En el bosque

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Después de un par de horas, las 4 parejas se fueron encontrando en el claro del bosque donde se encontraban los príncipes; Mercury nuevamente con un libro que le fue dado por Zoisite quien al momento de despedirse le guiño un ojo a la chica quien solo pudo ruborizarse; Júpiter llevaba consigo un gran ramo de rosas que le fue entregado por Nephrite, quien como despedida solo quito una de las rosas y la acerco a sus labios y posteriormente a su pecho lo que provoco una gran sonrisa en la ojiverde; Mars por su parte llevaba un ramo de lirios rojos alrededor de una hermosa Casablanca, regalo de Jadeite quien como despedida solo le sonrió cariñosamente provocando la misma reacción en la senshi y por último Venus, quien no llevaba nada material pero sentía que efectivamente llevaba consigo algo importante a diferencia de su última visita; como despedida Kunzite beso su mano.

Al mirar esto los príncipes solo voltearon a verse con complicidad mientras se dibujaban discretas sonrisas en sus rostros. Nuevamente la princesa se posiciono en medio del círculo formado por las chicas y en un gran destello de luz, desaparecieron.

- Creo que tuvieron una tarde muy interesante- Dijo pícaramente Endymion mientras volteaba a ver a sus escoltas

-Ya creo que lo fue – Respondió alegremente Nephrite mientras apretaba la rosa que había tomado del ramo de Júpiter

Mientras caminaban, Kunzite miro sobre su hombro –Los alcanzo en un momento – dijo mientras se retiraba del grupo.

- Supongo que para él no fue tan agradable – Musito Zoisite

- No es eso... creo que va a ponerle un alto a esa mujer- Respondió Jadeite con seriedad

- Cierto, es muy molesto que siempre este escondida vigilando- Dijo con hartazgo Zoisite

- Aunque a ti no parece molestarte su presencia Endymion – Comento Nephrite

- Es la menor de mis preocupaciones, al final no hace ningún daño... esperemos a escuchar el reporte de Kunzite- Respondió el príncipe sin detener su andar.

Kunzite regreso a una parte del bosque –Ya solo esta ella, la otra presencia desapareció – pensó – Sal de ahí Beryl- Ordeno tranquilamente el caballero.

Detrás de los árboles salió una chica – General Kunzite, no quise molestarlo-

- Pero lo haces, tu presencia constante ya no puede ser una simple coincidencia o algo que se pueda pasar por alto.

- Y-yo – Aquella chica intentaba hablar pero no salían palabras de su boca, solo se limitó a apretar los puños arrugando parte de la falda de su vestido.

- Beryl, sé que estás enamorada del príncipe Endymion pero él ya ha entregado su corazón a alguien más, aunque a estas alturas ya deberías saberlo mejor que nadie – Dijo seriamente pero con un toque de compasión el apuesto caballero

- Y tú deberías saber que esas visitas están prohibidas... la gente de la luna no es bienvenida, ellas no deberían estar aquí y pasearse libremente – Dijo molesta la joven

- Eso es algo que no te concierne Beryl... no sobre pases tus funciones- Señalo molesto el caballero

- Tú tampoco olvides tus funciones Kunzite... ¿Me pregunto qué dirá la población al enterarse de las visitas frecuentes de la princesa al príncipe Endymion? O peor aún, saber que estas visitas son encubiertas por los generales que se usan esas visitas para pasear con las guardianas – Dijo desafiante la mujer

- No juegues conmigo Beryl, te he tenido paciencia porque somos viejos amigos pero no abuses... para mí no sería difícil deshacerme de una hechicera de poca monta – Dijo con una voz molesta y mirada amenazante.

- T-tú no puedes hacer eso – dijo nerviosa - ¡Ustedes están para protegernos! ¡Cualquier humano debe estar por encima de cualquier persona proveniente de la luna!... aún una hechicera de bajo rango como yo.

- Eres parte del grupo de personas que deseo proteger Beryl, pero como bien dices no olvido mi deber como General y eso implica eliminar cualquier amenaza sin importar de quien venga – Dijo tranquilamente

- ¡Vi como miraste a esa chica Kunzite! ¡He visto como los demás generales miran a esas chicas! – Grito- ¡Esas mujeres los han hipnotizado, las guardianas y la princesa deben ser brujas! No puede ser posible que en tan poco tiempo los tengan prendados a ellas ¡Ustedes nos darán la espalda! ¡Nos entregarán al reino lunar como simples esclavos! – Dijo enardecida y descontrolada, todo el enojo y frustración que albergaba salía de sus labios como un rio desbocado.

Al oír todo eso Kunzite tomo a la mujer con fuerza del cuello y la levanto del suelo con una sola mano – ¡No vuelvas a repetir eso nunca más en tu vida! No me confundas con Jadeite para tenerte paciencia Beryl, ahora mismo podría deshacerme de ti y a nadie le importaría – Dijo con voz furiosa y mirada asesina.

La chica apenas pudo abrir los ojos con terror –N-no puedo... respirar- murmuro

Al oír eso el caballero la soltó provocando que esta cayera al suelo – Supongo que de ahora en adelante no serás un problema – dijo con voz fría y cortante – Si alguien se entera de lo que has visto o escuchado sabré que fuiste tú y terminaré el trabajo ¿entiendes?

La chica solo comenzó a toser mientras lloraba de enojo y frustración

- Beryl, el problema no es la princesa Serenity... aun cuando ella no estuviera con el príncipe, él nunca se fijaría en ti. Puedes seguir observando al príncipe dentro del palacio, pero no quiero volver a tenerte cerca de nosotros durante las visitas de la princesa. – Dijo tranquilamente el caballero mientras se retiraba.

- Kunzite te tardaste ¿Qué sucedió? – Pregunto el príncipe

- Es Beryl, está enamorada de ti y no ha dejado de espiar durante las visitas de la princesa – Comento tranquilamente- Quizás sea un problema si no la mantenemos a raya.

- ¿Qué sugieres? Posiblemente desterrarla sea una opción – Respondió el príncipe

- No, es mejor tenerla cerca... Sabe de los encuentros con la princesa y las guardianas, eso puede traernos problemas si la información llega a los oídos equivocados.

- El día de hoy dos guardias me vieron con Mercury en la biblioteca del palacio- Menciono apenado Zoisite

- No tienes por qué avergonzarte Zoisite, es algo que tarde o temprano podría sucederle a cualquiera de nosotros – Respondió Jadeite – Debemos de pensar en una razón que justifique estás visitas Endymion, no podremos seguir ocultándolas por mucho tiempo.

- Coincido, pensaré en algunas alternativas y las discutiremos por la mañana – Dijo el príncipe – por hoy creo que es todo, supongo que ha sido un día agotador para todos – Menciono con una sonrisa burlona.

- Aún hay algo más que reportar Endymion, además de la presencia de Beryl también pude sentir la presencia de alguien más pero desapareció poco antes de que las chicas regresaran a la luna – Dijo seriamente Kunzite

Mientras esto acontecía en la tierra, en la luna también alguien más preparaba su reporte. Frente a la reina Serenity se abrió la puerta del salón donde ella aguardaba.

- ¿Cómo te fue? Regresaste antes que las chicas... ¿Hay algo que reportar? – Menciono con tono amigable y sereno

Pasando por la puerta caminaba una linda gatita negra, que al detenerse frente a la reina se transformó en una hermosa chica de cabello negro ondulado.

- Me temo que no son buenas noticias reina- Dijo Luna afligida 

PredestinaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora