CAPITULO 50

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Pasaron varios días y aún seguía interna en el hospital, mi recuperación fue más larga de lo que habíamos previsto.

Jordan se pasaba el día conmigo en aquella habitación y más de una vez le llegué a exigir que fuera a casa a descansar.

Valerie había venido todos los días y trajo consigo a Cameron cada uno de ellos.

Jordan me explicó que acabó con Claudine y que exterminaron a más de la mitad del grupo de Cazadores... Los otros huyeron.

-Mi rey...- susurré mientras estrechaba a Cameron contra mi mientras él reía sin parar.

-Te echa de menos- susurró con pesar Valerie.

Jordan no le contó a nadie la verdadera razón por la que estaba en el hospital... Solo dijo que en un acto de rabia le di un golpe al espejo y éste se rompió en mi brazo, cortándome.

Escuchamos la puerta de la habitación y dirigimos con rapidez la vista a ésta. Era Jordan.

Sonrio al vernos y sus ojos se iluminaron al verme con Cameron en brazos.

-Veo que estás bien acompañada- sonrió él mientras se acercaba a mi- Te han dado el alta... Nos vamos pequeña.

Sonreí porque aquello era lo que esperaba des de que desperté, asentí satisfecha y Valerie cogió a Cameron mientras Jordan me ayudaba a recoger todo lo que tenía por ahí y a vestirme.

Una vez lo recogimos todo y salimos de aquel lugar sin mirar atrás.

En poco tiempo llegamos a casa y bajé del coche con Cameron en brazos para encontrarme allí con todos los miembros de la manada que se habían reunido para recibirme.

Agradecí mucho aquel gesto a todos y cada uno de ellos... Cuando llegué a Janette se me cayó el alma a los pies.

-Hola- musité al encontrarme con la hermana de Jake.

Ella sonrió triste y enseguida nos fundimos en un abrazo del cual tardamos en separarnos.

Janette tenía un par de años menos que yo y no hacía mucho des de su primera transformación.

-¿Qué te parece venir a cenar hoy con nosotros?- le pregunté mientras le frotaba los brazos con cariño.

-Bien- sonrió ella haciéndome sonreír a mi también.

Poco después entramos en casa y dejamos a Cameron con Valerie mientras Jordan y yo subíamos las escaleras para dejar todo lo que habíamos traído del hospital.

Jordan cerró la puerta detrás de nosotros y después de dejar las cosas sus ojos se encontraron con los míos.

Nos miramos y solo nosotros supimos lo que sentíamos en aquel momento.

-Ven aquí- susurró Jordan abriendo sus brazos.

No me lo pensé mucho y corrí hasta él pasando mis brazos por su cintura y enterrando mi rostro en su pecho mientras él me pasaba los brazos por los hombros y me estrechaba contra su cuerpo.

Suspiré al sentir la calidez de su cuerpo y supe que no quería apartarme de él nunca.

-Quiero estar así siempre...- susurré más para mí que para él.

-Vamos a estar así siempre- afirmó Jordan.

Sonreí y me encogí en sus brazos inconscientemente.

Poco después levanté el rostro y miré a Jordan, éste se fue acercando a mi lentamente y cuando nuestros labios se estuvieron a punto de rozar se detuvo en seco.

-Quiero saber si necesitas esto tanto como yo...- susurró él en mis labios.

-Porfavor...- susurré yo de vuelta.

Con solo esa simple palabra Jordan acortó la distancia que separaba nuestros labios y nos fundimos el uno en el otro, necesitandonos.

No sé cuánto tiempo estuvimos así pero hasta la eternidad me parecería poca.

Después de separarnos decidimos bajar y nos dirigimos hasta el salón donde escuchamos voces y alguna que otra risa.

Asomé la cabeza y vi a Cory en un sillón al lado de la chimenea, jugando y riendo con Cameron.

Sonreí inconscientemente y decidí entrar al salón.

Cory, nada más verme, dejó a Cameron con Valerie y corrió en mi dirección abrazándome por la cintura y levantándome del suelo.

Escuché su risa mientras le rodeaba los hombros con mis brazos y le estrechaba contra mí.

Escuchamos un gruñido y nos separamos para mirarnos y después mirar a Jordan para luego volver a mirarnos y estallar en carcajadas.

Cory me soltó y se alejó levantando las manos inocentemente mientras sonreía de medio lado.

-Que sea la última vez...- murmuró Jordan.

-Lo siento... Pero no puedo prometer algo así- dijo Cory haciendo enfadar aún más a Jordan.

Sonreí negando con la cabeza y fui hasta donde se encontraba Valerie con nuestro hijo.

Escuchamos la puerta de la entrada y nos miramos entre nosotros extrañados a la vez que dirigíamos nuestros ojos en dirección al pasillo.

Apareció Ethan, uno de los chicos de la manada, algo agitado y se dirigió a Jordan enseguida.

-Alfa... Hay una mujer que quiere hablar con Mack- avisó él.

-Dile que pase- me adelanté a Jordan el cual me miró mal por ello.

El chico asintió y poco después volvió acompañado de una mujer entrada en sus años de pelo ligeramente canoso y grandes ojos verdes los cuales tenían un brillo que me dió escalofríos.

-¿Y bien?- pregunté acercándome a la mujer.

Ésta sonrió de una manera extraña y se adelantó un paso antes de que Ethan la agarrara por el brazo y la hiciera retroceder.

-Está bien, Ethan- sonreí levemente haciendo que éste asintiera no muy seguro y soltara el brazo de la mujer.

-¿Te gustaría recuperarle?- preguntó sin rodeos la mujer.

-¿De qué hablas?

-Ohh vamos, vamos... No se haga la tonta, Luna... Sabe perfectamente que me refiero a su amiguito... ¿Como se llamaba?- preguntó ella frotándose la barbilla- Ah si... Jake- susurró la mujer.

Me adelanté amenazante los pocos pasos que quedaban entre ella y yo.

-¿Como te atreves siquiera a mencionarle?- le pregunté con lágrimas en los ojos y sintiendo como mi cuerpo se iba a descontrolar de un momento a otro.

-Yo puedo devolvertelo... Solo tienes que pedirlo...- dijo ésta de vuelta.

-Largo de aquí ahora mismo... ¡Fuera!- chillé haciendo que la mujer sonriera.

-Llevatela, Ethan- ordenó Jordan a la vez que se acercaba a mi y me frotaba los hombros.

Me alejé de su toque no queriendo pagar aquello con él e intenté controlarme lo máximo que pude.

-¡Joder!- chillé a la vez que uno de mis puños impactaba contra la pared y dejaba unos surcos en ésta.

Apoyé mi frente en la misma pared y me aguanté las ganas de llorar mientras empezaba a respirar hondo.

Noté una presencia a mi alrededor y supe que Jake estaba ahí en esos momentos.

Pero... ¿Y si fuese verdad lo que esa mujer decía? ¿Y si me podía devolver a Jake realmente?

JordanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora