Aclisolar III: Luna de Sangre.

Capítulo 41. Incertidumbre y risas.

Sesshomaru llevó a Rin de regreso a la aldea...

-------Escucha, no quiero que te acerques si quiera al bosque hasta que yo haya dado con ese perro, entendido?------Ordenó el demonio más en tono de súplica mientras se despedía de su amada.

--------Te lo prometo. -----Aseguró Rin.------Pero por favor, Sesshomaru, prométeme que no le darás más molestias al señor Koga. El en verdad está tratando de ayudar.

-------Haré lo que tenga que hacer Rin. ------Concluyó Sesshomaru.

--------Bien...------Suspiró la joven insatisfecha.

--------Oye...

-------Que pasa?

-------Cuando te tomé en el manantial, no te lastimé?

-------Ah? No.------Aseguró Rin.------Me asustaste, pero cuando vi que eras tú... No te preocupes, no me hiciste daño. Tal vez si me tomaste con algo de fuerza, pero estoy bien.

-------De acuerdo.------Se Tranqulizó el Yokai. -------Ahora ve adentro. Volveré pronto, está bien?

--------Está bien.

Sesshomaru besó la frente de su amada y se dispuso a marcharse, pero fue interrumpido por la dulce vos de la joven que lo llamaba:

-------Oye, Sesshomaru...

-------Hum?------Volteo el demonio atendiendo al llamado de la chica.

-------Te amo. Demasiado.

Sesshomaru le correspondió a la joven con una ligera sonrisa ladina...

-------También yo.

Dicho eso, el Yokai desapareció.

Rin entró a la cabaña y dejó el recipiente con agua en el suelo...

-------Anciana Kaede?------llamó la joven.

-------Ah! Mi niña!------Exclamó la anciana corriendo al encuentro de la joven.------Gracias al cielo estás a salvo!! Inuyasha ya me contó todo.

-------Si... Lamento mucho que se haya preocupado.

-------Ni lo menciones Rin. Dioses, no sabes el gusto que me da que estés bien. Bendito sea el cielo que Lord Sesshomaru está aquí.

-------No se preocupe. Todo va a estar bien.

-------El Lord ya fue a buscar a ese lobo insolente?

-------Si..,así es. Volverá pronto, estoy segura.

-------Si, seguro que así será. Ojalá le de una paliza tremenda!

-------Prometió no hacerle daño. Lo entregará al señor Koga.

--------No me importa lo que hayan acordado. No quiero que se acerque a mi nenita. Y estoy segura que él tampoco.

Rin entorno los ojos con dulzura y le sonrió a la miko.

Sesshomaru llevaba un paso arrasador. Le había tomado un poco más de tiempo del pensado dar con un ligero rastro del sujeto al que buscaba, pero ahora que lo tenía bien identificado, corría sin titubeo dispuesto a alcanzarlo y Koga le seguía el paso tan de cerca como le era posible.

Avanzaron durante un par de horas atravesando el ancho del bosque, casi rodeando el territorio entero.
La tarde había entrado de lleno cuando, finalmente, dieron con su objetivo.
Sesshomaru se detuvo en una planicie frente a las faldas de las montañas...

-------Están aquí.------Afirmó el Lordo.

--------Bien. Me encargaré desde aquí.-------Dijo Koga disponiéndose a tomar la delantera.