AMERICAN COLLEGE ✔️

CAPÍTULO ESPECIAL #1

Este apartado será especial ya que les haré saber la historia de una de las parejas más importantes de la novela.

He aquí, como se conoció la pareja que inició todo.

* * *

Frené a raya luego de cruzar primero la línea de llegada. El corazón me latía de prisa, eufórico, y mis manos aún sujetaban el volante de mi Nissan. Había sido una carrera fácil, demasiado puesto que yo y un par más quisimos pasar el rato en la pista, sin apuestas y sin tantos espectadores. Sin embargo, gané, como la mayoría de veces.

—¿Vas a la fogata hoy? —preguntó Nate, otro corredor. Un delgado y pálido chico de cabello y ojos claros—. Cecile ha preguntado por ti todo el día.

—Cree que seré su acompañante —respondí luego de una risa en medio de un bufido. Era gracioso pensar en Cecile volviendo locos a todos sus compañeros de clase, alardeando de que iría conmigo a la estúpida fogata. Aunque lo cierto es que, nunca le dije que no.

—Es una de tus chicas —comentó Pitt, el último corredor, un chico de cuerpo fornido. Su piel oscura y su postura alta y derecha lo hacían parecer amenazante, pero era todo lo contrario, siempre podías contar con él—. La más linda, por cierto.

Nate rió, a él le encanta Cecile y eso yo lo sabía perfectamente. Me da igual estar con ella. Me quedan otras igual de guapas para pasar el rato. Sin embargo, si Nate se arriesgara de una manera correcta, yo no follaría más con Cecile, por más buenas curvas que tenga.

Me encogí de hombros hacia Pitt y volvimos a subir a los autos. En un santiamén, ya estábamos en las canchas traseras de la Universidad. Jerry, mi mejor amigo, ya se encontraba allí. Le vi ondear la mano en mi dirección y me encaminé hacia él. El grupo de chicos y chicas que le acompañaban me saludaron brindándome una cerveza.

Jerry levantó su botella, para brindar.

—Por la carrera que acabas de ganar.

Fruncí el ceño.

—¿Cómo sabes que gané?

—Intuición de compadres y futuros cuñados, mi hermano —se encogió de hombros haciendo reír al resto.

Un par de chicas se unieron a nosotros sonriendo. Una de ellas quiso acercarse a Jerry, pero lo impedí llevándomelo de ahí con una excusa sin sentido. Mi amigo detesta a aquella morena de buen culo, por hacer drama cada vez que él está con mi hermana.

—Te lo agradezco —Pasó la mano por su cabello castaño claro y luego por su rostro. Es como si quisiera quitarse el estrés de la morena con aquel movimiento.

—No hay de qué princesa —molesté antes de beber de mi botella. Recibí un codazo de su parte provocando que el líquido casi salga de mi boca. Y luego yo lo empujé.

—¡Muchachos! —la voz emocionada de mi hermana se escuchó a la derecha. Jerry regresó a mirar con ojos de idiota, igual que ella cuando se concentró finalmente en él.

—Yo me largo —dije levantando mis manos al ver la escena, pretendiendo irme.

—¡Bobín espera! —Pepper sostuvo mi brazo de prisa—. Quiero presentarles a alguien.

—No me interesa hermanita, lo siento. —Besé su frente antes de irme realmente de ahí y dejarlos solos.

Estaba tan aburrido, necesitaba follar con Cecile o lanzar palos a la luna. Cualquier cosa para pasar el aburrimiento. No es que hacer cualquiera de esas ideas sea algo interesante, pero era mejor que estar observando a los grupos de estudiantes soltar risitas fingidas porque "les emociona el tema de la fogata".