Cuando alguien se va |Larry & Ziall| {LCFNL2}

Capítulo 12 [Parte 4 y 5]

Hielo que tintinea mi soledad.

Gemma se hallaba dormida sobre la cama del ruloso, mientras los ojos verdes de Harry rojos de tanto llorar leían el diario.

Punzadas en el pecho le advertían que probablemente estaba haciendo mal, recordándole la vez que leyó el diario de Gemma sin su permiso. ¿Estaba haciendo lo mismo ahora? ¿Leer el diario de Horan era malo?. Quizá, pero nadie podría responderlo con exactitud.

Uno de sus pies se movía como un extraño tic y hacía que su cuerpo temblara sin prestarle mucha atención.

Había notado que faltaban algunas hojas, en las fechas del 26 de Abril al 29, y llegando a Septiembre también faltaban. Igual podría ser que Niall no hubiera escrito esos días, y Harry no le tomo mucha más importancia.

Bien recordaba ver al rubio ir y venir con su cuadernillo para todos lados, desde fiestas hasta visitas al médico. Había comenzado como un proyecto de la escuela, en la que cada alumno de la institución probaría escribir su mundo en un amigo de hojas. Harry recordó que Louis había conseguido uno con zanahorias en la tapa, y el del era color blanco. Zayn había gruñido y nunca más lo había visto traer su diario, Sofi lo pateaba cada que podía, y Liam y Rocci compartían el color crema pastel en los suyos.

El proyecto tenía como propósito ayudar a los alumnos a conocerse y a darse cuenta de lo que pasaba a su alrededor y para tener un registro sobre lo que habían hecho tal día. Los maestros de español y literatura solo revisaban que tuviera cosas escritas, pero jamás lo leían, y valía 10% de la calificación de la materia, un regalo fácil de conseguir.

Pero el proyecto fracaso cuando personas como Richard Steven de 7° grado tomaban "prestados" los diarios de los compañeros, prácticas que después tomaron Andrew, Austin y Jeffrey. El proyecto había dado desde hace año y medio que los chicos habían entrado al colegio.

Niall parecía ser el único que aún seguía con la práctica, a pesar de ya no ser obligatoria.

Leyó el diario desde su inicio hasta acercarse a las fechas de "la mano temblorosa", aquellas en las que el mundo de Niall se había visto en decline. 

Algunos rulitos de su cabello escapaban de su gorro de lana y traviesamente tapaban un poco sus ojos. Esos ojos verdes tristes que se mantenían leyendo conforme avanzaba el día.

Casi darían las 7 de la noche, ya llevaba más de dos horas leyendo, pero no le importó.

Cada vuelta de páginas era una página menos de distancia hacía lo verdaderamente importante, el por qué.

Pero mientras pasaba esto, Harry en mente se encontraba en una lucha entre hacer o no hacer.

Si le dijera a Zayn que tenía el diario, ¿Qué ocurriría después?

Austin Mahomett había llevado esa tarde el diario a su casa, y seguramente tubo una razón para ello.

Y Harry no quería, pero ya estaba imaginando que aquel chico de su edad  tenía algo que ver, con el suicidio de Niall.

La suave respiración de Gemma le recordaba que lo que estaba leyendo solo eran recuerdos, para que no se perdiera en ellos.

Entró a aquel día, el 27 de Agosto y la pierna de Harry aumento de velocidad su tic, su corazón se aceleró al dar por hecho las palabras rotas y la maraña de letras que narraban, la primera violación de Niall Horan.

Sus ojos se abrieron y tuvo la necesidad de gritar fuerte, fuerte hasta que sus propios oídos quedarán sordos.

A sus piernas temblorosas cayo un postip, con una letra extraña pero igualmente desfigurada, tenía escrito un "Lo siento".

El corazón de Harry amenazo con salirse de su lugar, dejó el diario a un lado.

-¡Gemma! -la movió desesperadamente para despertarla.

-¿Que pasa Harry? -pregunto ella limpiándose el sueño.

-¡Necesitas llevarme a Robles!

-¿He? -la miró ella.

Los ojos de Harry estaban muy abiertos y sus manos temblaban.

-Porfavor -lloriqueo el ruloso que había reconocido la letra de la pequeña nota.

Capítulo 12.    [Parte 5]

Bajo las alas de la muerte, esos brazos de hombre que te aprietan fuerte...

Acelero ante la insistencia del ojiverde a su lado, y palideció un minuto después.

Gemma estaciono el auto frente al bullicio de luces y gente de la colonia Robles, Londres.

Los ojos de ambos hermanos se colorearon de rojo y azul que desprendían los faroles de las ambulancias y los autos de los oficiales. Miraron personas reunirse a presenciar lo ocurrido.

La casa #8 era el centro de la atención, donde el sonido de la sirena anunciaba un acontecimiento terrible.

Y después de dos meses, Harry sintió ese tirón en el pecho que le decía lo horrible que es la vida y lo triste que puede ser el final.

Los paramédicos salieron por la puerta de madera de la casa, mientras sostenían una camilla de un rostro conocido.

Harry dejó de mirar para salir corriendo en dirección al muchacho de los ojos grises.

Gemma corrió tras de el para detenerlo.

Harry contuvo la respiración a 3 metros de distancia del cuerpo, que tenía los labios manchados en sangre y el cuello de la camisa también {A Niall le escurría sangre de la boca provocado por los órganos muriendo dentro de el -había terminado de explicar Liam tras la narración horrenda de Zayn}.

Los paramédicos le colocaron una mascarilla de oxígeno, mientras la madre del chico, lloraba y se debatía a horrores sobre los escalones de su casa para que le permitieran estar junto a su hijo.

-¡No se lo lleven! ¡No! ¡Mi hijo no! -gritos desgarraban el alma del pobre chico que presenciaba la esencia del suicidio por segunda vez.

Un paramédico salió detrás sosteniendo, una botella de medicamento.

Las luces del bullicio parecían danzar en una ciudad de caos, dolor y confusión.

Miró como subían el cuerpo temblante e inconsciente y su cuerpo tembló de igual manera.

-¿Harry? -escuchó decir a Gemma.

Observo por última vez como tomaban el pulso en un segundo a Austin Mahomett, y eso fue todo lo que vio después de allí.