2:30 am (parte I)

Los lugares más lindos del planeta.

*Narra Sebastian*

Ni siquiera el amor pude hacerle a Equim que apareció en mi casa por la noche mientras yo dormía.
Sus idas y vueltas eran la otra parte de la relación que teníamos. Me hablaba y revoleaba los ojos , cuando discutíamos, su voz se entrecortaba y era gracioso ver como levantaba una ceja.
Pero ese día que me dejó fue de otra manera, parecía como con miedo, yo lo conocía de maravillas, él nunca se rendía hacia lo que su corazón sentía.
Esa mañana no fui al colegio y mamá no estaba en casa, unos días atrás todo estaba bien en mamá que llegaba a casa con comida y la noche anterior a qué Equim rompa nuestra relación, junto con mi corazón, mamá nos había cocinado a mis hermanos y a mí, después de muchos meses.
En el transcurso del 2011 había fotografíado varias de etapas nuestras, las mismas que ese día había decidido él que ahora sean recuerdos.
Vi nuestras fotos durante toda la mañana, donde no había nadie más que mi soledad preguntando que había hecho mal, pensé en qué tal vez Equim había conocido a otro chico, que no lo celara, que no le dijera que lo iba a dejar, que no lo ocultara, que sea más lindo y que lo llevara a los lugares más lindos del planeta, esos que encontraba yo en el cuerpo de él, que se había ido y yo no lo había corrido a buscarlo.
Lloré unos minutos más frente a mí celular mirando nuestras fotos. Equim lucía hermoso hasta cuándo no quería lucir asi, con sus pestañas marcadas y cabello colorado.

Esa dia, un director técnico iba a ir a ver nuestro entrenamiento. No tenía ganas, no te ánimos, solo quería dormir hasta que él regrasara.

Mamá volvió a casa contenta y comenzó a cocinar.
- Voy a hacerle unas hamburguesas con puré para mí chiquito más talentoso porque hoy la tiene que romper en el entrenamiento.- Me dijo cuando me lave la cara para que no se note el llanto.

Ivana siempre apostó que mi talento en el fútbol nos iba a salvar cuando su gimnasio no tuviera más éxito o papá cortara la mantención.
Pero ella no era el apoyo que yo necesitaba, nunca estaba y siempre se iba a algún lugar con algún chico de la mitad de su edad. La gente hablaba de ella y por ende todos nosotros. Me daba vergüenza, vivía dopada con los ansiolíticos que tomaba. "Me los recetan para estar más tranquila" me decía y agregaba "Criar hijos sola es tan complicado".

Ella no era tan buena como para que le pasarán cosas buenas, de chica había sido la reina de la belleza del pueblo y se había escapado de su casa "porque eran pobres y ella tenía alma de rica". Humillaba a todas sus amigas, engañaba a mí papá, e incluso consumía drogas. Mi modelo de madre murió cuando yo era muy pequeño, por lo que ella cocinara era para mi, era una especie de favor para que después me pida algo o me recordara que para lo único que servía era para jugar fútbol.

Esa tarde fui al entrenamiento, con todas mis malas ganas. ¿Por qué Equim se había ido?
Ni siquiera el fútbol era tan importante como él aquel día.