Chiquis [México x Canadá]

176.

#Defectos.

México suspiró entre dormido y enfadado con la vida, porque abrió la puerta y no había nadie.

—Malditos escuincles babosos.

Pero antes de cerrar, se fijó que en sus pies había un papelito. Lo recogió, lo revisó y verificó que era para él.

—Quién sigue usando eso de las... cartas.

El aire se le fue, porque había una posibilidad de que Canadá fuera el idiota anticuado y se sintió tan feliz... Pero luego recordó cuando vio a su maple besar a Lituania... Y arrugó el puto papel para lanzarlo lejos.

Pero no pudo.

Porque no engañaba a nadie. La verdad estaba esperando alguna señal de Canadá. Lo que fuera... Y ya era un mes... Un mes sin que el culero le dijera algo. Puto cobarde de mierda. Ni siquiera a rogarle o a pedirle perdón se animó.

—Más te vale que sea bueno.

Lo leyó con rapidez, y con cada palabra, confirmaba que era su maple. Porque la letra era hermosa, podía sentir la amargura del culpable, y se fijó en la marca de unas lágrimas al final.

"Sabes que tengo un defecto marcado. Soy manipulable. Soy débil. Soy un tonto... Y lo siento... Te mereces algo mejor que yo, mi amado Mexique."

—Sí eres tú, pendejo —México se limpió las lágrimas—. Pero así no te puedo perdonar, culero.

Se deshizo de la carta ese día, y de las de los siguientes, porque no era tan fácil.

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Canadá seguía escribiendo cosas que no pensaba entregar, seguía cuidando de México entre las sombras, pendiente de que no dejase de alimentarse, ayudándolo cuando tenía problemas y... mirándolo de lejos.

Porque lo amaba.

Demasiado como para perdonarse el haberlo hecho llorar.

—¡Ya has algo! —Ucrania lo golpeó esa vez.

—Auch, eso duele, Ucry.

—Ya estoy harto de verte suspirar como adolescente enamorado. Sé valiente y dile que lo amas y que lo de antes fue un error.

—Soy un traidor.

—¡Pero puedes disculparte!