Capítulo 34

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_¡Vamos Dania empuja!-insiste la doctora.

_¡Ahg Dios, uff ah!-gimo del dolor, mientras empujó lo más fuerte que puedo.

Sudor resbalaba por mi frente y mojaba la bata que traía puesta, empujó de nuevo y trato de respirar.

_¡Ahh ahs ahg!-vuelvo a empujar.

_Vamos una última vez, ya viene-me alienta.

_¡Ahg Demonios uff!-aprieto mis dientes y mis manos mientras empujó.

Mi cuerpo se relaja al sentir que Destiel sale de mi por completo de una vez por todas, dejo caer mi cuerpo en la camilla y trato de respirar con normalidad.

Levanto rápidamente mi cabeza al sentir un tierno y delicado llantito, la doctora me enseña a un pequeño piel dorada que mueve sus pies y brazos para todos lados mientras llora.

_¡Felicitaciones es un precioso niño!-la doctora lo deja sobre mi pecho.

Lo sujeto con mis manos temblando mientras lloro desconsoladamente, acarició su mejillas regordetas.

_¡Hola mi amor, hola mi bebé!-hablo mientras beso su frente.

Destiel deja de llorar mientras sigue con los movimientos de sus pies y brazos.

...

Me encontraba caminando en el pasillo del hospital de un lado para el otro, moría de los nervios que recorrían mi cuerpo entero.

_Tranquilo Derian siéntate, todo va a salir bien-habla Mike.

_No puedo Mike, estoy nervioso.

_No estés así tú tranquilo-habla mi padre.

_¿Y si algo sale mal? ¿O si...-soy interrumpido por mi madre.

_No pienses eso, nada va a salir mal-mi madre me tranquiliza.

Asiento y comienzo a morder mis uñas, mi cuerpo se detiene de golpe al sentir un pequeño llanto que invade todo el pasillo.

Observo a todos los que estaban esperando lo mismo que yo, me miran sorprendidos y confusos.

_¿Será mi hijo?-les pregunto.

_No lo sé-habla Rose.

Una doctora sale sonriente junto con una libreta en sus manos.

_Familiares de Dania Snowboard-habla viendo a todos los presentes.

_Yo, yo soy su marido-hablo acercándome a ella.

_Felicitaciones acaba de nacer un hermoso niño más que bien-habla sonriendonos a todos.

De inmediato comienzo a llorar de la emoción era padre oficialmente, mi hijo ya nació, no lo puedo creer.

Mis familiares me abrazan mientras me felicitan y lloran desconsoladamente junto conmigo.

_¿Puedo pasar a verlos?-pregunto limpiando mis lágrimas.

_Si por supuesto, venga conmigo.

Sigo a la doctora que me guía hasta otra puerta blanca, se detiene enfrente de esta y voltea a verme.

_Están adentro, pase señor.

Asiento y empujó la puerta con mis manos, para luego encontrarme con Dania acostada en la camilla cargando en sus brazos un pequeño bulto.

Me acercó temblando a ella, está me observa mientras llora beso su frente y observo al pequeño que carga.

Era terriblemente hermoso no tengo palabras para explicar lo que siento, mi hijo es un bebé perfecto.

_¿Quieres alzarlo?-pregunta Dania mientras me sonríe.

_S-si-hablo asintiendo con mi cabeza.

Dania me lo tiende con cuidado, lo cargo en mis brazos por primera vez y algo estalla dentro de mí. Lo tenía en mis brazos conmigo, Destiel abre sus ojos y levanta la mirada de a poco, sus ojos se conectan con los míos por primera vez. Eran de un verde intenso al igual que los de Dania, saco las preciosas esferas verdes de ella. Observo su pequeña nariz igual que la mía, era mi reflejo en todo sentido, lo único que tenía a Dania eran sus esferas verdes.

_Hola hijo, yo soy Derian tú papá-Destiel me observaba mientras chupa sus manitos.

Me acerco a sus mejillas regordetas y dejo muchos besos sobre estas, Destiel cierra sus ojitos y comienza a llorar.

_Ay no lo siento hijo, perdón no lo hago más-susurro alejándome un poquito de él.

Destiel, mi hijo abre sus ojos de nuevo y deja de llorar para volver a meter su mano a la boca.

Observo a Dania que me mira sonriente mientras llora desconsoladamente, me acerco a ella y uno nuestros labios.

No podía amar más a está mujer, me está regalando uno de los mejores regalos que podría tener cualquier ser humano.

_Te amo Dania-susurro contra sus labios para luego dejar un pequeño beso.

Me separó de ella y observó a mi hijo en mis manos, me mira atento como si lo entretuviera.

_¿Tienes hambre hijo?-pregunto mientras acarició sus mejillas.

_Me parece que si-susurra Dania.

Asiento y se lo tiendo, Dania descubre uno de sus pechos y lo ayuda, Destiel comienza a succionar mientras juega con sus manos.

_Es perfecto-hablo observándolo enamorado de él.

_Si, es igual a ti-Dania me observa conectando miradas.

Sonrió y uno nuestros labios mientras acarició sus mejillas, nos separamos por falta de aire.

_Si lo es, pero tiene tus ojos-hablo mientras acaricio su cabezita.

_Si es lo único que saco de mí-habla riendo.

Destiel comienza a cerrar sus ojitos de a poco mientras deja de mover sus manitos y pies, Dania le quita su pecho de la boca y lo cubre con mantas, ya que se había dormido.

_Dania-susurro mientras la observo sonriente.

Ella levanta su mirada y me observa con las mismas esferas verdes que tenía Destiel, no cabe duda de que esta chica es perfecta en todo sentido.

_¿Qué?-susurra al ver que yo lo único que hago es observar sus ojos como idiota.

Sonrió y bajo la cabeza avergonzado, Dania comienza a reírse mientras cubre su boca para no despertar a Destiel.

_Que patético ¿Dónde quedo el chico arrogante y creído que conocí?-habla riendo mientras acomoda mi cabello.

_Se fue al carajo por tú culpa -susurro acercando mis labios a los suyos, joder Dania podía ser tierna y preciosa, pero ardiente y exitante a la vez. Tomo su labio inferior entre mis dientes y tiro de este.

_Te amo demasiado Dania-susurro viéndola a sus ojos.

_No digas eso-habla alejándose de mí, mientras observa a Destiel.

_¿Por qué no? Si es lo que siento porcelana-hablo besando sus mejillas.

_Lo dices para hacer más linda y tierna está situación, no por que realmente estés enamorado de mí, te recuerdo que esto y nuestro hijo es un contrato-habla señalando el espacio que había entre ambos y luego a nuestro hijo.

_Dania yo...-soy interrumpido por un doctor que entra a revisar al bebé y a Dania, sacandome de la habitación.

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