencio en el ambiente.

—Sé que es por Jack. —Afirmó, haciendo que lo mirara. —Pasé por lo mismo cuando perdí a Clarke.

Una horrible sensación inundó mi pecho.

—Pero debes tener algo en claro, Sophie... no podíamos hacer nada. —Soltó con sinceridad en su voz. —Nadie tiene la culpa aquí.

—Sé que pude haberlo evitado. —Solté, sintiendo el nudo en mi garganta.

—Él quiso hacerlo. —Añadió Ashton. —Y sabes perfectamente que no le haríamos cambiar de opinión. —Bajé mi mirada, perdiéndola por un momento en mis dedos. —Desde que Jack murió te has encerrado en tu propia burbuja. —Habló con cierta tristeza en su voz. —Como si Jack se hubiese llevado con él el último rayo de luz en ti.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Apr 06, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Always | Carl Grimes (Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora