Narra CYRIL
-¡Le has dicho dónde vivo!
-Mira, no tengo la menor idea de cómo lo ha averiguado. Yo no te he traicionado, deberías confiar más en mí- replica Brad.
-Claro...
-¡Maldita sea, Cyril!- grita enfurecido-¡Ya te ha mandado cuatro! ¿No crees que podría ser importante?
-Metete en tus cosas, ¿quieres?- últimamente no deja de agobiarme diciéndome lo que tengo y no tengo que hacer y la verdad es que ya estoy un poco cansada.
-¿Ah, sí? Está bien- añade levantando los brazos en un gesto de rendimiento.
-Aleluya...
-Me voy a entrenar, quédate aquí amargada, bebiendo o fumando. Tú sabrás lo que haces.
-Pues claro que lo sé- chillo antes de que cierre la puerta detrás suyo. Observo la mesa con los cuatro sobres, no voy a mentir, tengo una curiosidad tremenda por saber qué narices pone en las notas que Mike ha hecho llegar hasta mí; La primera fue a través de Brad, la segunda se la entregó a Kat para que me la diera ayer cuando pasé por su casa, la tercera me la ha pasado Ethan en clase esta mañana. Y la cuarta y última carta estaba pegada en la puerta de mi apartamento, por eso pienso que Brad le ha dado mi nueva dirección a Mike.
Me muerdo el labio inferior indecisa y para cuando quiero darme cuenta me encuentro desdoblando la primera nota.
"Sé que no vas a abrir esta nota, por lo menos no en cuanto te la entreguen. Si la estás leyendo ahora, seguro que es porque ya te esperan otras dos más. Digamos que esta es la "Nota Señuelo" "
Siento como se me dibuja una sonrisa en la cara y tengo que reprimirme para no reír. De todas formas no puedo evitar pensar que Mike debe ser terrible en matemáticas porque hay cuatro notas en total, por tanto me esperarán otras tres, no dos.
La segunda nota, como la próxima, está dentro de un sobre amarillo.
"Dicen que a la tercera va la vencida"
No me lo puedo creer. Agarro la siguiente carta y la abro con ansia.
"Bien. Joder, si estás leyendo esto no sabes lo afortunado que soy. Supongo que sobra decirte lo preocupado que estoy por ti, así que iré al grano; Aunque ahora ya no estemos juntos, por favor, no dejes de bailar. No dejes que un error mío haga que dejes de hacer lo que más te gusta.
PD: Lo siento, por si sirve de algo. "
La última no tiene sobre, como la primera y observo también que la caligrafía es distinta, más grande y agresiva.
"Necesito hablar contigo. Por favor, ven al almacén abandonado a las 18:00"
Miro la hora en mi teléfono. Son las cinco y media, podría llegar a tiempo. Pero ¿Quiero perdonarle? ¿Debo hacerlo?
Me lo imagino allí, esperándome, solo, y lo que es peor, me veo a mí aquí, quieta sin hacer nada, consciente de que le estoy dando plantón a la persona que más aprecio.
Al diablo, cojo una chaqueta y salgo por la puerta. Después de todo, no es para tanto, él estaba medio borracho y ha hecho tanto por mí... Ahora soy yo la que debe ceder y perdonarle, porque en realidad le he privado de mucho durante este tiempo, cosas de cualquier adolescente normal. Sinceramente, creo que no podría pedir más.
Llego allí más rápido de lo que creía que podría, me deslizo con torpeza por la ventana rota y resquebrajada de siempre y al tocar el suelo escucho el sonido de las ratas de siempre, correteando por el podrido suelo de madera de siempre. Sin embargo, siento que hay algo distinto en el ambiente, se me pone la piel de gallina nada más avanzar un paso hacia el interior.
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¿Ella en problemas? Imposible
RomanceLlega con su mochila cargada sobre un hombro, mirando a su alrededor para asegurarse de que todos le han visto y le han admirado, como si no hubiera en el mundo ser más interesante que él. Al fin y al cabo es el más popular y por lo tanto, hay que...