Drabbles Wigetta

Lo que pasa en Las Vegas...

- Okey, esta es nuestra swift.- Suspire tirando a un lado la maleta recorriendo un poco lo que venía siendo la amplia habitación deleitandome con la hermosa y elegante decoración, muy de Las Vegas.
- Que guay es ¿no?.- Dijo Willy asombrado siguiendo mis pasos hasta donde se encontraba el baño.
- Ya vez chaval ¡Es enorme!.- Dije risueño moviendo algunas cosas y luego regresando a donde se encontraba un piano.- ¡Hala que dices!.- no tarde ni un segundo más y corrí hasta el piano.
- A ver ten cuidado no lo vayas a estropear que me piro y te dejo aquí solo.- Dijo entre risas tomandome una foto que luego subiría a twitter.
- ¿Cómo voy a romper un piano? tan pringao' no soy, tss se piensa que me dicen Willy tss- Dije divertido notando como este fruncía el ceño con molestia.- Era bromita, Willy.- Dije en un tonó muy agudo haciendo que riera.
- Es que es tonto.- Soltó en un suspiro.- Tócame algo, Vegetta.- Insinuó divertido tomando asiento sobre mis piernas provocandome, por inercia rodee su cintura entre mis brazos haciendo que soltase una risilla nerviosa.
- ¿Que quieres que te toque?.- Susurre apegando mi rostro contra su mejilla.
- Lo que tu quieras.- Dijo en un tono casi inaudible mordiendo su labio inferior haciendo recorrer una corriente eléctrica por mi espina dorsal.
Besé con delicadeza su mejilla siguiendo un camino invisible hasta su cuello, su cuerpo se tensaba ante el contacto de mis labios contra su piel provocando inevitablemente hacerle suspirar. Removí mis brazos colando mis manos por debajo de su remera acariciando su piel a mi antojo.
- ¡Chicos!, no sabéis...- Estábamos tan concentrados en lo nuestro que olvidamos por completo que dejamos la puerta de la swift entreabierta, Frank entró a la habitación sin preocupación alguna claro que al vernos en tal situación su expresión de felicidad cambió por completo a una de asombro abriendo los ojos como platos ruborizandose notablemente.- Hostia! lo siento, yo.. no n-no...- El pobre estaba tan incomodo que ni siquiera podía articular las palabras, ni hablar de Willy que permanecía estático ocultando su rostro sobre mi hombro, la situación era digna de una película tanto que no evite soltar una fuerte carcajada quitando lentamente mis manos bajo la camiseta de Willy para rodearlo con mis brazos, nuevamente.
- Hombre Frank, que oportuno.- Dije risueño, mientras que el mismo permanecía aun impactado.- No pasa nada, a ver no me digas que esto te tomo por sorpresa ¿o si?.- insinué lo obvio soltando un quejido al sentir las uñas de Willy clavarse en mi espalda.
- No me esperaba afirmar lo evidente de esta forma ¿sabes? venga, yo mejor me voy y los dejo aquí a lo suyo, tranquilos que yo no digo nada.- Dijo sonriente sin darme lugar a responder nada se fue deprisa de la habitación.
- Va a superarlo ya veras. ¿En que estábamos?.- Sonreí soltando una leve risa al recordar lo sucedido.
- Recuérdame matarte cuando volvamos a casa.- Masculló Willy entre dientes aflojando el agarre a mi espalda.

"Lo que pasa en Las Vegas se queda en Las Vegas"