Equilibrio

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El barco ha comenzado a andar, las chicas están juntas charlando con nuestras compañeras de este Reino, mientras los chicos miran fijamente los movimientos de estiramientos de los natales para comenzar a imitarlos en la lucha en los mástiles y cuerdas del galeón.

La brisa se siente genial, pero ya me esta incomodando por tener el pelo suelto, así que como ya logre el objetivo de esas Sirvientas Diabólicas, puedo amarrarmelo para unirme a los chicos en los ejercicios y estar en el cielo...Aunque tendré que sacarme los zapatos, ya que estos son incómodos para caminar y mucho mas para escalar.

-Profesor Harold ¿Puedo unirme a la clase de los chicos?- pregunto mientras veo como mis Amigos comienzan los estiramientos.

-Lady Rinne ¿Usted sabe pelear?- me pregunta este.

Solo puedo asentir mientras hago un pequeño gesto a mis Pulseras, en ellas tengo algunas armas, pero yo en particular me especializo en el uso del látigo, el cual es bastante complicado de usar pero me da una ventaja de que no sera utilizado fácilmente en mi contra, ademas de la cantidad de usos convencionales que tiene ya que me permite desarmar enemigos, golpear flechas antes de que estas me lleguen, en conjunto a que me sirve para llegar a lugares altos o salvarme de algunas caídas que he tenido a lo largo de los años.

-Aprendí a luchar cuando era niña y he sido compañera de Su Alteza Cecil, mi Hermano Mayor Azure y de Sir Joel- informo.

-¿Esta segura de que quiere unirse? Sera bastante doloroso para una Señorita como usted-

-Estoy segura, parece divertido, así que realmente quiero intentarlo, si siento que esto me supera, prometo, que me detendré y vendré junto a las demás chicas- digo para tranquilizar al hombre.

Se que se preocupa por todos sus alumnos y alumnas, por eso me pregunto si sabia luchar, porque lo que hacen los chicos es complejo y parece complicado en cierto punto de vista , pero eso es lo que hace tan divertido e interesante para mí, es un desafío que quiero hacer cueste lo que cueste, es una de las tantas formas que tengo para sentirme viva, se que es egoista ese pensamiento, pero cada cosa que encuentro que me darán grandes emociones, es parte porque soy una gran buscadora de la adrenalina que genera el cuerpo en cualquier tipo de situaciones inesperadas que pueda encontrarme.

-Muéstreme su arma-

Mirando mi Pulsera Convocatoria derecha, golpeo un poco y luego hago un gesto de un látigo, mi objeto personal es único porque tengo que hacer con las manos al forma de la cosa que quiero o necesito, es decir un dibujo, el cual se materializara siempre y cuando este dentro de la Pulsera.

Mi látigo es algo que he hecho con la Alquimia, utilizando de materiales las espinas de las rosas venenosas, algunas flores carnívoras, entre otras cosas que logran tener alteraciones de estado, ya sea parálisis, somnífero entre otros, mi arma es anti robo, en conjunto de que esta totalmente personalizado a mi gusto, teniendo en el mango una Acciacina que se ilumina según mis deseos, ademas del color azul cielo cuando esta en el sol y adaptándose al color de la noche si tengo que luchar en lugares oscuros, entre las pocas armas que he hecho, esta es mi orgullo.

-¿Puedes usar armas de corta distancia?- fue la pregunta del Profesor tras ver mi látigo.

-Si, puedo usar espadas- 

-Estoy en una posición complicada, pero ya dijiste que si se te hace dificil, te uniras al resto de chicas, así que Lady Rinne, anda pero con cuidado...-

Doy una reverencia en modo de agradecimiento, así que ahora es el momento de hacerme mis coletas y comenzar los estiramientos con el resto de chicos, se que los de mi clase no harán mucho problema, teniendo en cuenta de que saben de que soy mas fuerte que la mayoría, pero los del Reino Tempus es otra cosa, ya de por si tengo los rumores de la explosión en el Palacio, si no que ahora verán la otra fase donde demuestrare lo rara que soy.

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