Capítulo 36. A la normalidad.

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La luz del día penetro a través de la gran ventana de la habitación, acariciando el suave rostro de la hermosa Rin, quien dormía plácidamente.
La joven se estiró y después se incorporó ligeramente sobre su lecho...

------Sesshomaru?-----Llamó la mujer a su compañero quien no parecía estar en la habitación.

Atendiendo a su llamado, el demonio apareció cruzando la puerta de la habitación y de inmediato, se aproximó a su compañera...

------Rin...-----habló el demonio en tono bajo mientras miraba a la mujer con un semblante un tanto triste.

-------Hola...-----Saludó Rin y posteriormente se posó sobre sus rodillas para mirar de frente a su compañero.-------Oye... Lamento lo de ayer...

-------No, Rin.------Intervino Sesshomaru.-------Yo lo lamento. No debería hacerte llorar... Perdóname.

-------No te disculpes. Tal vez fui un tanto inflexible e intransigente, pero... Sesshomaru, yo... Quiero que sepas que... Te amo demasiado. Es...es muy difícil para mí demostrártelo, porque yo... Todo lo que tengo para darte es...mi propia vida. Sé que no es mucho, al menos comparado con todo lo que tú me has dado. Tú... Estás tan dispuesto a todo únicamente por mi... Sesshomaru perdóname. Perdóname por favor. Yo... No tengo derecho a pedirte nada. Me has dado todo, todo de ti y estás dispuesto a darme mucho, mucho más, aún cuando yo no te ofrezco mucho. Creo...que lo menos que puedo hacer por ti es ser un poco más comprensiva y...tratar de adaptarme un poco más a ti.

A Sesshomaru le partía el alma entera ver lágrimas en el rostro de su amada.
No quería que Rin se sintiera culpable y mucho menos quería que ella creyera que no lo estaba amando de la manera adecuada.
El Yokai pensaba que Rin le había dado mucho más de lo que él a ella...

-------Deja de llorar...-----Suplicó Sesshomaru mientras atraía hacia si a la muchacha para abrazarla fuertemente.-------No digas esas tonterías... Yo... Yo no te he dado más de lo que tú me has dado Rin. Tú me has entregado todo, absolutamente todo de ti. Me has dado tu vida, tu incondicional cariño. Sin importar cuan cruel te demuestre que puedo ser, sin importar cuantas veces falle y te lastime, tú sigues aquí. Tú... Me has dado tu corazón entero, aún cuando yo no he sabido cuidarlo. Para mí no representa el más mínimo esfuerzo darte un poco más de consideración...es lo menos que yo puedo hacer por ti. Has cambiado hasta tu propia mortalidad humana para seguirme... Escucharte es lo menos que puedo hacer. Por favor, Rin, perdóname y... Perdóname porque seguramente está no será la última vez que te hiera. Por favor... Discúlpame.

Las dulces palabras de desesperado arrepentimiento del demonio, golpearon el corazón de la sollozaste joven.
Ella no pudo responder, simplemente se aferró aún más al demonio, mientras hundía su rostro sobre su hombro y sollozaba, ahogada en lágrimas productos de una inmensa tormenta de miles de emociones juntas.
Sesshomaru tomó a la chica en brazos y sentándose a la orilla de la cama, la puso sobre sus piernas y la acunó en sus brazos como a una pequeña niña, mientras besaba su cabeza y la acariciaba intentando consolarla...

------Perdóname... Por...no amarte tanto como tú me amas a mí...-----Susurró la joven.


Se quedaron así durante algunas horas hasta que Rin finalmente se calmó.
Juntos fueron al comedor privado en donde la chica desayunó y una vez está hubo terminado, miró fijamente a su compañero, quien la miraba también...

--------Cuando querrás volver a la aldea?------Preguntó el demonio con tono cariñoso y una mirada tranquila.

--------Hummm... Pues... No lo sé. Quiero llevarle los sellos  a Kagome lo antes posible, además, debo hablar con la anciana Kaede sobre... El nuevo plan.

-------Por eso no te preocupes. Yo me encargaré de eso. Pero... En todo caso, no creo que quieras permanecer mucho tiempo aquí, sino por el contrario, tal vez sea mejor si pasas más tiempo en la aldea antes de que llegue el otoño. Seguro vas a extrañar a tus amigos.

------Si... Así es. Pero... Aun así, preferiría pasar más tiempo aquí. Quiero ayudarte.

-------Es tu decisión. Solo... Piensa bien en lo que quieres hacer.

-------Por lo pronto... Creo que sería buena idea volver a la aldea mañana...por la tarde al menos. Podría quedarme allá unos tres días y luego volver. Después de todo, será en verano cuando deba pasar más tiempo allá.

-------Muy bien. Si eso quieres...

Rin asintió entusiasta con la cabeza. Una vez más hubo silencio, hasta que la joven hablo de nuevo:

-------Oye... Esta noche va a ser especial...

Sesshomaru sonrió ligeramente y contesto:

-------Si... Así es...

------Tienes algo en mente?

--------Desde luego. Pero no te diré qué.

------Oye! Sabes que no me gusta esperar!------Protestó Rin con un puchero.

------Pues vas a tener que hacerlo. Por lo menos hasta que llegue la tarde.

------Y...mientras?? Qué haremos?

--------Debo ir a atender un par de cosas...

-------Iré contigo entonces.

------No puedo dejarte hacerlo. Debo atravesar la muralla. No puedes ir.

------Oh...ya veo. Pero... Entonces... Qué hago? Debe de haber algo que pueda hacer.

------Por hoy no. Solo...quédate aquí. Volveré antes del ocaso, está bien?

------Bien. Pero, dime, qué clase de asunto es el que tienes que atender?

-------No es nada de lo que debas preocuparte. Solo tengo que ir a ver a Kizoku. Necesito saber si tiene nueva información. Es todo.

------Comprendo. Él sabe de él nuevo plan que tienes?

------No. Y no considero necesario informárselo. Ni a él ni a nadie. Yo me haré cargo de ti.
Rin sonrió un poco y entorno los ojos; le causaba cierta ternura lo desconfiado que Sesshomaru era, especialmente cuando se trataba de ella.

------De acuerdo.-----Respondió la joven.-----Y que hay del señor Jaken? Él sabe que me voy a quedar?

------Se dará cuenta. Para cuando la fecha pautada este en puerta, yo me encargaré de todo y Jaken no me será útil. Él será el responsable de vigilarte entonces.

-----Oye!! No necesito que me cuiden. -----Protestó Rin entre risas.------pobre señor Jaken. Pensará que le bajaste el puesto a niñero. No seas tan malo con el, Sesshomaru. Ha hecho un buen trabajo como ministro, no?

--------No voy a bajarle el puesto. Solo que hay cosas que yo mismo debo hacer y Jaken no puede quedarse sin hacer nada...

------Es eso? O no confías en nadie más que en el para cuidarme mientras tú no estás?

El rostro de Rin dibujó una expresión juguetona y Sesshomaru entornó los ojos disimuladamente mientras intentaba disimular una sonrisa torcida...

-------No seas tonta.-----Respondió el demonio sin poder dejar de lado esa ligera sonrisa.
Rin esbozó una aún más amplia y río un poco.

Sé que es un capítulo bastante aburrido, pero les prometo que el siguiente estará DE FUEGO 😉😏🔥
Gracias a todos por leer! 😘💕

Aclisolar III: Luna de Sangre.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora