¿Te cuento un secreto? hay alguien enamorado de ti
¿Dónde lo guardo la última vez?
Las manos de Zayn temblaban de manera casi imperceptible, mientras que sus dedos recorrían entre cajones y ropa.
El aroma de Niall era inconfundible, y no necesitaba colonia para hacerlo, con el simple aroma de su piel, basta.
Una sonrisa se le formo en los labios, mientras ambas manos nerviosas sacaban de uno de los cajones una prenda.
Volteo hacía Harry, quién hurgaba entre las fotos. El ruloso levanto la vista y una mueca se gravo en su cara al ver los boxers de Bob Esponja.
-Perdón, es que... -Zayn solo una risita baja, giro riendo y siguió su trabajo; Harry lo miró raro y siguió observando las fotos.
Había fotos de todo tipo. Desde fotos de Niall y Greg, hasta fotos de comida y cosas tontas.
Era raro estar hurgando en las manías de Niall, no se sentía como invadir su privacidad, solo era como... entrar a su mente.
No era afeminado, su modo de caminar no había sido contonearse, no movía las manos con delicada exageración. No, el parecía más un niño pequeño que un homosexual.
Un niño al que todos tendían a querer proteger, abrazar y darle cariño. Ternura, eso era.
Harry sonrió al ver una foto de Niall de bebe, mismos ojos, mismas mejillas sonrosadas y ese atuendo tan pequeño para su diminuto cuerpo. Era una imagen entre sientas, a las que Harry encontraba historias detrás.
Ver las fotos de su vida, era como estar en su vida.
Verla y vivirla, por así decirlo.
¿Cuantos años tendría en esa foto? tal vez dos o tres, simplemente Harry no paraba de sonreír al verlo.
Su corbatita le provoco querer apretujarle las mejillas... Si lo hubiera hecho a esta edad sería más raro, pero los años no le quitaron lo tierno a Niall.
¿Y... la muerte?
Luego vino otra, y otra y otra más.
Cada foto más tierna que la anterior, todas recordándole a Harry lo feliz que había sido su amigo.
¿Cuándo habría cambiado aquella afirmación?
Hacía 4 meses que lo había encontrado en el baño, con las muñecas chorreantes en sangre, horrenda imagen por cierto, los ojos llorosos y las gotas seguían cayendo, ya no puedo más, había dicho.
¿De qué se había cansado, hartado hasta no aguantar más?, de que...
Vinieron muchas fotos más, pero una le saco el doble de sonrisas.
La había tomado el, Harry recordaba perfectamente ese día.
Hace un año.
Louis se veía tan gracioso, tan... Louis.
Harry extrañaba ese Louis, claro que sí, lo extrañaba como nadie tenía idea.
Un gruñido de Zayn le saco de los pensamientos.
-Deberían haber limpiado este lugar al menos -dijo triste, cansado, con la vista en las gotas de sangre marchitas.
La pintoresca habitación tenía un aire cálido, como el que debe tener un hogar, lo único que manchaba ese aspecto inocente, eran los restos de una vida triste.
-Me pregunto... -trago Harry, Zayn lo miro- cuanto le habrá dolido eso, -paro un segundo y siguió- pero realmente no quiero saberlo.
Zayn miro la mirada triste de Harry, y por necesidad de cuidarlo, se sentó junto a él en la cama.
Miro las lágrimas del ruloso amenazando por escapar, y quiso distraerlo.
-Siempre quiso ser cantante. -Tomo entre sus manos una foto- Le avergonzaba, pero siempre canto hermoso.
Harry sonrió con tristeza.
Él también había amado cantar, pero nadie lo sabía, y ahora que su vos estaba rota, mucho menos.
El moreno tomo otra foto.
-Y le encantaba dormir.
Harry rio bajito.
-Eso y comer eran sus debilidades.
-Si -dijo riendo Zayn.
-¿Tú te llevaste el oso? -preguntó Harry.
Zayn lo miro incrédulo.
-Un osito amarillo que estaba aquí... -insistió el ruloso
-¿Con un te quiero escrito? -dudo Zayn.
-Si... -Harry frunció el ceño.
-Yo no me lo lleve -se rascó la cabeza el moreno.
-Lo vi la primera vez que estuve aquí -dudo Harry- y a la segunda ya no estaba...
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Cuando alguien se va |Larry & Ziall| {LCFNL2}
FanfictionCuando al mundo se le ocurre ser caprichoso, tienes dos opciones: Caer o seguir intentando. A Harry le han dado otra oportunidad para optar por la segunda opción. Ahora, él tendrá que aprender las bellezas de la vida mientras intenta resistir a los...