Peor que no tener respuestas, es no tener preguntas.
Entro por la ventana como ya era costumbre y exhalo fuerte.
Había sido un día largo y tenía que contarle la novedad a Zayn.
No podía negarlo, ese cambio en Sofy le hizo dudar...
Cerró con cuidado y sin mirar la habitación, se apresuró a bajar las escaleras; pero no encontró nadie más en la casa.
Bufo y se quedó en medio de la cocina, cerro con cuidado los ojos y se dijo a si mismo que debería aprovechar y hacer los deberes.
La idea de limpiar la casa se le vino a la mente, pero después un "debería..." se hizo presente...
¿Debería borrar las manchas de sangre? ¿Debería hurgar más entre las cosas de su difunto amigo?, no, un estremecimiento le dijo que no.
Comenzó con matemáticas, todo lo contrario a español.
Español era sencillo, pero Matemáticas no.
Las formulas no eran lo suyo, pero ojala y la vida estuviera hecha de fórmulas y pasos a seguir, así sería exacto, como las mates que el odiaba.
Español era otro cuento. En su clase de lengua analizaban poemas y textos con infinidad de significados que uno le ponía al autor, todos diferentes, ninguno igual a otro.
Pero a pesar de que pareciese complicado, a Harry le encantaba porque aprendía de ellos y era un mundo entero lo que se habría a sus ojos.
Poesía, es el arma de un ave para luchar por sus alas.
Tomo su cuaderno y un lápiz y comenzó a garabatear números y líneas, cosas sobre la pendiente y la concavidad.
No pudo evitar bostezar, las mates no eran lo suyo.
...
El frio aire golpeo contra el cristal, provocando un rugido más fuerte a la unión de los truenos. Las luces provenientes de fuera se encendían mientras otro relámpago golpeaba contra el viento.
Harry se cubrió más con la sabana y se giró en el sofá, tratando de conciliar el sueño.
Esta era una de esas noches en las que odiaba estar en casa de Niall, y aún más estando solo.
Zayn no había llegado en todo el día y ya eran las 9:00pm, y una tormenta azotando afuera no era la mejor imagen que deseaba calmar a Harry.
Su mente no tarda en volver al pasado como muchas veces hacía, y eso a Harry, le aterrorizaba.
Las imágenes le volvían a la mente y de un momento a otro las cicatrices le ardían, la garganta le recordaba que alguna vez algo estuvo mal, y sus ojos se cerraban fuertemente.
El ambiente helado no ayudaba mucho, el ruloso no le tenía miedo a los fantasmas si eso cree,
Pero les tenía miedo a sus demonios que se desataban en la obscuridad.
Esos recuerdos que le azotaban con helados movimientos,
Y le privaban de todo lo demás.
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Cuando alguien se va |Larry & Ziall| {LCFNL2}
FanfictionCuando al mundo se le ocurre ser caprichoso, tienes dos opciones: Caer o seguir intentando. A Harry le han dado otra oportunidad para optar por la segunda opción. Ahora, él tendrá que aprender las bellezas de la vida mientras intenta resistir a los...