NICHOLAS.
Trato de acomodarme sin despertar a Hannah, la colocó en mi pecho dejando que pudiera estirarse ya que tenía todos sus pies doblados. Ella balbucea algunas groserías, trate de aguantar la risa que moría por salir de mis labios, se termina callando y sigue durmiendo.
Observé las estrella más pequeña, la que brillaba entre todas las demás. Cuando Hannah me habló de ella, ¿porque le había comentado que era ella?
-Abajo de tu fealdad tienes algo especial -murmuré.
Por eso es la estrella pequeña. Nose como describir lo especial que es, a veces llego a odiarme por llegar a pensar eso de ella. Es sólo un chica igual que las demás.
Ella profundiza su cabeza en mi pecho, con sus delgados brazos me abraza como si fuera un peluche. Trate de relajar mi acelerado corazón, había pasado mucho tiempo que no sentía esa sensación.
Nervioso por tenerla de esa forma la tomo para llevarla al cuarto donde debe estar durmiendo con Darell. Doy pequeños pasos observando todo alrededor sin que pasará a llevarla con alguna cosa en la casa. Recordé la última vez que la había llevado, no de la misma forma, no me había preocupado de que se golpeara con algo y se dio en la cabeza, admito que ese día disfrute ese golpe que se dio.
Darell estaba boca abajo con la baba a su alrededor, es un jodido asqueroso, recuerdo cuando éramos pequeños me hacían dormir con el y siempre tenía que lavar las fundas de las almohadas. Dejó acostada en la esquina a Hannah, la tapo y me voy de el cuarto.
¿Que está haciendo esa chica conmigo? Antes la miraba de otra forma, ahora la miro diferente. Me agrada estar a su lado, escucharla, ver lo nerviosa que se pone al hablar de algunas cosas, cuando se enoja, la forma en que hace las cosas, lo desafiante que es, las tonterías que dice, valiente, divertida, molestosa, problemática, sincera, bipolar. Es la viva imagen de mi pero con más corazón. Ella tiene la chispa que a mi se me fue hace mucho tiempo.
¡¿Que cabezas de pescado estoy hablando?! Ella es totalmente asquerosa, no tiene nada que me pueda llamar la atención, insisto que lo que queda de noche el alcohol me ha pegado duró, hasta tonterías me está haciendo pensar, ¡debo de estar volviendome loco!
Decido dormir en el incómodo sillón lo poco que queda de noche.
***
-¡Kitten tu te encargas de los vasos desechables y botellas de alcohol! -ordena Hannah. -¡Rae tu barreras! -Apunta a la castaña. -¡Nicholas tú moverás los muebles junto a Jake! -nos señala. -¡Emily tú te encargas de ordenar las habitaciones junto con Darell! -los señala. -¡Ahora a mover el culo par de borrachos!
-¿Y qué harás tú? -todo reclamamos.
-¿Qué haré? Haré un exquisito almuerzo para su maldita caña.
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Jugando con tus normas © #1
Action#1 libro. Ten cuidado al cruzarte en el camino de Nicholas Anderson. Nisiquiera pienses en dirigirle la palabra por que cuando abre su boca no hay vuelta atrás, cada palabra es como cien cuchillazos en un segundo. Su mirada oscura te hace dudar en...