Mis ojos en ti

Capitulo LXVI: La espera aveces mata!

Lena

Mire a mi alrededor y estaban todos ya sentados, vestidos de negro.
Me vi las manos y solo recordé lo feo que fue que murieras luego de que te halla tocado el pelo, te extrañare por siempre.
La iglesia estaba en completo silencio alguno que otro sollozo se escuchaba pero yo estaba llena de miedo y tanto dolor, que necesitaba sacarlo. Vi a mis hijos abrazando a mi madre y el pequeño bebé Alex lo sostenía mirándome con una mirada que decía que todo estaría bien, me centre tanto en el ataúd de Plata, que me levante y estaba lista para dar mi discurso.

—Se que es doloroso para todos los presentes y que no voy a decir que estoy sufriendo poco por que me duelen los ojos de llorar. Una de las lecciones más importantes que eh aprendido este año es que nunca sabrás cuando es la última vez de algo, un abrazo, un beso, un té quiero, una navidad o una simple charla con una persona. Hace unos días recuerdo que me senté varios minutos viendo el suelo intentando procesar todo lo que acababa de pasar, no sentía nada más que un dolor en el pecho, un nudo en la garganta, pero de la nada empezaron a salir las lágrimas de mis ojos, mi cuerpo empezó a templar, el aire me comenzaba a faltar y es que no podía asimilar que ya no te escucharía reír nunca más...— Lena seco sus lágrimas mientas que todos estaban escuchando atentamente. — hay una fecha que que siempre me va a doler y es el día que partió de este mundo. Recordar días anteriores es abrir una herida que duele tanto que nunca voy a olvidar...— se dio vuelta y tocó el ataúd. —Te extraño mucho, pero espero que donde estés ya no sufras, te extraño en las noches oscuras cuando necesito una charla cálida y agradable, te extraño en los días divertidos por que quisiera sonreír a tu lado, te extraño mucho siempre le harás falta a mi vida— se recompuso y volvió a su asiento, todos se encontraban llorando por las hermosas palabras que Lena acababa de decir.
—No pasó ni una semana y ya la extraño, ¿cómo voy a superarlo?— Sean, mi hermano del alma estaba abrazándome.

—Yo también la extraño, Lena...pero poco a poco irás sanando y yo también, cada uno lo hará— Lena se dejó consolar por su hermano y luego Lucia se acercó a ella.

—Cariño, lo lamento mucho preciosa...sé que va a doler toda la vida pero iremos superando esto de a poco y sanaremos nuestros corazones— Dijo Lucia y abrazó a Lena con todas sus fuerzas. —Estaré siempre para ti— Lana sintió los brazos de su hermana consolarla.

—Me duele el alma— dijo entre lágrimas siendo sostenida por ahora su hermana Megan mientras que Imra le acariciaba su espalda, Sean se encontraba abrazando a Lucia, se volvieron hermanos también y muy cercanos.
Lena le dio una mirada al ataúd y dejó un beso en el, tomó las manos de sus hijos y al pequeño en brazos y salió del lugar yendo directamente hacia su casa. —Trataré de ser mejor madre que meses anteriores— Dijo mirando a sus hijos y Line le regaló la mirada más amorosa posible, Lianna iba de la mano de su hermana mayor.

2 meses después

Me senté en la tumba y me quede pensando en que sería de mi vida sin mi más grande compañera, ¿que será de mi? No tengo fuerzas para levantarme de la cama pero debo hacerlo por que tengo hijos que atender, se que a ellos también les duele y por más que no la conocieron mucho, se encariñaron con ella y la amaban, Line se que sufre más que sus hermanos.

—Están grandes, los niños están enormes y Line comenzó la facultar, está estudiando bioquímica por que el talento de CEO ya lo tiene. Lianna comenzó 2do de secundaria y las profesoras dijeron que es su mejor alumna....me haces mucha falta, me derrumbo y no se que hacer para mantenerme estable— dijo la Luthor con las flores en la mano, rojas, rosas rojas las cuales acomodó en la lápida y tocó el
Nombre escrito en ella. —me haces falta— besó la lápida y luego se paró. —Vendré el jueves luego de las clases de actuación de Line, te amo— se retiró hacia su coche y fue directamente a L-corp.