Siempre he sido un asco viendo películas. Para otros son entretenimiento, para mi son como cuentos para dormir.
Emily me había despertando a los minutos después, hasta que se aburrió de hacerlo y pude seguir durmiendo hasta el día siguiente.
Cuando desperté Emily me ayudó con mis ejercicios diarios. Primero con los estiramientos de flexibilidad de brazos para ir practicando la fuerza y soportar el peso muerto de las piernas. Después se empieza a trabajar un poco de abdominales y por último las piernas. Puede que sea la rutina más aburrida de todas las mañanas, también de todas las noches.
Pero todo será por una buena causa: volver a caminar. Nunca antes había anhelado conseguir algo como lo estoy haciendo en este momento, antes tenía todo, nunca lo había aprovechado hasta que sólo me senté a ver como lo perdía y no hacía nada.
Mi querida familia. Mis queridos padres. Ya sólo llevo tres días que estoy sin ustedes y si, que me han hecho falta. No quiero defraudarlos si que daré lo mejor de mí. Padre, haré justicia por tu muerte.
Lo único que sé es que el caso de como fue causado el accidente que dejo fallecidos (mi familia) no quedó cerrado. Pero como aveces la justicia es una mierda puede quedar el caso abierto por años sin descifrar.
Me muevo en la silla de ruedas hacia el patio. Había una bella piscina redonda de cerámica, el agua estaba tan azul por el cloro. Es otoño, los días no son tan buenos para bañarse en ella, pero a veces los días están soleados y a quién no le dan ganas de tirarse un chapuzón.
Bueno, a mi no, estoy segura que en menos de cinco minutos ya estaría ahogandome. Pero en unos meses, muchos meses más, tal vez pueda meterme en ella. En el verano es lo más probable.
—Pero miren, tenemos a "Clara Sesemann" en carne y hueso —Nunca había tenido tantas ganas de golpear a alguien como lo estoy haciendo justo ahora por los comentarios de Nicholas.
No puedo creer que me molestara con la pequeña que sale en Heidi (la que está en silla de ruedas).
—¿Sabes algo?, todos somos unos idiotas a veces, pero algunas personas lo asumen como un estilo de vida. Tú, por ejemplo —le sonreí satisfecha.
—Parece que tu no entiendes mis advertencias. Veamos si con esto se te quita lo terca. Aprenderás a respetarme te guste o no te guste.
Siento sus pasos dirigirse hacia mi. Mueve mi silla de ruedas directo a la piscina. ay, no, esto se está viendo mal, y... ¡Aquí vamos! La fría agua choca con mi cuerpo. Fue como un golpe en todo el cuerpo que me hizo estremecer.
Me estaba hundiendo de a poco. Aguante todo el oxígeno que podía tener en mis pulmones, ese hijo de puta tiene que venir a sacarme. Pero no lo hace, ¿Qué esperas Nicholas?
El aire se me está acabando. Trató de mover mis brazos pero era inútil, me hundía más y le daba al pánico una señal para apoderarse de mi cuerpo. Esta sensación es terrible, quería pedir "ayuda" a gritos pero no podía.
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Jugando con tus normas © #1
Action#1 libro. Ten cuidado al cruzarte en el camino de Nicholas Anderson. Nisiquiera pienses en dirigirle la palabra por que cuando abre su boca no hay vuelta atrás, cada palabra es como cien cuchillazos en un segundo. Su mirada oscura te hace dudar en...