Las ocurrencias de Whis

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Al día siguiente era miércoles, Seth no los levantó para ir al colegio, probablemente se le olvidó. El punto es que no habían ido a clases. Whis fue el primero en despertarse, eran las 6:00 am.

El niño estaba aburrido así que fue a buscar a Vados a su habitación pero seguía dormida, de hecho, él era el único que estaba despierto así que comenzó a saltar en su cama hasta que se teletransportó al patio. Como todavía estaba en proceso de aprendizaje por accidente cayó sentado en el piso y miró a su izquierda, allí había una pequeña plantita de frijoles que le habían dejado plantar a Cuckatail como una tarea.

Whis la observó y abrió uno de los ejotes que tenía la planta, se sorprendió cuando encontró frijoles pequeñitos dentro.

- genial! - dijo para si mismo - sembró uno y nacieron 7! - Whis corrió a la cocina y comenzó a plantar más frijolitos hasta que se terminaron - ok, solo hay que esperar a que crezcan... - Caminó a su cuarto y tomó su alcancía, luego fue al de juegos y comenzó a buscar todas las monedas que encontró y corrió a plantarlas - habrá más monedas luego! - se alegró.

- ¿qué estás haciendo Whis? - se escuchó una voz.

- hola Marcarita! - sonrió - ¿quieres ayudarme? soy todo un empresario!

- enterrar monedas no te hace un empresario - dijo ella - ¿por qué lo haces?

- te mostraré - señaló la planta de Cuckatail - él plantó una semilla y de ella salieron 7! así que si yo planto una moneda van a salir más!

- que buena idea! - dijo la niña - traeré mis monedas también! - corrió a su cuarto y cuando corría con sus monedas en las manos tropezó haciendo que se cayeran todas - no!!! - comenzó a llorar y Whis le tapó la boca para que no se despertaran los demás.

- no te preocupes Marcarita - sonrió Whis - sé donde conseguir más monedas.

Whis y Marcarita entraron a la habitación de Campahri ya que él estaba dormido, revisaron los pantalones que se había puesto el día anterior y sacaron todo el dinero que tenía.

- ¿funcionará si plantamos billetes? - preguntó Marcarita.

- imagino que si - dedujo él - ¿por qué no lo intentamos?

- claro! - Marcarita sacó unas tijeras - pero hagamoslo solo con las cabezas de los tipos de los billetes, a ver si nacen más!

- genial! - Whis y Marcarita reunieron todos los billetes que encontraron y comenzaron a cortarlos - creo que ya tenemos suficientes - sonrió - hay que plantarlos!

- todavía queda espacio en el patio - dijo Marcarita - plantemos más cosas... ¿el qué?

- ya sé! - dijo Whis y fue por uno de los vestidos de Vados - plantaré esto! a mi hermana mayor le gustan mucho los vestidos, así que le obsequiaré los que nazcan.

- si! - se emocionó Marcarita mientras corría a la habitación de Korn - a mi novio le gustan los libros! - plantó todos los que Korn tenía.

- Korn no es tu novio - Whis se extrañó.

- claro que si! - se enojó - y dile a Vados que se aleje de él!

- lo que sea - dijo Whis sacando una hamburguesa de la cocina y plantándola - esto es genial!

- lo sé! - dijo Marcarita plantando las ballenitas de Cognac - oye...¿no quieres más Trubas? - trató de plantar a la cerdita pero esta se movía mucho.

- a ver, te voy a ayudar! - Whis sostuvo a Truba pero esta se soltó y saltó sobre Whis para botarlo, por accidente Marcarita le lanzó tierra a él - oye! - se enojó.

12 contra 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora