Casado con una loca

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Dai reflexionó mucho esa noche que pasó en la cárcel, al parecer había sido una mala idea no hacerle caso a sus amigos.

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- ¿dónde está papá? - Tini fue con su abuelo - me acaban de llamar del hospital diciendo que se fue y no volvió.

- ¿enserio? - Seth se extrañó mucho por eso y decidió tomar las llaves de su auto para ir al hospital.

- voy con usted - Tini quiso acompañarlo.

- ¿quién cuidará a los pequeños si tú vienes?

Tini se lo pensó bien y fue a avisarle a Awamo y Campahri para que ellos se quedaran a cargo de sus hermanitos.

- no pienso hacerle caso a un gordo y a un narizón feo! - gritó Cognac, estaba muy alterado por Cuckatail, así que su actitud era peor que de costumbre.

- haz lo que quieras - Campahri se alzó de hombros.

En eso se escuchó que la pequeña Cus empezó a llorar, se había despertado, así que Awamo fue por ella y la cargó.

- huele a popó...

- pues cámbiala - dijo Campahri obvio.

- ¿por quién?!

- no seas tonto - tomó a la bebé de mala gana y fue a cambiarle el pañal.

- hola... - Mojito se acercó a Awamo en la sala - no hay nada de comer en el refri... ¿podemos ir a comprar algo?

- ya es algo tarde para salir - dijo con pena - pero no te preocupes, yo te compraré algo en la tienda, pero quédate aquí y no le digas nada a los demás ¿sí?

- sí - sonrió y se quedó esperando.

Awamo salió y caminó tranquilamente las pocas cuadras que separaban la casa de la tienda, pero en el camino una mujer se acercó a él siguiéndole el paso.

- hola Awamo...

- ¿hola? - se extrañó - ¿nos conocemos?

- tú no a mi pero yo sí los conozco, son una familia muy bella - dijo la mujer.

- creo que se ha confundido de familia - dijo recordando todo el caos que había sucedido.

- no! - dijo como si nada - ustedes son la familia que cualquiera querría.

- no se engañe...

- y tu padre es el hombre más sabio y apuesto del multiverso - empezó a hablarle de Daishinkan.

- ¿qué? no... últimamente ha estado muy distinto... 

- ¿por qué lo dices? - preguntó mientras seguían caminando a la tienda.

- no sé qué le ha pasado, pero no es el mismo... ahora no soporta nada y nos descuidó. A mi no me afecta ni a mis hermanos mayores, pero a los pequeños sí... a un pobre hermano lo atropelló un auto y también lo mordió una serpiente y papá ni siquiera se habría dado cuenta...

- ¿qué?! - se "sorprendió" - pobre Tail...

Awamo se extrañó mucho al oír eso.

- ¿cómo sabe que fue a él? - la miró raro - nunca lo mencioné.

- pues... digamos que tengo un contacto algo "cercano" con tu padre, y me lo comentó mientras fui a visitarlo.

- ¿fue al hospital con él?

- no... a prisión - dijo como si nada.

- ¿papá está en prisión?! - se alteró - ¿pero por qué?!

12 contra 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora