Adversarios [EDITANDO]

Coqueteo

Froid.

Froid estaba acostumbrado a algo desde que tenía memoria: si no te gusta, no te lo guardes.

—No me gusta que esté sentado con nosotros, Chaud.

Tanto Chaud como Zack levantaron la vista de sus almuerzos y la posaron en él.

—¿Uh? —preguntó Chaud con la boca llena de espagueti.

Froid rodó los ojos y se acercó para limpiarle una de las comisuras de su boca que estaba manchada con la salsa de la comida.

—¿Te refieres a mí? —preguntó Zack desde el otro lado de la mesa, donde los observaba a ambos con atención.

—Sí —contestó Froid con simplicidad, volviendo a su lugar.

—¿Te molesta que Zack esté aquí? —preguntó Chaud una vez consumió lo que tenía en la boca.

—Sí —Volvió a responder él.

Chaud y Zack lo observaron con atención, buscando la razón de su declaración, pero él simplemente se encogió de hombros y se quedó callado.

Chaud terminó bufando y negando con la cabeza.

—Froid, no seas odioso —Le dijo—. El amigo de Zack faltó hoy y sólo nos pidió que no lo dejemos solo.

—¡Es el chico más sociable de la vida!

—Froid, si en serio te molesta, me voy —Zack parecía hablar con sinceridad cuando hizo ademán de levantarse de la mesa, pero Chaud lo detuvo.

—No, Zack, quédate, todo está bien —Chaud se giró hacia Froid para mirarlo con el ceño fruncido—. No seas odioso —Le dijo.

Froid frunció ambos labios y se levantó de la mesa, tomando su mochila y retirándose del lugar sin decir palabra alguna.

-♡-

Estaban en la clase de Lengua cuando Froid se deslizó al puesto vacío junto a Chaud. El castaño estaba tan concentrado escribiendo en su cuaderno que no se dio cuenta, así que Froid aprovechó para dibujar rápidamente en una hoja limpia de su cuaderno, arrancarla y ponerla sobre su escritorio. 

Chaud tomó la hoja y la observó por unos segundos mientras Froid se sentía un poco nervioso. El castaño terminó riéndose ante su obra de arte.

—Eso no es muy cortés —Se quejó Froid haciendo un puchero.

—Deja de intentar buscarme pareja, Froid, estás peor que mamá —Le dijo Chaud, doblando la hoja y devolviéndosela.

Froid abrió la boca indignado y volvió a ver la hoja; había dibujado a Chaud con crespos desordenados y un poco despegados de su cabeza, a Zack con el rostro deforme y a él mismo sosteniendo los anillos de su boda.

—¿No te gustó? —preguntó.

—Me hubiera gustado si me hubieras dibujado casándome con otra persona, porque Zack no me gusta —Le respondió el castaño, continuando con la escritura en su cuaderno.

Froid se mordió el labio inferior para evitar sonreír.

—A la próxima te dibujo casándote conmigo, entonces —bromeó.

—No tengo ninguna objeción, señoría —respondió Chaud con una pequeña sonrisa.

Froid no supo que más decir así que sólo tachó al Zack de su dibujo, escribió un: "Soy muy fabuloso para casarme, pero si algún día me lo pides, seguramente diría que sí" y deslizó cuidadosamente la hoja dentro de la mochila del castaño.