La Guia del Corazón

Sonríe para el cielo

¡Todo es un caos! 

La fiesta de Bienvenida esta a la vuelta de la esquina así que me están preparando para que pueda estar bien con Dil, la moda de este Reino es distinta al de Reino Tempus y el Reino Kanatlar.

El Reino Kanatlar, mi hogar, ponen énfasis en el diseño de vestidos tipo Princesa que se vean hermosos y hace que cada chica y mujer se sienta de la realeza, aun si no pertenecen a esta, vestidos voluminosos que en raras ocasiones dejan vista la espalda y a veces énfasis en la cintura, los guantes a veces son necesarios pero en cuanto a accesorios tienden a ser sutiles pero destacados, para que el que más se destaque sea la Lagrima de la Diosa.

El Reino Tempus es lo contrario en cuanto a su moda, vestidos al estilo sirena y árabe , con énfasis en el cuerpo de las chicas y libertad de movimiento, algunas de las cosas que vi era que algunas mujeres no tenían vergüenza en mostrar sus ombligos por sus faldas a la cadera, una moda mas apta para personas que viven cerca de un desierto....Lo que lleve allí fue el estilo sirena, que destacaba lo que eran las curvas de mi cuerpo que, normalmente, no me puedo quedar quieta porque siempre ando haciendo de las mías, los accesorios allá casi no se usaban mucho pero si era esencial los guantes tipo opera y las pulseras.

Por ultimo el Reino Stellar la moda era una combinación de cosas, la libertad para caminar entre montañas y lo ostentoso para verse bonita, vestidos caracol que era corto en la parte de adelante pero largo atrás, se buscaba una figura poderosa pero al mismo tiempo delicada, los accesorios hechos con piedras preciosas eran lo llamativo, así que era normal llevar desde prendedores a tiaras.

Ahora mismo las Sirvientas están terminando de ayudarme, además de haber creado un verdadero huracán por la habitación, usaba un vestido caracol color verde esmeralda, que buscaba ayudara a destacar mis ojos, la cinta de atrás era de un color rosado pastel, el escote en forma de corazón estaba lleno de piedras preciosas, guantes de opera adornaban mis manos y brazos, por ultimo mi cabello estaba en una coleta con risos en las puntas junto a una tiara con un diseño floral.

-!!!Lady Rinne se ve muy hermosa¡¡¡¡- chillo una de las chicas.

-Ojos esmeraldas, cabello que le da envidia a las flores rosadas y una sonrisa gentil ¡Ya entiendo porque el Príncipe Yildiz estaba buscando a semejante doncella!- comento otra.

-He escuchado los rumores que Lady Rinne se le considera uno de los tesoros del Reino Kanatlar, por como ha actuado con nosotras, puedo ver porque es tan destacada- 

Ese rumor....No era ninguna novedad que la Reina Susana quería que me casara con Ciel, ella junto a mi Madre han estado diciendo, desde nuestro primer desastroso encuentro, que haríamos una hermosa pareja y si contrajéramos matrimonio, ellas podrían convertirse en Familia ya que serian la consuegra de la otra.

-Les agradezco los halagos pero podrían dejar de hablar de mi, ¡Me están avergonzado!- admito mientras coloco mis manos en mis mejillas que se han tornado rosadas.

-¡Que linda!- gritaron todas al mismo tiempo dejándome un poco aturdida.

¡Sus voces son peores que las bombas de sonido que hago! ¡Y eso que esas bombas son capaces de noquear hasta a un grifo!

Puedo escuchar dentro de ese desorden de gritos el toque de una puerta ¡Alguien viene a salvarme de estas locas!

-Su Alteza Yildiz, bienvenido, Lady Rinne ya esta lista- anuncia una doncella que al parecer iba a tener una jaqueca en cualquier momento.

Me acerco a la puerta rápidamente para intentar alejarme de las chicas, al ver a mi Amigo solo puedo sonreír un poco cansada.

-Buenas noches Dil, perdón por la demora, pero podemos irnos...¡Me esta dando dolor de cabeza!- digo esto último casi en voz baja para no me escuchen las histéricas.