El día en que nos enamoramos - Parte 4 Kunzite

128 11 0
                                    

- Lamento tener que arrastrarte conmigo siempre pero soy el principal protector de Endymion, espero puedas entenderme- Comento algo avergonzado el caballero.

- Solo me molesto no poder contradecirte y mi poca resistencia – dijo sonriente la bella chica rubia – en realidad yo también me siento más tranquila si estoy cerca de Serenity.

- Te prometo que esta ocasión no me dormiré- Dijo Kunzite

- Yo no tengo problema en que descanses... sé lo desgastante que provoca esta situación – dijo seriamente la chica.

- Esta ocasión prefiero aprovechar mi tiempo con una linda chica- dijo sonriente mientras miraba a Venus.

Ella lo miro azorada, sin saber exactamente que responderle por lo que intento cambiar el tema –Este bosque es muy lindo, la temperatura aquí es agradable-

- Así es, solía pasar mi tiempo aquí durante la infancia... también aquí lleve parte de mi entrenamiento. Podría decirse que es mi lugar favorito.

- ¿No entrenabas con tus compañeros? – Pregunto con curiosidad la chica

- No exactamente, en realidad podría decirse que fui yo quien los entrenó... mi maestro fue el antiguo rey, el padre de Endymion- confeso con una sonrisa nostálgica.

- Kunzite... ¿Cómo se volvieron los protectores del príncipe? – La chica miro el rostro sorprendido del general debido a su pregunta, nerviosa prosiguió- E-es que si no podemos recorrer el palacio me gustaría saber un poco más de ti- dijo ligeramente avergonzada la senshi

Con una gran sonrisa, intentando contener la risa el chico respondió – Pudiste preguntarme cualquier cosa ¿y me preguntas eso? Entonces creo que si soy del tipo interesante

- N-no tienes que burlarte de mí, si no me quieres responder entonces no lo hagas – Respondió molesta Venus mientras adelantaba su andar.

En algún momento de su recorrido sintió que el apuesto caballero la tomo del brazo y la atrajo hacia él, ella volteo a verlo con asombro pero noto que Kunzite estaba viendo por encima de ella, señalando le comento – Ahí están ellos, lo mejor será esperarlos aquí – dijo al tiempo que señalaba a la pareja de príncipes que se encontraban abrazados en un claro del bosque.

- Para no estar aquí parados rodeemos el claro, el camino que hacen los arboles es hermoso- Menciono el caballero, la chica solo asintió moviendo su cabeza.

El chico tomo su mano y se dispuso a continuar tanto con la charla como con la caminata – Después de que se terminaron los conflictos internos dentro de la tierra, una adivina predijo que nacerían 4 piedras preciosas que estarían destinadas a cuidar y guiar al príncipe que mantendría la paz en la tierra y que la llevaría a su máximo esplendor-

Venus lo miraba completamente asombrada y atónita; el caballero al darse cuenta de su expresión la miro tiernamente – Así nacimos mis hermanos y yo-

-¿Tus hermanos? – Murmuro la chica

- Si; Nephrite, Jadeite y Zoisite son mis hermanos – Dijo suavemente el chico

- ¡Lo siento! Es que no se parecen mucho – dijo regresando a su habitual jovialidad la chica dejando salir una risita nerviosa

El chico al escuchar eso no hizo más que reír también. Venus volteo a verlo sorprendida, era la primera vez que lo veía reír, las facciones duras y serías que casi siempre mantenía se veían sumamente suavizadas al reír y lo hacía ver más jovial y atractivo, eso hizo que la chica se ruborizara.

- Tienes razón... -Dijo deteniendo su risa- en realidad no somos consanguíneos, todos nacimos de diferentes padres pero nos hemos criado juntos. Yo nací de una empleada del palacio que murió al darme a luz y nadie supo quién fue mi padre... como las piedras se manifiestan durante el nacimiento, los reyes me acogieron desde que nací. Siete años después nació Nephrite de una familia de plebeyos de la zona oeste... ellos lo entregaron al palacio con menos de un año, al año siguiente nació Jadeite en una familia noble de oriente, al siguiente año nació Endymion y pocos meses después nació Zoisite también de una familia noble del norte; tanto él como Jadeite fueron entregados al palacio cuando cumplieron 3 años. Como te darás cuenta hemos estado juntos desde muy temprana edad, es por eso que somos hermanos... ahora es tu turno de responder una de mis preguntas-

- ¿Q-que quieres saber?- dijo la chica nerviosa

- Sigamos en la misma pregunta ¿Cómo se volvieron protectoras de la princesa?

- Fuimos creadas a petición de la reina Serenity a partir de cristales sailor, cada una de nosotras con características de nuestro planeta protector, con el deber de proteger el reino de plata y cada uno de los planetas del sistema- Dijo como si de un discurso se tratase

- Increíble – dijo visiblemente asombrado el apuesto chico.

- N-no me mires así, me harás creer que soy un fenómeno- menciono con mirada reprobatoria

- Jamás podría creer eso de ti o de tus compañeras –dijo serio y firmemente- eso haría que tanto yo como mis hermanos también lo fuéramos.

Venus miro el rostro serio del chico y un escalofrío recorrió su cuerpo, su mirada y semblante eran serios pero en su tono de voz denotaba gran gentileza.

- Debes amar mucho a tus hermanos- dijo cordialmente Venus

- Tanto como a Endymion... supongo que nuestra existencia estaba predestinada al servicio de ambos príncipes- dijo en un hilo de voz.

- Kunzite tú... -continuo la chica con notoria pesadumbre y congojo – ¿alguna vez has renegado a este destino?

La pregunta de la joven lo dejo completamente sorprendido al grado que su cuerpo sintió una ligera sacudida.

- Hasta ahora no, pero no puedo negarte que es algo que da vueltas en mi cabeza ¿será esta la única razón de mi existencia?... quisiera creer que no pero todo parece apuntar a que sí.

- Te equivocas – dijo decidida la chica – nuestra existencia no se resume a la guardia y custodia de nuestros príncipes, esto es para un bien mayor... no solo la protección de Serenity, también hay mucha gente a la que aprecio y deseo proteger... incluso a quienes aún no conozco, gente buena y también gente que estoy por conocer o... -dijo sonrojándose- gente que acabo de conocer y quiero proteger.

El apuesto caballero no pudo más que sonrojarse al escuchar las palabras de la chica a quien le devolvió una mirada dulce y una sonrisa cautivadora – Eres maravillosa Venus ¿Quién diría que alguien tan pequeña y adorable tenga tanto valor y voluntad? – Dijo suavemente.

- Kunzite, tú también tienes mucha gente que estimas y deseas proteger además del príncipe Endymion ¿cierto? – Pregunto con una hermosa sonrisa y voz suave la guardiana

Al escuchar esta pregunta llegaron a la mente de Kunzite las imágenes de sus hermanos, el príncipe, gente que trabajaba en el palacio y gente que había observado en sus salidas de exploración y también el rostro sonriente de Venus.

- Así es – Afirmo dulcemente y con una sonrisa cálida, mientras besaba la mano de la chica que al sentir los labios del caballero en su mano volvió a sentir ese escalofrió recorriendo su cuerpo.

- También tengo curiosidad de lo que me dijiste la última vez que nos vimos- dijo apenada la chica

- ¿Lo que dije? – pregunto dudoso el joven

- S-si... dijiste que yo me llevaba algo tuyo, pero no encontré nada – dijo inocentemente

- En verdad eres increíble... ¿Quieres saberlo? – pregunto con una gran sonrisa el apuesto caballero

La chica solo asintió con la cabeza, al ver ese gesto Kunzite acerco su rostro al oído de la chica para murmurar – mi interés- e inmediatamente se reincorporo

La chica sintió una desbordante calidez recorrer su cuerpo al oír esas palabras.

- Pero me temo que esta ocasión te llevarás algo mucho más importante- Finalizo el caballero mientras abrazaba el frágil cuerpo de la guardiana, quien a su vez correspondió ese abrazo.

PredestinaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora