Parte 19 "Aunque tú no lo sepas"

102 9 5
                                    


Los altavoces reproducían sin cesar "vamos pa' la playa pa' curarte el alma", la gente se movía al ritmo caribeño alrededor de la fogata dejando marcas en la arena blanca y con botellas de cerveza en sus manos, Simona en cambio estaba sentada sobre la arena con un pequeño short deshilachado que dejaba desnudas sus piernas mostrando ese tono dorado que las caracterizaba, tenía su melena rizada suelta y el viento la llevaba de un lado al otro despeinándola un poco, aunque era bastante usual que su cabello yaciera despeinado, no era algo en lo que ella pensara mucho.

Maria Antonia estaba sentada a su lado, pero a diferencia de Simona no lo hacía contra la arena sino sobre una mantita que había llevado y su cabello estaba recogido, aunque algunos cabellos estaban fuera de lugar y eso no era habitual en la chica de cabello castaño que siempre lucía tan pulcra, pero habían algunos momentos en que María Antonia se dejaba llevar y aparentaba la edad que tenía, ese era uno de esos instantes.

Estaban en esa fiesta de playa porque María Antonia había querido, había un chico del que estaba muy interesada y sabía que él estaría ahí, a Simona no le había importado mucho seguirle la corriente, la verdad a pesar que eran tan diferentes las dos muchachas se tenían afecto, aunque rara vez lo demostraban por la naturaleza de ambas.

Maria Antonia era la única persona que conocía mucho de la historia de Simona y aunque no compartía sus decisiones y lo dejaba en claro cada vez que podía de forma reprobatoria, lo cierto es que a pesar de eso ambas jóvenes se habían acostumbrado la una a la otra aunque no tuvieran nada qué ver.

Así que esa tarde en la playa de San Sebastián no era muy diferente, Simona estaba ahí oyendo sobre Cesar, un sujeto aburrido que era el típico niño pijo que le atraía a Maria Antonia y la otra chica hacía algo análogo por ella, que le contaba acerca de Matthew y todo lo que se había enterado de él en esa semana que había transcurrido.

Evidentemente ni Simona aprobaba las elecciones de Toni, ni su amiga las de ellas, ambas dejaban totalmente en claro que el tipo que habían elegido era bastante inadecuado, en el caso de Simona porque Cesar le parecía soso, con todo y su cabello rubio sedoso, ese tío no tenía nada en su cabeza que aportara y eso que Maria Antonia se jactaba de tener buenos prospectos que alimentaban más los ideales de su madre que ni los de ella.

-¿Por qué estar tras un sujeto a quien evidentemente no le interesas?-Cuestionó Maria Antonia.

-¿Por qué venir a una fiesta tras un chiquillo el cual ni siquiera se ha dado cuenta que estás aquí?-Le devolvió Simona.

-Eso es un golpe bajo incluso para ti- señaló Maria Antonia y Simona se encogió de hombros desinteresada.

-A mi manera de ver las cosas las dos somos determinadas y luchamos por lo que queremos y eso no puede ser malo.

-El tío podría ser tu papá.

-Ambas sabemos que no lo es.

-De verdad deberías retomar la terapia.

-¿Otra vez con eso? Mira Toni que no estoy averiada pa que necesiten repararme.

-No dije eso, sólo creo que has pasado por mucho y que precisamente ya cuentas con un padre Simon.-Dijo su nombre en inglés como a veces solía hacer y Simona se levantó.

-No vamos a tocar ese tema de nuevo.

-¡Simona!-La llamó al ver que empezaba alejarse en dirección al círculo que hacía la gente que bailaba alrededor de la fogata.

Pero Simona no volteo, no había nada que indignara más a aquella joven que tocar temas del pasado y además que tendieran a justificar su accionar en relación a eso, a veces simplemente se tomaban decisiones y éstas no tenían que ver con hechos del pasado, era eso lo que Simona solía decir, para ella nada de su vida estaba mal, aunque muchos tendían a señalarle lo contrario, sabía que no validaban sus decisiones, pero a ella le bastaba con validarlas ella.

Una locura llamada Simona [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora