—¡Damas y caballeros! ¡My Hero posé el ranking número!—La aclamada serie es obra del mangaka Toshinori Yagi y será llevado a la pantalla por el estudio Plus Ultra.
—Los actores de esta serie son muy extraños ¡Ni siquiera dan sus nombres!
Izuku realmente estaba entrando en pánico.
Está vez sus fans se habían pasado.
—Lo lamento Gogo-san, Yamikumo-san, tendrán que esperar hasta que podamos despejar el área —les indico el guardia de seguridad.
Escuchó como el pelinegro al lado suyo chasqueo la lengua con fastidio para luego suspirar con resignación.
Izuku no dijo nada, con solo escuchar el alboroto que había afuera sabía que no podrían salir por un largo rato del edificio Plus Ultra. Podría imaginarse el centenar de adolescentes que debía haber afuera con pancartas y banderas de la famosa serie My Hero.
Se compadeció de los guardias que tratarían con ellas. Al contrario de su amigo quién sólo sentía molestia y fastidio.
—Entendido —dijo el pelinegro para después cerrar la puerta en la cara del guardia —Puta mierda, Deku cambiate de una vez y vámonos.
El nombrado confundido con la seguridad que presentaba el pelinegro quiso empezar a replicar de como harían para salir pero antes de poder emitir una palabra se dio cuenta de un pequeño detalle.
Tanto él como el pelinegro seguían vestidos como sus personajes.
Hizo un puchero y su amigo se rió.
—Tardaste mucho en darte cuenta, nerd —la sonrisa pretenciosa que le mostró "Gogo" realmente le molestó pero lo único que hizo en respuesta fue sacarle la lengua.
En el camerino que compartían los dos había un espejo que ocupaba toda la pared y en el se reflejaba la imagen de dos muchachos.
Por un momento Izuku lo miro.
Uno con pelo negro, ojos turquesa y un traje de héroe de color negro con rojo.
El otro con pelo negro también pero en tonalidades verdes en las puntas, ojos rojos y un traje de vestir con guantes blancos.
El héroe Gogo y el villano Yamikumo de My Hero.
Un reflejo que ocultaba mucho.
— ¡Deku apúrate!
— ¡S-Si! ¡Ya voy Kacchan!
Debajo de las pelucas, los lentes de contacto y el maquillaje se ocultaban para que su vida cotidiana no sufriera.
El punto bueno de que nadie supiera su identidad es que podían salir tranquilamente por la puerta aunque hubiera una horda de fans aclamando por ellos.
Bendita sea su suerte.
—Dan miedo —susurro por lo bajo el peliverde una vez llegaron a la estación del metro —Mucho miedo.
—Son solo estúpidas adolescentes con las hormonas alborotadas...que desean que seas su Sugar Daddy —comentó con malicia el rubio.
— ¡Kacchan! —enrojeció de golpe el peliverde —No es justo —se llevo una de sus manos hacia las mejillas tocando delicadamente sus pecas —Es el maquillaje lo que hace que parezca mayor.
Una ráfaga de viento helado interrumpió su conversación, el tren había llegado y ellos subieron.
Se sentían molidos, el ensayo de ese día había sido sumamente difícil ya que estaban llegando a un arco importante de la historia, sumándole el hecho que sus fans se multiplicaban cada día y se agrupaban en el edificio bastante seguido, causándole estrés a Izuku y fastidio a Katsuki.
Seguido de eso tenían exámenes la semana que viene y tenían que estudiar.
Instintivamente llevo su mano hacia la de Katsuki, no como gesto romántico sino como muestra de apoyo, porque sabía que el rubio estaba igual de cansado que él.
El mayor no rechazo su mano ni nada y como Deku iba muy cansado se acercó para que pudiera recostarse en su hombro hasta que tuvieran que bajar.
Algo que el peliverde realmente agradeció.
Aunque no se llevaban mucha diferencia de estatura, era un poco incómodo, iban en un tren lleno, tomados de la mano y apoyados uno contra otro pero aún así ninguno se alejó.
Deku miro el reflejo que había en la ventana del tren y en esté se mostraban ellos tal cual como eran.
Él con su rostro aniñado con pecas, pelo verde hecho un desastre, ojos verdes y unas ojeras muy notarias.
A su lado, Katsuki con pelo rubio en punta, una expresión enfadada aunque en realidad era cansada y unos intimidantes ojos carmesí.
Izuku sonrió, realmente le gustaba más está imagen que la que mostraba en el camerino.
Una vez que llegaron al departamento el rubio fue a cocinar, mientras que el peliverde fue hacer la colada y un poco de su tarea antes de la cena.
Vivían en un departamento bastante grande, a diez minutos de la preparatoria y a cuarenta minutos del edificio Plus Ultra.
Había una habitación para cada uno, una cocina grande de la cual Deku estaba vetado por no saber hacer ni un huevo frito, un salón con sillones negros y la televisión.
Se podría decir que vivían cómodamente y en paz.
Sino fuera porque todas las veces que volvieran a casa Deku se sentía un poco solo.
En parte era porque extrañaba a Inko, pero por otro lado no sabía porque era.
Tal vez debería conseguir un gato.
Ochako se lo había sugerido una vez como una broma pero Deku se lo estaba pensando como algo serio.
Aunque empezar a ser un viejo con gatos a los dieciséis años era un poco patético.
Un golpe en su frente lo trajo a la realidad.
—No tendremos un gato, jodido Deku —el rubio le extendió su plato de comida —Y antes de que llegues a ese extremo te hago salir con la cara redonda.
—Ochako-san está saliendo con Iida-kun.
—Eso no significa que le sea fiel.
Izuku se rió y Katsuki sonrió, el vacío seguía allí pero con el rubio no era tan malo.
Se tenían mutuamente.
El vacío seguro se iría en un tiempo, tal vez una visita a su madre le haga sentir mejor o una salida con sus amigos...claro sino fuera porque estaba saturado de trabajo.
Otro golpe.
—Saca esa cara jodido nerd, me deprimes y haces que mí excelente comida sepa horrible.
El peliverde sonrió con ternura y río.
—Si los de la escuela supieran que dijiste algo tan lindo, seguro no se lo creen.
—Y yo lo negaré y de paso te mataré por cotilla.
Los dos rieron y siguieron comiendo.
Su vida era así de momento, se sentían algo solos, estaban atareados por todos lados y no veían de lo que se perdían.
Ya era hora de que alguien les mostrara todo eso ¿No?
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¿Estrellas enamoradas? [TodoBaku] [KiriDeku]
FanfictionGogo y Yamikumo son las estrellas de la serie televisiva My Hero y son muy reservados acerca de su vida privada. Nadie sabe sus verdaderos nombres. Su edad exacta ya que aveces ambos chicos parecen muy maduros para su edad. Su familia. La última es...