Capítulo 119. Estar ahí.

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En el transcurso de la mañana, Rin tuvo que alimentar a los recién nacidos por lo menos otras dos veces, cosa que a Sesshomaru comenzó a frustrarle, ya que era evidente lo cansada que ella estaba y necesitaba descansar iperativamente, de lo contrario, el demonio temía que pudiese enfermarse de alguna manera...

Rin estaba recostada después de haber alimentado a los recién nacidos nuevamente. No llevaba más de media hora dormida cuando Sesshomaru se dio cuenta que se encogía en su lecho y al poco tiempo abrió los ojos...

------Sesshomaru...------Llamó Rin.

-------Que ocurre?------Preguntó el con algo de preocupación.

--------Los bebés están bien? Es que... Tengo la sensación de que está empezando a hacer mucho frío...

Sesshomaru alzó ligeramente el ceño con extrañeza...

--------Ellos están bien...la casa está bastante caliente, Rin. Te sientes mal? Debo llamar a las mikos?

-------No...no las despiertes, por favor...

El demonio extendió su brazo y toco la frente de su compañera.

-------Estás muy fría.-------El demonio se levantó de la cama y la rodeó hasta el lado de su compañera.--------Si no logró hacer que entres en calor en unos minutos, llamaré a las mikos.-------Advirtió él y acto seguido, ayudó a su amada a recorrerse un poco más hacia el centro de la cama, mientras ella acunaba a los recién nacidos con su cuerpo, dejando que el demonio la cubriera a ella con el suyo, mientras también la cubría con su estola.
El Yokai abrazaba a la mujer por la espalda, mientras está permanecía pegada a su cálido cuerpo y poco a poco, la temperatura de la mujer paso a ser más cálida.

-------Gracias, mi vida.------agradeció ella con tono de alivio.

-------Estas segura de que estás bien, Rin? No te duele nada? No te sientes mal?

-------Estoy bien...bueno...en lo que cabe esperar. Me duele todo y estoy algo cansada, pero es normal, no te angusties.

-------Ni siquiera pudiste dormir lo suficiente... Debe de haber una manera en que puedas alimentarlos sin que tengas que levantarte...

------Tranquilo...------Decía ella débilmente comenzando a quedarse dormida.------Estoy bien...

Mientras Rin volvía a dormir profundamente, Sesshomaru intentaba pensar en alguna manera para que su compañera y madre de sus hijos pudiese alimentarlos la próxima vez sin que hubiera necesidad de despertarla.
Al cabo de unas horas, una idea apareció en su cabeza y no mucho tiempo después tuvo la oportunidad de probarla, ya que los mellizos comenzaron a protestar nuevamente pidiendo el seno de su madre.
Antes de que los pequeños hicieran más ruido y despertaran a su progenitora, el demonio procedió a colocar a la mujer boca arriba con mucho cuidado y sin despertarla, rodeo sus costados con sábanas y almohadas, apoyando sus brazos en ellas, después y siendo aún más cuidadoso colocó un bebé a cada lado, acusándolos con los brazos de su amada, pero permitiéndoles estar medio boca abajo para que pudieran prenderse de sus senos, cosa que hicieron a penas su padre los hubo descubierto.
El demonio miro con satisfacción como sus recién nacidos hijos se alimentaban de su madre mientras ésta continuaba dormida, al menos por un momento, ya que la mujer abrió los ojos al percatarse ligeramente de lo que ocurría...

------Mi amor...------Le sonrió Rin a su protector aún medio dormida.------Muchas gracias...

-------Descuida...------Dijo el demonio dulcemente mientras se inclinaba para besar la frente de la mujer.-------Duerme. Yo me hago cargo.

Rin asintió con una sonrisa que irradiaba confianza y posteriormente, volvió a quedarse profundamente dormida.

Una vez los pequeños bebés se desprendieron del seno de su madre indicando que estaban satisfechos nuevamente, el Yokai pasó a palmear sus espaldas con sumo cuidado tal como le había visto hacer a Rin. Después, acomodó a los pequeños más boca arriba recordando que la vieja miko había dicho sientes de veces antes que los bebés debían dormir boca arriba siempre. Así pues ambos queque los quedaron aferrados a su madre y perfectamente acunados por sus brazos, quedándose nuevamente completamente dormidos.
Sesshomaru sonrió con satisfacción y volvió a cubrir el pecho de su amada con sus ropas, para después recostarse nuevamente a su lado, vigilando su sueño y el de sus hijos.

Un par de horas más después, la vieja miko entró en la habitación a paso sigiloso...

-------Buen día, Lord Sesshomaru.------Le sonrió la anciana.-------Todo está bien por aquí?

-------Si.------Aseguró el demonio.-------Todo está bien.

-------Oh vaya...------Expresó la miko con ternura al ver a su protegida profundamente dormida, acunando a los recién nacidos con sus brazos.-------Pero qué maravilla.------La anciana acaricio el rostro de la joven madre con delicadeza.-------Mi hermosa niña... -------Suspiró la anciana con inmensa compasión en la voz y la mirada, dirigiéndose a la joven mujer como si no hubiese nadie más en la habitación.------Hiciste un gran trabajo... Eres la mujer más fuerte que conozco...mi hermosa Rin...------Lágrimas comenzaron a recorrer el rostro de la anciana y posteriormente, puso su atención en los dos pequeños que dormían cálidamente a ambos lados de su madre.-------No puedo creer lo hermosos que son...------Lloro la mujer acariciando a los recién nacidos y posteriormente, miro al demonio que era su progenitor.-------Lord Sesshomaru, felicitaciones.-----Le sonrió la sacerdotisa.--------Son los bebés más hermosos que haya visto.

-------Ellos...------Decía el demonio mirando a los pequeños.------Están bien? Aiko...como esta ella?

-------No tiene nada de qué preocuparse, señor Sesshomaru.-------Aseguro la miko con una sonrisa. ------A pesar de haber venido casi un mes completo antes de lo planeado y de los problemas que hubo con la pequeña, ambos están sumamente fuertes y perfectamente sanos. Pesan por lo menos poco más de dos kilos cada uno, respiran perfectamente, comen por sí solos con facilidad y sus corazoncitos laten de maravilla... Están perfectamente, se lo aseguro.

-------Y Rin? ------Preguntó el demonio mirando a su a,anda con angustia.------Esta muy pálida... Cuánto tiempo más va a seguir sangrando?

-------Tranquilo. Le aseguro que ella está bien. El sangrado que tiene ahora no tiene nada que ver con la hemorragia que sufrió durante el segundo parto. Es solo que su cuerpo está limpiándose, eso es todo. Es perfectamente normal. Sé que perdió mucha sangre, pero sé que usted la conoce bien y sabe lo fuerte que ella es. Le aseguro que se recuperará por completo. Solo tiene que comer muy bien y descansar debidamente.  ------La anciana vio al demonio tomar la mano de su amada...------Lord Sesshomaru... Si me permite decírselo...muchas gracias por haber estado aquí... No es nada común que los padres estén presentes durante el parto... Ni siquiera durante las revisiones...pero usted estuvo en todo momento. No me cabe la menor duda de cuanto usted ama a Rin... Lo he sabido desde el día en que la trajo a vivir conmigo. Sabe? Todo hombre que la ha visto a querido tenerla, pero ninguno jamás la ah amado... Yo... No podría pedir un mejor hombre para cuidar de ella que usted. Estos niños...no podrían tener un mejor padre.  Sé que usted va a cuidarlos y a protegerlos siempre. Sin importar que... --------El demonio miro la súplica en el rostro de la mujer mayor, mientras veía también las lágrimas correr por su rostro.------señor Sesshomaru, se lo suplico, cuando usted se vaya el día de hoy... Tiene que volver. Por favor. No deje que estos bebés crezcan sin conocer a su padre. No deje que mi niña tenga que criarlos sola...por favor, no los deje.

Sesshomaru miró fijamente a la mujer mayor y después, puso su atención en su amada y en los hijos que acababa de parir...

-------Jamás. --------Aseguró el.

Aclisolar III: Luna de Sangre.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora