La Guia del Corazón

Cabalgata

El tiempo pasa rápidamente, no me di cuenta cuando las clases habían terminado, pero lo prometido es deuda, íbamos a ir a cabalgar con la guía de los nobles de la Escuela, tendría que ir con otra persona en el mismo caballo, o si no terminare lastima porque a los animales que no poseen magia los termino asustando debido a mi enorme poder.

-Rin ¿Te encuentras bien?- me pregunta Lia mientras seguimos al grupo de nobles.

-No, si subo a un caballo sola, seguramente terminare en el suelo y lastimada- fue mi simple y directa respuesta.

-Siempre hay un chico que este dispuesto a llevarte Rin, solo debes de pedir que alguien lo haga- me recuerda Lumi.

-Acorde cabalgar con Ciel, podremos discutir en paz- comento.

-Ya se me hacía extraño que ustedes dos no pelearan entre si- dijo Lia a medida de que seguimos avanzando.

-Me acuerdo que de niñas, las peleas de ustedes dos, eran a tal grado de que era realmente parte de la rutina verlos discutir y separarlos para que no llegaran a los golpes- la sonrisa de Lumi tras recordar esa anécdota

-Siempre quise saber....¿Por qué se molestan de vez en cuando entre si? Él es el Príncipe Heredero, sera el próximo Rey, pero aun así, Rin puede molestarlo y darle golpes como un chico normal- dice Lia mas curiosa.

-¿Nunca les conté como Ciel y yo nos conocimos?- pregunte un tanto confundida.

Creí que ya les había dicho esa historia, debido a mi primera mala impresión de Ciel, fue cuando creamos nuestra enemistad mutua la cual, con los años, se convirtió en una sincera, aunque a veces desastrosa, relación de Amistad y Rivalidad mutua.

-Ciel y yo nos conocimos cuando mi Madre y yo fuimos invitadas a una pequeña fiesta de té privada con la Reina, mi Madre y la Reina son Amigas intimas, ya que en ese año estuve mortalmente enferma, no pudieron verse, por eso, una vez que me sentí mejor, mi Madre pudo volver a ver a su Amiga- comienzo mi historia.

-La Reina estaba acompañada por Ciel, así tras conversar un rato, Ciel pidió que nosotros dos nos fuéramos un rato a jugar, ya saben, ambos eramos niños pequeños así que era obvio que no queríamos estar con los adultos....Una vez que nos alejamos, Ciel comenzó a ofenderse, me enoje con él y le devolví los insultos también le di una cachetada por lo enojada que estaba...Nuestros Insultos/Apodo, nació debido a la pésima primera impresión que tuvimos mutuamente, por eso somos respectivamente ''Princeso'' y '''Violenta'- sigo contando.

-Ciel y yo, a pesar de que ustedes dos nos conocieron como enemigos, somos cercanos a nuestra manera, puedo incluso decir de que nuestra confianza mutua es al punto de poder pelearnos e insultarnos libremente porque sabemos a la perfección que ninguno de nuestros comentarios es realmente con la intensión de dañar al otro....Solo con aquellas personas que realmente confías con todo tu ser, uno puede actuar de maneras que en condiciones normales, serian inaceptables....Ademas, ¡Es necesario recordar de que a pesar de todo, todos nosotros somos Humanos normales y corrientes! ¡Podemos hacer lo que queramos, siempre y cuando, no estemos ya en la Alta Sociedad! ¡La Escuela es el mejor lugar para dejar nuestras futuras presiones de lado y ser uno mismo!- termino de decir mientras levanto mi brazo con mi mano en un puño para demostrar de que estoy convencida con mis palabras.

La risa no se hizo esperar, esa historia en particular no la estaba ocultando, solo que nadie se atrevía a preguntarme para que la contara...Creo que todas las chicas tienen una historia que contar cuando se trata cuando conocieron a sus Amigos de la Infancia, yo no soy la excepción, pero creo que la mía es mas rara de lo normal, pero buen punto, yo nunca he sido normal así que mis historias tampoco lo serán.