Aclisolar III: Luna de Sangre.

Capitulo 123. La caída. (Parte 1)

-------Sabes que es un suicidio, no?------Cuestionó la demonesa, mientras miraba hacia el carmesí horizonte recargada en la pared del pórtico. Sesshomaru no respondió, simplemente continuó mirando a su progenitora sin quitar su mirada severa.--------Bueno... En todo caso...------Continuaba Irasue.-------Te acompañaré.

--------Necesito que te quedes.-----Pidió el demonio.------Necesito de alguien lo suficientemente competente para proteger a Rin y a mis hijos... ------El demonio poso su mirada en la inmensa y roja luna.------Especialmente si algo sale mal...

-------No digas tonterías!-----Reclamó la demonesa.-------Más te vale que nada salga mal, Sesshomaru...porque...de ser así... Dudo mucho que haya algo que yo pueda hacer para proteger a la chica y a los cachorros...

-------Se que pensaras en algo de ser necesario... ------El demonio suspiró con un poco de pesadez.-------Después de todo...son tu sangre también.

Irasue suspiró y bajó la mirada...

--------Si... Lo son...------La Yokai miró a los ojos a su hijo...-------Pero son tus hijos, Sesshomaru... Más te vale hacer lo necesario para deshacerte de Dokuhe y volver aquí con ellos... Pero...de no ser así... Me haré cargo, te lo prometo.-----El demonio miro a su progenitora y con un ademán de cabeza, le expresó su confianza. Antes de que alguno pudiese decir algo más, el llanto de los mellizos resonó, llamando la atención de Sesshomaru, quien miró hacia la puerta de la cabaña...------Ve.-----Dijo Irasue.------Han estado bastante inquietos... Mejor ve a ver qué ocurre.

Sesshomaru asintió con una expresión de sonrisa y acto seguido, entro a la casa, dirigiéndose de inmediato a la habitación principal.
Rin estaba de pie, con ambos bebés en brazos, arrullándolos para intentar tranquilizarlos...

-------Tranquilos...------Consolaba la joven madre.-------No pasa nada, pequeños...

-------Rin?------Llamó Sesshomaru por lo bajo mientas se acercaba a su compañera.

-------Hola...------Saludó ella Sin dejar de prestar atención a los bebés en sus brazos.

-------Que sucede?-----Preguntó el demonio parándose frente a la mujer y acariciando a los dos pequeños suavemente.

-------No lo sé... No han podido dormir y ahora no puedo hacer que dejen de llorar... Ya intenté alimentarlos pero... No quieren...

El demonio miro con compasión a los pequeños en los brazos de su amada y acaricio su plumoso cabello con cariño, lo cual, prácticamente de inmediato, hizo que los pequeños se tranquilizaran un poco, cambiando su fuerte llanto por sollozos más suaves...
Rin sonrió ligeramente al ver finalmente una solución a la inquietud de sus pequeños hijos...

---------Si bebés... Es papá... -------Sonreía la joven madre.-------Él está aquí, no pasa nada... --------La joven miro a su amado...-------Mi vida...--------Sesshomaru respondió al llamado de Rin...------Cárgalos... Yo...creo que están algo preocupados... Se sentirán más seguros en tus brazos...------El demonio asintió suavemente y acto seguido, su compañera paso a poner a los pequeños en sus brazos...------Eso es...------Sonrió Rin al ver cómo los mellizos se calmaban al pasar a los protectores brazos de su padre.

Sesshomaru miró a los bebés que su amada le entregó en brazos, los sintió calmarse, escuchó sus diminutos corazones latir con más tranquilidad y al poco tiempo, se acurrucaron contra su cuerpo y se aferraron a sus ropas...

-------Justo como cuando estaban en mi panza...-----Sonrió Rin.-------Lo recuerdas? Dejaban de patearme si tú los acariciabas... Te aman demasiado.

Sesshomaru sonrió levemente para después caminar un poco hacia la cama y una vez ahí, se sentó en la orilla, con Rin a su lado...

-------Yo también...los amo demasiado.--------Expresó el Yokai sin dejar de mirar a los cachorros.--------Rin...------El demonio miró a la joven a su lado...-------Gracias... En verdad, muchas gracias.

--------Mi vida... No hay nada que tengas que agradecerme.------Aseguró ella recargando su cabeza en su hombro.------Te amo...Sesshomaru...------El demonio besó la cabeza de su amada.-------Por favor, regresa pronto sano y salvo...

Sesshomaru no dijo nada, solo se quedó en silencio al lado de su compañera, mientras contemplaba a sus recién nacidos hijos...

Después de un tiempo, el demonio entregó a los mellizos a su madre para que ésta los alimentara; la pareja estaba concentrada en ese momento, cuando la voz de la vieja miko interrumpió...

--------Lord Sesshomaru?

-------Que pasa?-----Preguntó él demonio mirando a la anciana quien estaba en la puerta de la habitación...

--------El señor Jaken a regresado y está buscándolo.------Informó la miko.

--------Voy en un momento.-----Aseguró el Yokai a lo que la anciana asintió y procedió a marcharse...

--------A que lo enviaste al este?-----Preguntó la joven madre.

-------Le he pedido traer algo, además de ir a supervisar todo, ya que me ausenté de manera presipitada.

Rin sonrió y se sonrojó un poco...

------Si...siento que tuvieras que regresar tan repentinamente.------Se excusó la joven.

------Ya no importa.------Sonrió el demonio y besó la frente de su amada.------Ahora vuelvo.

El demonio se levantó y salió de la habitación hacia el pasillo, en donde encontró a su fiel subordinado...

------Amo Sesshomaru...-----Saludó Jaken.------Traje lo que me pidió.------El demonio verde le extendió a su amo algo que estaba envuelto en una tela blanca...

-------Bien, gracias.------Expresó el Yokai tomando el encargo en sus manos...

-------Y todo parece en orden en el este, amo bonito. Todo está preparado!

-------Muy bien. Partiré en poco tiempo y necesito que tú y Ah-Un se queden y protejan a Rin y a los cachorros, entendiste?

--------Si amo, desde luego.

-------No importa lo que ocurra, Jaken, protege a Rin y a los bebés, esa es tu labor a partir de ahora.

El demonio verde miro a los ojos así amo...como si sus ojos auguraran algo terrible...

-------Si, amo...----- prometía el pequeño demonio verde.------Yo daría mi vida por la joven Rin y por los chiquitos... Cuente conmigo, amo Sesshomaru.

Sesshomaru guardó silencio unos segundos antes de suavizar su mirada y responder:

------Gracias, Jaken.

La atención de Sesshomaru se vio interrumpida de repente, debido a que algo alertó su agudo sentido del olfato, haciéndolo fruncir el ceño con evidente molestia mientras entregaba a Jaken lo que éste le había llevado y caminaba hacia la entrada...

-------Jaken...------Ordenaba el Lord.------Quédate aquí, asegúrate de que Rin no salga...

--------Eh...si...si amo bonito.------Tartamudeo el demonio verde sin estar seguro de lo que ocurría.

Sesshomaru salió de la casa y se encontró en el pórtico con su madre, Inuyasha, Shippo, Kohaku, Inuyasha y el monje, quienes miraban hacia la planicie, en donde comenzaban a llegar cientos de Yokai, congregándose a algunos metros de la casa...
El Yokai peliplateado miró la escena con profunda furia y acto seguido desenvainó su espada...