Predestinación

El día en que nos conocimos - Parte 2 Jadeite

- No logro entender como Serenity puede ponerse en riesgo constantemente al venir a este lugar – Pensaba Sailor Mars mientras caminaba sin preocupación. A lo largo de su andar miraba a diferentes personas a su alrededor, ella sin intentar esconderse o pasar inadvertida se preguntaba porque estas personas tampoco se acercaban a ella. En un punto de su andar decidió detenerse y mirar el amplio jardín con hermosas flores y los destellos de estas al tocarlas los rayos del sol.

- No tengo paciencia y si no piensas atacarme entonces por favor sal; es sumamente molesto esta sensación de sentirme observada – Dijo en tono alto la senshi llevándose las manos a la cintura.

- Lo siento, no era mi intención hacerte sentir incomoda – Se escuchó una tranquila voz masculina, al tiempo que la silueta del joven salía detrás de un árbol, sonriente y dirigiéndose sin prisa a la joven de cabello negro.

La senshi abrió grandemente los ojos al verlo venir hacia ella, sin notarlo abrió un poco la boca discretamente. La visión del joven acercándose a ella la dejo entrada en un trance del que no podría recuperarse rápidamente. Era un joven delgado pero fornido, el cabello dorado corto ondulando moviéndose al ritmo del aire, ojos azules que brillaban y una sonrisa encantadora la dejaron notablemente deslumbrada, los rayos del sol sobre él lo hacían brillar de una manera extraña pero a la vez hermosa.

Viendo la proximidad, recobro la compostura habitual en ella.

- Es primavera, debería hacer calor pero siento una brisa refrescante... ¿Tienes algo que ver en eso? – Pregunto con completa calma y serenidad la guardiana.

- Así es, soy... ¿Cómo decirlo?... sensible al calor, pensé que te resultaría refrescante y más cómodo si al caminar no tuvieras que lidiar con el intenso calor que se siente en esta época del año – Respondió el apuesto joven sin dejar su sonrisa.

Mirándolo fijamente a los ojos y con una extraña calma que rayaría en indiferencia, la senshi le comento – No era necesario, yo no percibo el calor como algo incómodo.

- Ya veo, me pasa exactamente lo mismo con el frío – Dijo el joven mientras cerraba los ojos al mismo tiempo que le sonreía.

La chica nuevamente sin saberlo volvió a sonrojarse ante un gesto que aparentemente no era tan inusual ni entendía el porqué de su reacción ante él. Recobrando nuevamente la compostura consiguió poder hacer otra pregunta, ante lo desconcertante que parecía esa situación tampoco le resultaba incomoda.

- ¿Quién eres y porque me estás siguiendo? – Musito con calma y firmeza.

- Te ofrezco una disculpa, no suelo tener tan malos modales. Mi nombre es Jadeite, Caballero de la Paciencia y la Armonía a las órdenes del Príncipe Endymion. ¿Y tú quién eres? – preguntó el caballero al tiempo que la observaba de arriba hacia abajo – Veo que no eres de aquí.

- Mi nombre es Mars, soy una de las guardianas de la Princesa Serenity y estoy aquí para encontrarla – Respondió la chica de cabello negro esbozando una ligera sonrisa.

- Ya veo, parece que tu princesa le gusta meterte en problemas.- dijo sonriendo el joven – Sígueme, se dónde se encuentra – dijo mientras extendía su mano a la chica.

Ella miro por un momento la mano del joven pero la tomo sin dudar. Al unir sus manos desplego en cada uno una sensación de reconfortante tibiez que resultaba sumamente agradable, en ese momento ambos se miraron directamente a los ojos como si hubiesen descubierto algo uno del otro. Mars fue la primera en recobrarse de ese breve momento.