Mio - "Yoonjin/Sin" (Dominación)

Capítulo 50: "Horrible secreto"

🚫 Capítulo con contenido super sensible 🚫
Leer con discreción.

De vuelta a casa, Yoongi arrojó sus llaves en el recipiente de metal de la cómoda. 

-Quítate los zapatos, ven a la cocina- cepilló la parte superior de la cabeza de Seokjin con tres dedos mientras se sentaba para desatar sus cordones, y luego se preparó un batido nutritivo para el desayuno.

Seokjin se sacó los zapatos, fue a la cocina y observó cómo una gran cantidad de espinacas, col y plátano se metían en el Vitamix.

-¿Te gusta el mango?- Yoongi llenó la licuadora con dos tazas de agua y levantó una fruta para que el otro hombre la viera.

Seokjin se encogió de hombros.  Nunca había comido algo así antes y no estaba seguro de si quería intentarlo.

Yoongi también se encogió de hombros, presionó el botón de su aparato de cocina de $900.

-No hay respuesta, no hay mango- y fue a buscar su billetera. Sacó $250 y se los entregó a Seokjin- Es lo que ganaste esta semana, trabajando para mí.

Seokjin lo tomó, sin saber qué hacer. No sabía que estaba ganando dinero extra. Y seguro que no tanto.  Miró a Yoongi y luego al dinero que tenía en la mano. Lo puso en el mostrador y lo contó, haciendo dos pilas, dando una a Yoongi. 

-¿Ahora un cuadrado?

Yoongi lo devolvió, sacudiendo la cabeza. 

-Es tuyo. Me das mis $50 esta noche después del trabajo, luego puedes cruzar una casilla.

Una pequeña sonrisa de felicidad se movió sobre el rostro de Seokjin. Recogió todos los billetes, los desmenuzó y se los metió en el bolsillo del pantalón. 

-Gracias.

Yoongi lo miró de reojo mientras apagaba su licuadora y llenaba un vaso y una taza roja. 

-Seguro que ya tienes mucho dinero. ¿Qué estás haciendo con eso?

Seokjin no respondió, empujando su pecho y su barbilla hacia fuera desafiando, pero luego encogiéndose levemente de hombros.

-Segundo llamado de atención por hoy- Yoongi se inclinó para hablar junto a una oreja pálida- Una tercera vez sin respuesta significa castigo. ¿Cierto?

La culpa se disparó instantáneamente a través del estómago vacío de Seokjin.

 -Sí.

-Bueno- Yoongi le entregó el vaso y la taza- Desayuno. Siéntate a la mesa.

Seokjin caminó lentamente por la sala de estar, tratando de no derramar nada. Su silla hizo ruidos de raspado en el impecable suelo de madera, cuando la sacó y se sentó, encorvando los hombros, cuando tomó un sorbo de la extraña bebida espesa en su taza. Sabía a hierba con plátano. Bebió de nuevo y se limpió la boca con la manga limpia.