Chiquis [México x Canadá]

117.

No lo recordaba, por más que lo intentaba, en su memoria no había nada de lo que dijo Canadá. Al menos no algo certero, porque hubo una época en la que pasaba más tiempo alcoholizado o drogado que despierto.

Debió ser en esa época, pero necesitaba ayuda para aclarar esa duda, sin embargo, el canadiense no quería hablarle... Más bien, no podía, porque parecía querer llorar mientras cruzaban un par de palabras.

—¿Y ahora que chinga'os hago?

Suspiró frustrado, sin saber a quién recurrir, pero decidido a averiguar lo que su mente borró. Aunque le tomara meses.

Porque quería pedirle perdón a Canadá.

Y quería recordar cómo el güerito lo cuidó.

—México —Canadá intentó sonreír—, ¿buscas a mi hermano? Creo que...

Una flor fue colocada frente a su rostro, el tricolor parecía somnoliento, cansado, y el silencio se volvió incómodo entre ambos.

—No hagas esto —susurró sin tomar la flor.

—No recuerdo —México suspiró antes de llevar la flor a su pecho—. Por más que intento... Yo...

—No hablemos de eso.

—Pero estoy investigando —dijo firme— y lo voy a recordar..., pero hasta eso... Lo siento —suspiró—, y volveré a disculparme las veces que sean necesarias.

Canadá no dijo nada, aun sentía dolor en su pecho y ganas de llorar, pero también sentía un poquito de ternura.

Tomó la flor.

Sujetó las manos del tricolor y con cuidado se apropió de la flor amarilla. Sonrió sin mirarlo, sin querer recordar las cosas feas. Solo vivió el momento.

—Es bonita.

—Tú eres más pinche hermoso que esta flor —sonrió.

—Nos veremos luego..., México.