Carnid: El inicio de su historia ©

Carl

La miré por simple instinto. Ella soltó un suspiro resignado pero asintió con la cabeza. Al menos alguien me comprendía.

-Hey, el niño tiene razón-llamó la atención de todos alzando la voz, y decapitando a un caminante que se encontraba a su lado. Hice una mueca-Hay que distraerlos, no solo es estar concentrados. Con concentración no hacemos nada si los caminantes vienen en aumento. Necesitamos distraerlos o reagruparlos en un mismo lugar y ¡Pump! Los matamos todos-acompañó su exclamación con otro revoleó de hacha.

-Daryl le daría la razón, Rick-acotó Tyresee.

-Yo no soy Daryl, pero apoyo su idea. Hay que pensar en un plan rápido y eficaz- dijo Michonne.

Mi padre asintió y disparó en la cabeza de un caminante.

-Bueno, hay que pensar rápido. Hay algunos que se están desviando para los costados, lo que lleva a la parte trasera- exclamó Gleen, mientras forcejeaba con algunos para desviarlos.

-Necesitamos un objeto, algo que haga ruido o al menos haga la suficiente luz para distraerlos.

-Suficiente luz cuando ya está asomando el sol, genial-comenté de mala gana ante la sugerencia de mi papá.

-¿Alguna idea Carl?- preguntó éste, tenso ante el tono con el que le hablaba.

-Dejen sus peleas familiares para después- intervino Michonne.

-¿No tienes algo en esa mochila que cargas?-pregunté, dirigiéndome a Enid.

-No es por ser pesimista, pero no me parece un plan muy eficaz si dependemos de lo que tiene o no Enid en su mochila.-dijo Gleen.

-Estoy de acuerdo, me ponen en aprietos- respondió ella con una media sonrisa y levantó la mirada. Su cuchillo dio justo en el ojo derecho de un caminante.

Empezó a rebuscar su mochila mientras el resto se encargaba de cuidarle la espalda. Vi que frunció el ceño insatisfecha.

-¿Nada?-me agaché para estar a su altura y a su lado.

Negó con la cabeza.

-Generalmente, uso mis temporizadores para ocasiones muy extremas, ya no se consiguen como antes pero...-se quedó pensativa.

-Enid, si esto sigue así se convertirá en una ocasión extrema-puntualicé.

-No-respondió sonriendo y sacó, por fin, un objeto de su mochila-Tengo el objeto.-añadió con seguridad.

-¡¿Un desodorante?!-exclamó atónito Tyresse.

-Mejor dicho, un antitranspirante- Contestó con total normalidad Enid, como si estuvieran hablando de trivialidades tranquilamente sin el caos de fondo.

-Estamos perdidos- dijo Gleen.

-Y dicen ser adultos...

Rick y Michonne se quedaron fuera de la situación porque estaban empeñados en la tarea de matar caminantes. Pero ésta se giró rápidamente hacia nosotros y miró el objeto que descansaba en las manos de Enid.

-Habrá que alejarse-indicó y siguió con lo suyo.

Me encontré mas confundido que antes.

-¿Qué? ¿Perfumarás las cabezas de cada caminante? No me parece un plan muy rápido...- dije.

-Ni muy eficaz-añadió Gleen.

-No creo que con un antitranspirante podremos cegarlos o algo así-dijo Tyresse, que se lo notaba bastante agitado por la acción.

-Hombres-suspiró Enid, revoleando los ojos.

-Pues, discúlpame por no entender la función que tiene un desodorante en todo esto-con una mueca, decidí ayudar a Tyresse.