Cuando alguien se va |Larry & Ziall| {LCFNL2}

Epílogo.

Epílogo.

La tierra y la hierba seca bajo los zapatos negros del chico crujían con cada pisada.

Algunas flores secas comenzaron a moverse con el frío llegante del otoño; Zayn sostuvo con una mano el ramo de flores mientras con la otra cargaba un jugo de naranja embotellado.

Cualquiera habría apostado que se trataba de un enamorado que acababa de perder a la persona que amaba, y no estaban equivocados.

El moreno estaba vestido con un traje negro y una corbata que hacía juego, más unos zapatos muy limpios y el pelo realmente impecable. Guapo, un chico malo muy guapo.

Se adentró en el cementerio entre lapidas y flores secas que eran trasladadas por el viento.

Había conseguido un boleto a Mullingar, había conseguido la dirección y aquí estaba, un 12 de octubre por primera vez en estos casi 6 años. Ahora el único problema era encontrar el lugar exacto, aunque no era un lugar grande era deprimente el ambiente.

Algunas personas estaban allí dejando flores, y del otro lado había una familia despidiéndose de su anciana abuela.

Más allá algunos niños perseguían escarabajos y otros más luchaban a ser piratas.

Leyó algunas inscripciones de las que no parecían muy viejas, pero no Provo ni pizca de suerte, hasta que, 2 minutos después sus ojos fueron a parar a una figurilla entre el pasto, incido frente a un recinto de una cruz, y reconoció ese cabello y esos ojos.

Se apresuró a caminar y cuando estuvo de frente al chico, esté alzó los ojos.

La mirada del moreno se encontró con unos preciosos ojos azules.

-Vine a ver a la criatura. -dijo Greg sonriéndole a Zayn, a un lado de un entierro pequeño donde estaba su hermanito.

Zayn por un momento no podía creer que estaba allí, parado frente a la inscripción que decía el nombre completo y las dos fechas tan importantes en su vida. Habían pasado tantos años, pero nunca estaría preparado para no ver los ojos azules de Niall nunca más.

Zayn se inca a un lado de Greg, sin saber cómo controlar sus emociones.

-Me alegra volver a verte, amigo. -dijo Greg sin despegar la vista del lugar.- no creí encontrarte aquí...

Zayn suspiro.

-Digo lo mismo, Greg. -Zayn lo miró con una sonrisa sincera en los labios, agradecía no estar solo en esos momentos.

-Sabes, creo que nunca estaré preparado para esto... -suspiro el ojiazul- Vengo dos veces al año, en su cumpleaños y el día de hoy, pero nunca me acostumbraré a la idea de que mi hermanito está allí abajo y no de vacaciones en las Bahamas o yo que se...

-El no está allí abajo... -Greg lo miró como si se hubiera vuelto loco.- el está allá arriba. -Zayn miró a Greg, y cuando este otro lo vio tuvo el impulso de pasarle la mano por la espalda para consolar los ojos rojos y llorosos del moreno.

-Es cierto, no está aquí abajo, tienes razón hermano... él está en el cielo.

El viento soplo a ambas cabelleras y el tiempo paso en silencio hasta que el frio comenzó a penetrar en sus chaquetas.

-Zayn, creo que hablo por mi mamá y por mi cuando te invito a tomar un café o algo a casa.- le puso la mano en el hombro mientras ambos se levantaban.

-No vengo a ser una molestia en realidad...

-¿Molestia? ¡Amigo! eres de la familia, mi mamá me echaría de la casa si sabe que estuviste aquí y no te lleve a cenar con nosotros.

Zayn sonrió.

-Está bien -accedió Malik limpiándose las lágrimas.- Solo si antes me dejas ponerle las flores, cielo... -se burló del apodo que le puso su madre para aligerar el ambiente.

Ambos comenzaron a reír, pero las lágrimas de Malik no disminuyeron, al contrario, se aumentaron en cuanto estuvo frente a frente poniendo flores nuevas junto a las demás en el muy bien y arreglado pedacito de tierra que le correspondía a Niall.

Se quedó por unos minutos viendo la inscripción, y cuando Greg le volvió a poner la mano en el hombro para invitarlo a seguir y caminar, Zayn sonrió satisfecho.

Era cierto, Niall, un soñador más, estaba allá arriba, en el cielo.

Y Zayn nunca se iba a cansar de amarlo.