Chiquis [México x Canadá]

4.

Canadá y México se hallaban viendo una película romántica juntos, como era común cuando tenían tiempo libre que compartir. El canadiense se entretenía acariciando los cabellos del tricolor, con su brazo libre rodeando la cintura del mexicano, tan tranquilo y relajado como lo estaba generalmente.

Hasta que una escena sexual apareció.

Fue entonces que Canadá se tensó e inmediatamente dejó de tocar a México. Cualquiera se daría cuenta de la incomodidad del bicolor, y el mexicano no iba a desaprovechar la ocasión, por eso sonrió maliciosamente antes de girarse hacia el amorcito de su vida.

—Oye, maplecito... ¿Te puedo decir algo?

—Sí —jugó con sus dedos, desviando su mirada.

—Si con estos hermosos dedos —acarició esos dedos y los entrelazó con los suyos— me tiras del pelo... —sonrió—. Yo te gimo como gata en celo.

Canadá tardó solo segundos en sonrojarse a más no poder. Porque entendió esa frase completa.

—¿Quieres? —susurró el tricolor.

Pero Canadá había dejado de funcionar.