Rin despertó en el mismo lugar en donde se había quedado dormida. Alzó la mirada y vio por el gran ventanal de la habitación...aún era de día. A lo mucho habrían transcurrido un par de horas.
La joven se incorporó y por un momento pensó en llamar a Sesshomaru, pero asumió que seguiría ocupado, así que no lo hizo. En su lugar, decidió aprovechar el tiempo e ir a la biblioteca del palacio a buscar información sobre lo que Kagome le había pedido.Llego a la gran biblioteca y de repente se sintió abrumada ya que había una gran cantidad de escritos y no sabía por dónde comenzar.
Finalmente optó por buscar información acerca de conjuros de purificación.
Sacó varios pergaminos que se suponía tenían información al respecto, así como varios libros. Uno por uno los leyó y los estudió, pero no encontró absolutamente nada que pudiera serle útil.
Cerró el último libro con frustración, se levantó y caminó a otra estantería para buscar otras opciones. Sacó un par de pergaminos más que debían contener información sobre fenómenos lunares. Su concentración fue interrumpida cuando una voz que conocía muy bien la llamó desde muy cerca...-------Rin?------Habló Sesshomaru captando la atención de la joven mientras entraba a la habitación.------Que haces?----preguntó el Yokai con suavidad mientras se acercaba a la joven que lo miraba.
-------Estoy...solo estoy buscando algunas cosas...-----Respondió Rin con el tono triste que se había quedado impregnado en su voz desde que había discutido con el demonio.------S...saliste sin armadura?-----preguntó la joven al notar que el demonio no llevaba aquel artefacto puesto.
Sesshomaru observó los escritos que Rin tenía en el suelo y que había revisado, el contenido extrañó un poco al Yokai...
-------No. La acabo de dejar, Que cosas buscas exactamente?------Cuestionó Sesshomaru intrigado.
--------Es...es que...-------Rin suspiró antes de continuar. -------Lo que ocurre es que, al parecer el señor Inuyasha está viéndose afectado por el año de la Luna de sangre. Al parecer le está costando más esfuerzo del normal mantenerse...ya sabes, tranquilo. Kagome me dijo que estaba muy preocupado de que las cosas empeorarán y estuvo intentando averiguar qué podía hacer al respecto. Totosai le dijo que...tu padre tenía algunos pergaminos con conjuros de purificación lo suficientemente fuertes para ayudarle.
Sesshomaru podía sentir la hostilidad en la voz de Rin. Era más que obvio para el que la discusión que habían tenido horas atrás le había afectado mucho. Decidió no decir nada al respecto por el momento y dejar que se calmara por sí sola, así que se limitó a suspirar un tanto pesadamente, ya que (por otro lado) verse de alguna manera orillando a ayudar al híbrido que era su medio hermano no le daba precisamente gusto, pero al final, no lo estaba haciendo por el, sino por Rin...
-------Bien... Ahí no vas a encontrar nada que te sirva.------Dijo Sesshomaru secamente mientras avanzaba pasando por un lado de la joven y dirigiéndose un poco más al fondo del pasillo. Ahí, se inclinó frente a un gran cofre de madera que estaba cerrado por alguna especie de conjuro, el cual Sesshomaru retiró solo con poner su mano y presionar un par de puntos con sus dedos. Hurgó en el baúl por un momento y después, sacó dos grandes pergaminos de su interior. Cerró el cofre, se levantó, tomó los que Rin tenía en sus manos y le entregó los que había obtenido.-------Son estos. Los conjuros que poseen se utilizan específicamente durante la luna de sangre, pero tienen diferentes tipos y niveles de utilidad y poder. Alguno de los que están al inicio debe de servir, más que nada porque, me supongo, no se tiene el propósito de purificar por completo al híbrido. Solo de mantener su sangre demoníaca al margen. No es así?
-------S..si. Así es. Gracias...Sesshomaru.-------Agradeció Rin aún un tanto cortante.
Sesshomaru solo asintió un poco con la cabeza y luego guardó los otros pergaminos.
Rin se hincó en el cálido suelo de madera y colocó los pergaminos en el suelo para comenzar a estudiarlos.
Sesshomaru la observó unos segundos, de alguna forma esperaba que la joven le dijera algo... Esperaba una avalancha de preguntas o cuestionamientos respecto a lo que había ocurrido horas atrás, o posiblemente la continuación de aquella discusión. Pronto se volvió evidente que Rin estaba tratando de evitar hablar con él así que no interfirió.El mismo tomó varios pergaminos, así como tinta y otros instrumentos; colocó todo en un gran escritorio de madera y se puso a atender algunos deberes...
Las horas pasaron y pasaron y ambos estaban inmersos en sus tareas, en ningún momento se dirigieron la palabra, pero de vez en cuando, alguno miraba discretamente al otro mientras éste no se daba cuenta.
Las horas continuaron pasando y después de algún tiempo, cuando Rin estaba por terminar lo suyo, empezó a observar al demonio más detenidamente: lo que Sesshomaru estaba haciendo era estudiar una especie de mapa que se encontraba en un código extraño, observaba un pergamino y luego otro, escribía cosas y a veces solo se quedaba pensativo... Era obvio que, cualquiera que fuera la tarea que el Yokai estaba llevando a cabo, lo estaba haciendo perder la cabeza; gruñía frustrado, apolla a su cabeza en sus manos, apretaba la mandíbula con fuerza... A la joven le pesaba mucho ver a su amado en ese estado... Si bien estaba acostumbrada al particular temperamento de Sesshomaru, Rin sabía que todo se le caía encima después de una pelea. Cada vez que ambos peleaban o discutían por algo, el parecía verse más afectado que ella, ya que parecía no poder volver a funcionar o concentrarse en alguna otra cosa.Rin suspiró pesadamente mientras veía al frustrado demonio...si bien le dolían muchas cosas, no soportaba verlo así, así que decidió sacar la bandera blanca e intentar calmar a su amado.
Se levantó de donde estaba y caminó hasta donde estaba el demonio. Se paró ligeramente detrás de él y puso su mano en su hombro, haciendo que el notara su presencia...--------Oye... Te sientes bien?-------Preguntó la joven suavemente.-------T..tal vez deberías ir a descansar...
--------No.-------Respondió Sesshomaru tajante.-------Tengo que terminar un par de asuntos.
Rin suspiró con un poco de pesadez. Acaricio el hombro del demonio y luego se movió para recargarse en el escritorio, quedando un poco más frente al demonío...
-------Enserio... Creo que, deberías dejar eso por un momento... Por qué no hablamos?-------Insistió Rin con dulzura.
-------No, Rin. Esto es importante.
-------Si quieres puedo ayuda....
-------No!------Interrumpió el demonio frustrado sin si quiera molestarse en mirar a la mujer.------Esto no te incumbe, déjame tranquilo!. La noche casi ha llegado, vete a descansar.
Aquella sensación que se había estado obligando a reprimir, volvió a aparecer en el corazón de la joven Rin. La frustración y el enojo junto con la impotencia y la tristeza volvieron a llenar su pecho y sus ojos, haciendo que se cristalizarán de nueva cuenta...
-------Bien...-------Dijo Rin con voz quebrada mientras caminaba fuera de la biblioteca a paso rápido y firme.
Dado que la biblioteca no estaba lejos de la habitación principal, la joven no tardó mucho en llegar a sus aposentos; cerró la puerta tras de sí al entrar de una manera estruendosa, corrió a la cama y se tendió mientras las lágrimas escapaban de sus ojos. Al pasar unos minutos y antes de que pudiera percatarse, el sueño la venció nuevamente...
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Aclisolar III: Luna de Sangre.
Fanfiction"La grandeza y trascendencia de un imperio, yace en el legado que contemplarán sus herederos".