¿Estrellas enamoradas? [TodoBaku] [KiriDeku]

Capítulo 39 : La casa de Todoroki.

—Kacchan, ¿en serio estas bien? Kirishima-kun se fue hace un rato, ya puedes volver a casa. Me sorprendió mucho lo que dijo Todoroki-kun pero aún así no creo que te sientas cómodo, además mañana tenemos clases y tú ropa está aquí...

Bakugou hace rato que había dejado su celular sobre la mesa e ignoraba el incesante murmullo de Midoriya.

Todoroki sentado al lado contrario no sabía si pedirle que le contestará pero al ver la mueca de cansancio en la cara de el rubio, supuso que no era la primera vez que Midoriya se ponía así y esa debería ser una forma de tratar con él que tenía Bakugou.

Se escucho luego de unos segundos un silencio provenir del celular y el rubio por fin lo tomo.

— ¿Terminaste? —pregunto con tono fastidiado.

—Si...—susurro el pecoso al otro lado de la línea.

—Estaré bien nerd —afirmó Bakugou —Comeré y dormiré aquí, ya no hay metro a esta hora. Con la ropa ya veré cómo me arreglo.

El rubio podía imaginar perfectamente la cara de inconformidad de el pecoso, como fruncía los labios y juntaba las cejas en señal de preocupación.

El tonto era sobreprotector con él desde que tenía memoria.

En parte porque esa era naturaleza de Deku y por otra porque el rubio le daba razones para preocuparse.

Escucho el suspiro de rendición de el pecoso.

—Bien, pásame con Todoroki-kun —pidió seriamente.

— ¿Porque quieres hablar con el helado de fresa? —cuestiono el rubio.

— ¡Solo pásame con él, Kacchan! —reclamo Izuku.

Bakugou gruñó con molestia pero aún asi le dio el celular al medio albino que estaba a su lado.

— ¿Hola? —tomaba el celular con cierta inseguridad.

—Ponle una sola mano encima a Kacchan y verás que no solo como Yamikumo puedo ser malvado —amenazó el pecoso.

El bicolor trago saliva un poco asustado, Midoriya no estaba bromeando para nada.

—No haré nada —prometió.

—Está bien...Kacchan suele tener problemas para dormir si está en otro lado, así que estate atento Todoroki-kun.

—Entendido Midoriya —dijo Shoto.

Bakugou lo veía con el ceño fruncido una vez le devolvió el celular, seguro quería saber que le había dicho el pecoso pero mejor no se lo comentaba.

Además la advertencia de Midoriya había llegado un poco tarde. Un par de horas tarde.

Estaban aún en el vestíbulo de la casa, era bastante grande por lo que había unos sillones y una mesa que ellos estaban usando. Bakugou había entrado un poco dudoso a la casa de el mayor pero al final había optado por quedarse ya que el último tren a su hogar había partido hace unos minutos.

Todoroki estaba feliz por eso. Porque se quedará aún si no era algo planeado.

Sin embargo lo que no se esperaba es que casi toda su familia estuviera en casa ese día.

— ¡Shoto! —la voz alegre de Hawks le alertó — ¡Bienvenido! ¿Trajiste un amigo?

El rubio mayor estaba vestido con una chaqueta de aviador y unos jeans oscuros, miraba con curiosidad y una pequeña sonrisa a Bakugou.