𝑨𝒍𝒍 𝒊𝒔 𝒇𝒂𝒊𝒓 𝒊𝒏 𝑳𝒐𝒗𝒆 𝒂𝒏𝒅 𝑷𝒐𝒆𝒕𝒓𝒚 | Spencer Reid

° 05 °

❝ I had to smile when it caught my eye
There was one of a teenage couple in a driveway
Holding hands on the way to a dance
And the date on the back said 1958 ❞

🤍◦ ✨ . . ✒️ ೃ࿔ 📜 • ༄

— ¿Entonces todo está bien con Leo? — preguntó Penélope.

Emma se giró a mirar a la mayor. Ambas caminaban por las calles del centro, era día de compras ya que no había trabajo y como siempre, ella y la rubia mayor se juntaban a hacer cualquier cosa que les apeteciera.

— Bueno, ha estado bastante gruñón desde que no tiene trabajo — confesó suspirando y mirando sus bolsas de regalos — Le está costando más de lo que pensamos buscar uno y eso lo tiene nervioso.

— ¿Pero no están pasando ninguna necesidad, cierto? — pregunta la mayor.

Emma negó. Tenía ahorros y aunque consideraba que para él trabajo que realizaban no les pagaban lo suficiente, si tenían suficiente dinero como para vivir cómodos.

— No, claro que no — negó — Pero piensa que Leo ganaba su propio dinero desde los diecisiete años, eso te da cierta independencia económica y ahora cuando quiere algo debe pedirme dinero a mí, no lo tiene contento eso.

— Oh vamos, solo es una mala racha — negó Penélope riendo, aunque Emma no estaba tan segura de ello — Estoy segura de que pronto saldrá algo.

— El problema no es ese. El problema es que salieron varias oportunidades, pero Leo no se conforma con poco, el era gerente general del área de contabilidad de una empresa grande — explica la chica, obteniendo un asentimiento por parte de su compañera — No acepta cualquier puesto que quieran darle, ya pasaron dos meses y si no acepta un rango menor al que tenía no creo que lo haga.

Penélope se sentía mal por su amiga. Amaba a Emma pero ella como todo el equipo no podían entender el porqué estaba con un hombre tan complicado como lo era aquel chico. Aún así no se metía demasiado, la única vez que lo hizo Emma salió en defensa de él y hacía poco Spencer también le había contado cómo pelearon cuando él insinuó que quizás no eran buenos juntos.

Amaba a su amiga pero Emma estaba ciega por un amor que ya no existía y nadie más que ella misma podía sacarse aquella máscara de los ojos. Sólo esperaba que fuera lo suficientemente rápido antes de que algo de verdad devastador lastimara a la rubia.

— ¿Quieres ir a potterybarn conmigo? — preguntó después de un incómodo silencio — Estoy buscando varias cosas para decorar un poco más mi departamento.

— ¡Uh amo potterybarn! — Emma casi salta de la emoción en medio de la calle al escuchar a Garcia, ella amaba todas los comercios que vendían productos para el hogar — He visto que sacaron una nueva línea de mesas ratonas al estilo mediterráneo.

— ¿Crees que combina con mi departamento?

Ambas emprendieron viaje mientras hablaban de que, en el departamento de Garcia todo combinaba con todo, era algo así como un hermoso desastre.

— Emma ¿Por qué no la compras? — Garcia la llamó y señaló aquella jarra que la rubia se había quedado viendo bastante — Compraste muchos regalos para Leo por su cumpleaños, un pequeño detalle para ti no estaría mal.

Pero Emma se negó. Debía cuidar su dinero, los regalos para Leo era porque su cumpleaños estaba cerca.

— No puedo, con Leo sin trabajo debo cuidar los ingresos — negó, dejando aquella jarra en la vitrina otra vez — Además, si se entera que estoy de compras cuando estamos pasando una crisis económica me matará.