"La felicidad había llamado a nuestra puerta"

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Con ese pensamiento en la cabeza,que ya éramos marido y mujer y que seríamos felices para siempre,en este momento no podía sentir otra cosa que no fuese una inmensa felicidad.Nos mirábamos fijamente a los ojos, acariciándonos no sólo con las manos, sino también con el alma.

Tal dicha que en ese momento sentíamos,hizo que mi cuerpo se relajase, soltando toda la tensión acumulada durante este tiempo.Y no sé cómo,ni por cuánto tiempo,pero entre sus brazos, sintiendo su respiración y el latir de su corazón,que a mi parecer,era una preciosa melodía la que escucharía eternamente,sin lugar a la duda,me quedé dormida.

Me desperté,aún era de noche la oscuridad que entraba por la ventana lo indicaba.Y ahí estaba él,seguía abrazado a mi,dormía como un bebé.Era tan precioso, que verle dormir era todo un placer,un deleite para los sentidos.Lo observé durante unos minutos.Realmente no quería despertarle.

Pero había algo que me preocupaba.Un pensamiento no muy positivo, rondaba mi cabeza¿Y si lo que habíamos hecho no era suficiente para él?¿Y si por el embarazo tuviese que cesar sus prácticas?¡Se aburriría de mi!¡No!¡No lo quiero pensar!¡Debía demostrarle que yo seguía siendo esa mujer capaz de satisfacer todas sus necesidades!¡Aunque no fuese lo que él esperase de mi!

Empecé a acariciar su miembro por encima de la sábana,no tardó en reaccionar a mis caricias.

Abrió los ojos lentamente y me miró.No le di apenas tiempo ni abrir la boca,cuando de manera trémula le expuse mi malestar.

-Hyunjin...sé que así no es como te gusta,que tú necesitas otras cosas ...no sé... sólo quiero complacerte... sólo quiero ser lo único que necesites... déjame que te lo haga como tú me has enseñado a hacerlo,su miembro se endureció entre mis dedos notablemente.

Entornó su mirada hacia mí, separándome por un segundo, se inclinó,apoyando su cabeza en la palma de su mano.

-¿Quién ha dicho que no me complaces?-preguntó con voz ronca.

-Esto...no sé...por cómo antes lo hicimos,temo que no sea suficiente para ti y que quizás por el bienestar del bebé ahora mismo no puedas hacerlo de otra manera...y que....y que deje de...

Se echó a reír,de forma maliciosa interrumpiendome.Yo, sinceramente no sabía cómo tomármelo.

-¿Es que acaso piensas que ya he terminado contigo esta noche?¡Ay sigues siendo tan inocente!

¿Por el bebé?¡No eso no tiene nada que ver!

-Em...no...bueno...¡No sé!

Se acercó peligrosamente y sujetó mi nuca con fuerza.

-Por eso no te preocupes...el bebé estará bien...te diré una cosa ...-le miré ojiplática espectante a lo que iba a decirme.

El que estés embarazada ,no hacen que las prácticas cesen,se adaptaran,nada más .... —gimoteó cerca de mi oído.

-Ajá...-tartamudeé con cierto nerviosismo.

Era increíble, como ese hombre a pesar de la cantidad de veces que lo habíamos hecho y de que era mi esposo, cuando me hacía sentir su dominación ,me ponía nerviosa,muy nerviosa.

-si lo hice así, fue porque quise, porque me apetecía ...porque te quiero.

Mis ojos temblaron ante los suyos,con fulgor.

Sería una pena, no aprovechar esta noche....no niegues que tú te quedaste con ganas de más....Y eso es todo lo que te preocupa... Veo que mis castigos los disfrutas...ya no podrías vivir sin ellos .....¿Verdad?¿Me equivoco?-su mano que rodeaba mi nuca,paso a apretar mi cuello ...estirando mi cabeza hacia atrás dejándome totalmente expuesta a él.

Ángel o DemonioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora