Carnid: El inicio de su historia ©

Enid

- Papá se fue?

- Si Caty- respondí, mientras empujaba un pesado cajón, para trabar la puerta de la tienda, y así no entrarían caminantes.

- Nos abandonó?

- Si Caty- dije haciendo un gran esfuerzo con ese cajón de mierda. Quien me mandó a vivir...

- Mama se...fue con él?

- No Caty. Mama se fue a otro...lugar-dije resignada por no mover ese cajón y me dispuse a buscar otra cosa.

- Se fue al cielo?

- Podría decirse...

- Mamá se murió y papá nos abandonó?

Miré a mi hermanita. Era pequeña pero entendía la situación. También no estábamos en un buen momento para que me siente le explique, y le de tiempo de digerirlo y de consolarla.

- Si Caty. Así son las cosas...bienvenida al nuevo mundo.

Ella no me respondió y se largó a llorar. Tiré al suelo las herramientas y la abrazé. La consolé, sin importar en que sus sollozos podrían atraer a los caminantes.

- M-Mama...yo la quería y a papi tambien...- lloraba y no paraba. Yo trataba de consolarla pero no la culpaba, si a su edad me habría pasado todo eso no estaría viva.

Cuando mi cabeza pudo procesar lo que ocurría senté a Caty a mi lado y le conté todo, papá nos había abandonado. Estábamos nosotras dos solas y debíamos luchar si queríamos sobrevivir.

- Ya cálmate pequeña. Mamá está en un mundo mejor y papá...- miré a otro lado y seguí con mi tarea.

Mi hermana se secó las lagrimas.

- Papá me dijo que hay que sobrevivir como sea, como puedas no importa que tan malas sean las decisiones que tomes para hacerlo, debemos vivir. Porque un día eres feliz y tienes familia y otro... ... estas solo. Me dijo que te lo diga a vos y a mama...pero, bueno ella ya no está.

Me quedé mirándola seria. Caty siempre me sorprendía por la memoria y comprensión que tenia de las cosas. Pensar que eramos felices. Pensar que teníamos una vida normal. Pensar que estábamos vivas. Lo estamos pero es como que nuestras ganas de vivir estaban frescas y a la vez agotadas.  Como si nuestras almas nos pidieran que paráramos.

En eso me acordé de esa comunidad. Esa que había gente...refugio, Atlanta creo que se llamaba. Podíamos buscarlos, convencerlos. No podían cerrarnos la hospitalidad en la car a unas pobres huérfanas.

- Pasaremos la noche aquí. Mañana partiremos y empacaremos temprano. 

Y eso haremos... sobreviviremos...