Cuando Kim Jongin es condenado a cadena perpetua por asesinato, su hermano Seokjin tiene que luchar valientemente contra las probabilidades de sobrevivir en las calles de Seoul, solo y sin hogar, intentando todo lo posible para reunir el dinero sufi...
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Incluso los domingos por la mañana, Yoongi se levanta exactamente a las 6:30. Se ducha en su baño de diseño industrial, prepara el desayuno en su cocina multifuncional de color gris claro y abandona su apartamento de estilo loft a las siete en punto para llevar a su perro bien entrenado a una caminata de veinte minutos.
Aquel domingo, cuando se puso la chaqueta de cuero, mirando por las ventanas de la fábrica de trece pisos para ver el clima sus rasgos antes bien descansados se oscurecieron notablemente, al ver a un joven desaliñado, sosteniendo una mano en su cerca de cadena alta, mientras vomita hasta sus tripas. Justo en frente de la puerta de su propiedad.
-Qué mierda...- Yoongi arrugó la cara y se palmeó el muslo con enojo, ordenándole a su perro que lo siguiera afuera.
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Seokjin estaba bastante seguro de que no sobreviviría a la siguiente hora. Su estómago se contrajo y le dolía, no podía dejar de vomitar y, a pesar del sudor frío que corría por su cuello y cara, estaba claro que experimentaría un golpe de calor en cualquier momento.
Recorrió otra corriente delgada de líquido amarillento, jadeando por el dolor en la garganta, mirando débilmente a la izquierda cuando un perro grande y ladrador corría en su dirección. Se limpió la boca mojada con la manga de la camisa manchada y ni siquiera se inmutó. Estaba al otro lado de la cerca y se sentía demasiado desdichado para preocuparse, incluso si ese perro se lo comiera vivo.
-Quieto- un hombre pálido con chaqueta de cuero chasqueó los dedos, haciendo que el perro se sentara en silencio- Realmente estás haciendo un maldito mal trabajo tratando a mi propiedad con respeto- observó a Seokjin un momento a través de la cerca, claramente disgustado, y luego sacudió la cabeza mientras abría la puerta- ¿Has gastado todo tu dinero en bebidas?
Seokjin quiso decir que no, pero luego se inclinó, seco y profundamente.
-¿Marihuana?- Yoongi sonaba tranquilo y neutral cuando caminó hacia Seokjin, agarrando su hombro para empujarlo en posición vertical, examinando su cara pálida- ¿Crack? ¿Pastillas?- no obtuvo respuesta y buscó en los bolsillos del pantalón demasiado sucio, encontrando un alambre, un pequeño peluche de dinosaurio y todo el salario del trabajo de la noche anterior, más una propina.
Seokjin apartó el brazo del hombre, gruñendo enojado.
Yoongi ignoró el comportamiento desafiante, lo tomó por el cuello y lo llevó por la puerta abierta, hacia el edificio.
-Vamos.
Seokjin intentó escapar de su agarre, jadeando de rabia y frustración. No había infringido ninguna regla, había esperado afuera y no había dormido en la propiedad, tenía el dinero solicitado y solo quería hacer su estúpida cruz azul en el número dos. Realmente no sabía por qué este hombre estaba tan enojado de nuevo.
-Detente- Yoongi le dijo con calma, dejándolo ir delante de la puerta blanca del sótano- Esperas en mi oficina. Recuestate en mi sillon- sacó una llave y la dejó caer al suelo encogiéndose de hombros, cuando Seokjin no la tomó, sino que miró desafiante en la otra dirección- Estoy de vuelta en veinte minutos- silbó a su perro y se fue, dejando a Seokjin solo delante de la puerta cerrada.
El último capítulo de hoy pero mañana seguimos!!!! Enserio gracias gracias y más gracias por el apoyo y respeto ❤ I Purple You 💜💜💜 Besos voladores 😚😚😚
