Recordar, no siempre duele. Arnold Y Helga.

Culminación...

-Mi corazón estaba desecho, buscar a Arnold seria lo mejor, pero no para lo que ellos e incluso yo quisiera, decirle que lo amo, que lo necesito para no ahogarme en esta soledad que oscurece mi vida, debía buscarlo pero no para abrazarlo y decirle que todo estará bien y que las mentiras de otros hicieron que esto llegara al final de esto. No amor mío, no puedo exponerte al peligro y sentirte perdido para siempre, maldita la hora en que regresé, ahora la maldigo al igual que tú anoche hiciste conmigo , si tan solo hubiera ignorado aquella llamada de auxilio de Miriam con tal de hacerme regresar en un intento fallido de solucionar las cosas con mis padres esto no estaría pasando, ahora tú estarías casado con aquella bella castaña de ojos grandes que estabas a punto de volverla tu mujer y yo siguiendo mi rumbo sin sentido como siempre, lo siento mi adorado Romeo de cabellos dorados, si he dar mi propia vida por ti, por este ser que espera ser llamado hijo lo haré, aun con esperanza que cuando todo esto termine vuelvas a mi, por que si este amor es más grande que cualquier cosa terminarás creyendo en mi palabra después de que abras los ojos y entiendas que te amo, que te amo solo a ti, te amo.-Pensaba aturdida.

-¡Helga reacciona!-llamaba Phoebe sacándola de sus pensamientos-hazlo de una vez y acaba con esto, Arnold podría cometer una locura si tardas demasiado.

-¿Locura? ¿a qué te refieres Phoebe?- la miraron ambos confundidos.

Phoebe sabia que habia hablado de mas, pero si no lo hacía ahora talvez mas adelante seria mas dificil de solucionar.

-No se como decirte esto Helga-les dio la espalada pensante y nerviosa- de hecho estoy sorprendida por lo que pasó y me siento un tanto responsable por eso, no debimos confiar en Lila.

-¿Lila? ¿que tiene que ver ella en todo esto?-exige Helga frunciendo el ceño confrontando la.

-Lila... -dudo para hablar... -Lila ha estado seduciendo a Arnold todo el tiempo.

Helga abrió los ojos de par en par con asombro, soltó una ligera sonrisa nerviosa esperando ser desmentida esa confesión.

-¿Es broma verdad Phoebe?-espero respuesta-¿De que hablas Phoebe?, por que dirías algo asi de Lila, tampoco fue de mi agrado pero no creo que ella sea algo capaz de eso, después de este tiempo ella me demostró...

-Te demostró que es una hipócrita aprovechada Helga, Gerald recién me lo dijo, parece que esto lleva bastante tiempo, y esta ocasión le vino muy bien para aprovecharse y poder seducirlo, se lo confesó a Gerald esta mañana que hablo con Arnold.

-No es cierto Phoebe-retrocedió la rubia cubriéndose los oídos sentándose sobre aquellas escaleras viejas- Arnold no puede hacerme esto.

-No he dicho que Arnold cediera ante sus provocaciones, según Gerald él ha tratado de alejarla, por eso su insistencia a que se marchara de la casa , pero siempre que te planteaba algo asi tu te negabas, no te culpo amiga, creo que todos vivíamos ingenuos ante esta Lila.

-Sabía que no era de fiar Helga, nunca me dio buena espina-dijo Jake consolándola.

-Eso no justifica el que no me dijera nada Phoebe y aun asi me hace sentir que yo soy una cualquiera, es un idiota, pero ahora ya no importa-refunfuño Helga cubriéndose el rostro en frustración.

-Claro que importa, basta Helga, el no te dijo nada porque tenías suficiente con los problemas que tenías con tus padre y Olga, pero si tu dejas esto de esta manera lo único que conseguirás es que La gane en esto, Gerald sospecha que tal vez Lila estuviera unido a Damien en todo esto.

-No, no lo creo que ella tiene otras intenciones-Dijo Jake molesto.

-No puede hacerme esto Arnold, no puede...-decía Helga herida rodando unas cuantas lágrimas de sus ojos.