[Lom-Ent, Viernes, 7 pm]...
—¿Todavía no entiendo por qué se nos complica tanto este asunto? —un poco estresada—.
—Ni idea. Ya hemos intentado de diferentes maneras y no damos con la cifra que debe ser.
—¿Qué horas es? -miró en el reloj de la oficina—. ¡Es tardísimo! —asombrada—. Ya son las 7 de la noche y vamos ni por la mitad del trabajo.
—Bueno, no me lo tomes a mal pero, también nos atrasó mucho tu llegada acá a la empresa. Se supone que comenzaríamos a trabajar a las 3 y llegaste a las 5.
—Ya te expliqué las razones de mi retraso, no fue porque se me dio la gana. —dijo seriamente—.
—Yo sé, por eso te dije. ¡No me lo tomes a mal! yo sé que no fue tu culpa. ¡Marcia, deja estar a defensiva por Dios!
—Yo no estoy a la defensiva...—refutó—. Así soy, si te gusta bien y si no también.
—A mi no me gusta, a mi me encanta, todo lo tuyo me encanta.
—¡¡Esteban, otra vez vienes con lo mismo!! —refutó un poco enojada—.
—Ya, ya perdón. —levantó la manos en son de paz—.
—Continuemos, por favor.
—Marcia... ¿Me aceptas una invitación? Como compañeros de trabajo, cabe resaltar.
—No, gracias... Te lo agradezco pero no.
-¿No te gustaría ver a nuestros hijos?
—¿Cómo? —confundida—. ¿Quieres llevar a Hugo y Lucía?
—No, quiero llevarte a mi casa. ¿Vamos?
—¿A tu casa? Y... ¿Qué se supone que debo hacer yo allá?
—Pues, a terminar el resto de trabajo que nos falta. Mira la hora que es... ya tenemos que salir. Aquí se cierra a las 7:30. Ya las últimas personas se están yendo, por más que queramos aquí no vamos a poder dar con la fórmula. Además, sí o sí por lo menos hoy debemos terminar con eso...
—Sí, yo sé que estamos atrasadísimos y que Gaspar está esperando el primer informe cuanto antes...
—Entonces, ¿Por qué no aceptas el plan? Si es por miedo, allá están nuestros hijos, están los empleados... Yo puedo pedir algo para cenar los 4 juntos y mientras tanto vamos trabajando nosotros, e incluso, Hugo nos puede ayudar y así adelantamos más.
—¿Miedo? ¿Quién te dijo a ti que te tengo miedo?
—Eso es lo que me das a demostrar...
—¡Por Dios! —se rió con ironía—. Tenerte miedo a ti, eso sería lo último que haría... y para que veas que estás equivocado... ¡Acepto! Está bien, vamos a tu casa.
Marcia y Esteban salieron de la oficina y se dirigieron en sus respectivos autos a la casa Lombardo.
—Hola mi vida, regresaré más tarde a la casa. Todavía me falta mucho trabajo... —llamó a su esposo mientras iba en su auto camino a casa Lombardo—.
—Listo mi amor, entonces eso quiere decir hoy cenaré solo. Cuando llegues me cuentas cómo te fue.
—Okey, chao mi vida.
Ambos llegaron a la mansión y parquearon sus autos.
—¡Bienvenida! Esta siempre ha sido y será tu casa. —dijo Esteban—.
—Fue mi casa. Sólo eso. Ahora es la casa de tu novia o futura esposa.
—Esteban se echó a reir—. A ver, ¿De dónde sacas que Paula es mi futura esposa?
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Mi vicio y mi condena
FanfictionEsta es una historia basada en la telenovela La Madrastra 2022 de Televisa. Los protagonistas son Marcia Cisneros y Esteban Lombardo.