Lo que Andrea Garcia pensaba que sería un fin de semana tranquilo, termina siendo una salida de antro con sus 2 mejores amigas. Con lo que ella no cuenta es que al conocer a dos hombres su vida está a punto de cambiar. Scott Cooper un sexy abogado e...
Cuando desperté estaba todo oscuro, me gire para ver a Trevor y él aún sigue dormido. Lo observe durante algunos segundos, se ve tan lindo, tan relajado mientras duerme. Pero como todo esto tiene un final...
Me levante, busque mi ropa y me vestí. No se que hora es, tengo que ir a la recamara donde se supone tenía que dormir. Ahí deje mi celular y las llaves de mi coche que me entrego Trevor durante la cena. Tengo que irme antes de que despierte. No se en donde estoy, pero sé que una vez saliendo de aquí puedo guiarme por los señalamientos en la carretera. No debemos estar lejos de la carretera principal. Sólo fueron aproximadamente 40 minutos de la clínica hacía aquí.
Voy de salida, logre subir a mi camioneta sin que nadie me viera, y si lo hicieron nadie me detuvo. Voy conduciendo y ¡Mierda!... hay un portón y no se como se abre, tendré que bajarme, solo espero que sea manual o algo así...
¬¿Va a algún lado señorita?. ¬ Una voz femenina a mis espaldas me hace dar un brinco.
Volteo y es la misma mujer que me interceptó junto con todos los otros hombres.
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¬Tengo que irme. ¬ Es todo lo que le digo y ella asiente.
¬Yo puedo abrirte... pero con 2 condiciones. ¿Aceptas?.
¬Sí. ¬ Quisiera decirle que no, pero si quiero irme no tengo otra opción.
Se que mi presencia le incomoda y vaya que el sentimiento es mutuo.
¬La primera es que me digas que tienes con el señor Beckett. ¬ Hace una pausa. ¬ Y la segunda es que no vuelvas a verlo. ¬¿Acaso está celosa?. ¿Tiene algo con él?. ¿Por qué le interesa?.
Tantas preguntas se comienzan a formar en mi cabeza, sin embargo, no pregunto ninguna. Además no tengo derecho. Son las 4:30 am y en cuatro horas y media me caso. Se que yéndome de aquí no hay marcha atrás.
¬Creo que eso tendrías que preguntarlo a él. Y te recuerdo que yo no lo busque, fue él quien hizo que me trajeran. ¿O tan rápido se te olvido?. ¬Estoy hablando como si tuviéramos algo Trevor y yo, lo sé, porque ella está enojada y quizá celosa, se que trata de cuidar lo que considera suyo.
¡Pff, si supiera!...
¬¿Quieres salir de aquí, o no?.¬ Contestó furiosa.
¬No tenemos nada, como sabes mañana me caso. Así que, no tienes nada de qué preocuparte. ¬No me contesta, se va y enseguida el portón comienza a abrirse.
Me apresuro a subir a mi auto y salgo a todo lo que da en él. Cuanto más lejos este cuando él despierte se que será mejor.
