Capitulo 65

2.2K 150 20
                                    

MATTEO:

Miró como mi chica sonríe mientras cepilla su cabello, me acercó a ella desde atrás y deposito un beso en su hombro.

Amo a esta mujer, estoy totalmente y locamente enamorado de ella.

- Matteo - dice ella dándose la vuelta y apuntandome con su cepillo.

- ¿Qué hice? - preguntó sonriendo y ella niega con la cabeza.

- Sabes como me molesta que dejes tu máquina de afeitar por ahí - dice y yo río.

- No, no te molesta eso. Te molesta que me afeite.

- Sí, pero además me molesta que la dejes tirada. Soy tu novia no tu sirvienta para andar limpiando cada cosa tuya.

- Ya se que eres mi novia - digo con el ceño fruncido. La tomo de la mano y la acerco a mi cuerpo - y yo estoy feliz de que lo seas.

- Entonces no me dejes más tus cosas tiradas - dice haciendo un puchero.

Miro sus hermosos ojos verdosos, hoy se encuentran más celestes que verdes.

Espero y nuestro hijo saque ese buen par de ojos. Tendrá a todas las chicas a sus pies.

- Entendido, no quiero perder a mi chica por dejar cosas tiradas - le digo y deposito un beso en la punta de su nariz - ¿Estás lista? - preguntó y ella asiente.

••••••

Salimos de mi edificio en mano. Debemos caminar cinco cuadras para llegar al lugar en donde estacione mi auto.

Mientras caminamos de la mano, Luna se para en una de las tiendas haciéndome frenar de golpe. La miró y ella se encuentra mirando un enterizo celeste que dice "Bienvenido príncipe". Sonrío y la abrazo por la espalda.

- Lo quiero, quiero se se lo pongan cuando nazca - le susurro al oído y ella me mira sonriendo.

- Pensé que dirías que era ridículo - dice y yo río. Puede que lo sea pero todos los padres ridiculizan a sus hijos de cierta forma.

- Me encanta ¿lo compramos? - pregunto y ella asiente.

Entramos a la tienda, dos de una señora bastante pechugona se nos acerca. Viste un vestido muy ajustado color rojo, lleva su cabello rubio y unos zapatos bastantes altos. Miro su rostro y está demasiado pintado. Parece persona sumamente importante.

- Hola - dice sonriendo con sus labios del mismo rojo que el vestido.

- Hola, con mi novio queremos comprar ese enterizo - dice Luna señalando la prenda mirando a la mujer de pies a cabeza.

- Entiendo, ¿que talla busca? - pregunta ella sonriendome.

- Recién nacido - preguntó yo.

Suelto a Luna y camino unos cuantos pasos hasta llegar a un estante donde hay varias prendas de damas. Busco entre esas prendas una para mi novia.

- Seguro te queda maravilloso. Es para embarazadas - le digo y ella niega con la cabeza - vamos a linda, quiero regalarte lo. Se que te gustará.

- No lose - dice insegura.

- Pruebatelo y luego me dices ¿si? - le digo y ella siente.

Se mete al probador con el vestido y yo me siento en uno de los sillones de la tienda.

La mujes del vestido sojo se acerca a mi y me da un papel. Lo miro y es su número de teléfono. Me da un escalofrío.

No es que la señora sea fea, porque no lo es. Pero... Me he afeitado y cuando lo hago tengo rostro de niño pequeño y la señora debe estar rondando los cuarenta.

- No estoy interesado - le digo y la señora ríe.

- Estos chicos, deberías probar a una mujer y no a una niña - me dice.

- Mire no le falte el respeto a mi novia...




Sweet [Lutteo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora