AMERICAN COLLEGE ✔️

47) Más rápido.

(Statham)

Mis manos se aferraban fuerte al borde de la piscina, y mi boca, se apoderaba de la suya con fiereza y lo más fascinante de todo era que ella me correspondía. Tiraba de mi cabello cuando se alejaba y echaba la cabeza hacia atrás para jadear por lo excitante de la situación. Estar dentro de ella me volvía aún más loco a cada segundo. No perdía tiempo y atacaba su cuello, y ella, liaba sus piernas en mi cuerpo con más ímpetu. Ella quería más. Yo quería más. Mis caderas empujaban hacia adelante con fuerza. El agua de la piscina se movía al ritmo de nuestros cuerpos en pleno acto y no me importaba el desastre que causaríamos si no me detenía ahora. Las clases de Natación del AC me valían una jodida mierda ahora.

Una de mis manos llegó hasta su trasero y apreté, para posteriormente empujarla más hacia a mí. Sus brazos se ubicaron bajo los míos y me abrazó, acercándome. Mordió su labio inferior y hundió su cabeza en mi cuello. No había manera de estar aún más cerca el uno del otro, incluso estando dentro de ella, pero nada perdemos con intentarlo.

La miré un instante sin olvidar mi tarea. Su cabello húmedo se pegaba a su espalda y dejaba a la vista su cuello. Su perfil, me indicaba que aun mordía su labio, pero no por motivo de llanto. Esta vez, era placer. Un placer que yo le doy y que sólo yo quiero darle. Y no sólo eso, quiero darle todo. Quiero estar siempre cerca de ella.

—Te quiero Brika —solté jadeante.

Se quedó quieta un segundo, y levantó la cabeza para mirarme. Me dolía "todo" al detenerme y mi pecho subía y bajaba de prisa al igual que el suyo.

—Te quiero Harley —Me calmó con una sonrisa y con un suave, pero rápido beso.

Coloqué una de mis manos en su trasero y la otra en su espalda, y comencé a caminar lo más rápido que podía por aquella parte baja de la piscina, hasta llegar a las gradas dentro que nos permiten salir del agua. La recosté suave sobre ellas percatándome de que su cabeza y su cuello queden sobre la superficie, y una vez mi mano izquierda estaba a un lado de su cabeza y la otra en su cadera, empujé una sola vez en su interior; con fuerza.

Casi me corro en ese mismo momento al escuchar su gemido y al sentir sus uñas en mi espalda.

Su cabeza nuevamente hacia atrás, y sus piernas liberaron mi cuerpo. Las abrió para mí y asentó sus pies en las gradas bajo el agua; y me perdí. Ya ni siquiera tenía el control en mi cuerpo. Mis caderas dieron embestidas profundas y el condón al instante ya estaba lleno. Y Nuestras piernas de pronto semi enredadas.

Tanta locura y tanto sentimiento me traspasaba, demasiado, que sentía que me ahogaba. Qué carajos pasa conmigo. Debería tratarse sólo de sexo en la jodida piscina del American College. No esto.

¡¿Qué demonios estoy haciendo?!

(Brika)

No lo veía, y él no me veía. Ojos cerrados y que el cariño flote entre nosotros. Mi frente pegada a la suya en un intento de calmarnos. Temblaba, incluso más que yo luego de un orgasmo.

Y entonces, frunció el ceño... y apartó su frente de la mía, provocándole a mi corazón una acelerada repentina. ¿Qué ocurre? ¿Por qué de pronto siento que se aleja?

Negó con la cabeza y se tensó. Por inercia me puse alerta, y aún más, cuando salió de mí y distraído se quitó el condón y lo lanzó a la piscina sin hacerle al menos un nudo. <¡Estas loco!> le hubiese gritado, de no ser porque al sentarse a mi lado con la mitad del cuerpo bajo el agua, se encontraba con una expresión de confusión impresionante. Me sentí descubierta y desprotegida y de inmediato llevé mis brazos a mis pechos para cubrirlos y doblé mis piernas, manteniéndolas bajo el agua. Sentí frío desde el interior de mí y se expandió a todo mi cuerpo. Temblé. Más de nervios que por la temperatura.