Empire (The Hunt) [Finalizada]

Episodio 115

— Hasta ahora, han sido cuidadosos.— Dijo Jennie. — Eso tiene sentido si es legítimo. Temen por su vida, y con razón. Si te exponen, eres prescindible. Tendrá que confiar en Camila para no revelar su identidad.

Lisa dijo: —Y él no sabe a dónde va o quién los llevará allí. Tal vez piensa que va a ser capaz de reconocer a su destino y darle a Camila más información. Puede que tenga razón, pero preferiría seguirlo y encontrar el lugar por nuestra cuenta.— Lisa se detuvo, ladeó la cabeza y sonrió.

— Tenemos visitas.— Las puertas se abrieron y Merihan y Adelle entraron. El gato Alfa llevaba cueros colorados ajustados, sin camisa debajo del chaleco a pesar del frío. 

Ella era un león de montaña, y el clima de invierno le molestaba tan poco como molestara a los lobos. La fisiología del Vampiro era menos vigorosa menos justo después de una alimentación, pero Merihan parecía tan despreocupada como Adelle en tan sólo una camisa y pantalones de cuero. Sus ojos ámbar brillaron con fragmentos de fuego mientras inclina la cabeza hacia Lisa.

— Alfa.

— Señora de la Guerra.—Dijo Lisa y tendió un brazo, Merihan entró en su abrazo. Merihan murmuró: —Es bueno verte, Alfa.

— Y a ti.— Lisa la soltó y asintió con la cabeza a Adelle.

— Alfa Brimstone. Supongo que recibió nuestra entrega.— Adelle siseó con disgusto. —Qué equipo tan lamentable. Están bajo control y espero que hayan aprendido una lección. El tiempo lo dirá. — Jennie se acercó a Lisa y le rodeó la cintura.

— De alguna manera no creo que esta visita es una coincidencia.— Dijo Lalisa. Mabell sonrió y Merihan se encogió de hombros, el elegante encogimiento de hombros de un Vampiro.

— Mi Lieja me llamó para que volviera de las montañas. — Dijo Merihan. — Parece que estamos a punto de ir a cazar un Vampiro renegado.

— Y un gato renegado.— Dijo Adelle con oscuridad.

— Ariana y Elise.— Lisa asintió con la cabeza. — Lauren querría a su señor de la guerra. Y el gato Alfa quiere lo que le es debido.

— Estamos en nuestro camino a la guarida de mi Lieja,— Dijo Merihan. — Podemos tomar una pelotón de ataque con nosotros.— Lalisa miró a Jisoo.

—Preparar a nuestros lobos para ayudar a nuestros aliados.—Dijo Lalisa.

—Sí, Alfa.— Dijo Jisoo y salió.

—Solar ha ido a rastrear a Elise.— Dijo Lisa. —Tenemos un Centuri vigilando al humano que nos llevará al laboratorio de Arango.

—Si no escuchamos algo esta noche, vamos a tener que esperar hasta el siguiente amanecer. Ariana se distraerá entonces, y sus Vampiros estarán débiles o somnolientos.— Dijo Merihan.

—Tus Vampiros serán más débiles también.— Dijo Lisa. Los colmillos de Merihan brillaban.

— No todos.— Dijo ella.

— Entonces estoy muy contenta de que la Lieja Jauregui, te haya llamado de vuelta.— Sonó el celular de Lisa y todo el mundo se quedó quieto.

—Manoban.— Ella escuchó. —¿Cuántos?— La cara de Lisa era tan suave e ilegible como una piedra lavada por el río.

—Merihan y Adelle están aquí. Les Informaré.— Dijo Lisa y colgó.

—Solar ha encontrado la guarida de Ariana, una vieja mansión junto al río. Ella dice que Ariana ha reunido un formidable nido, por lo menos dos docenas de Vampiros y mercenarios. No hay forma de saber cuántos humanos podría estar en el interior.— Dijo Lalisa.

—Es demasiado cerca del amanecer ahora. — Dijo Merihan. —Pero mañana...— Lisa asintió.

—Mañana atacaremos.— Dijo Lisa.